-¡Mi amor!-escucho a Lexi llamarme desde la puerta, salgo del baño y me acerco hasta la escalera,
-¡Hola!-la saludo,
-Traje la última caja-dice señalándola, -Mañana entrego la llave asi que...oficialmente, vivimos juntos-me rio mientras bajo las escaleras hasta ella,
-Al fin-bromeo tomándola por la cintura y pegándola a mi cuerpo, -Te tengo una sorpresa-le aviso, ella sonríe,
-¿Cuál?-pregunta curiosa,
-Cierra los ojos y no espíes-pido, ella lo hace, -Dame la mano-, cuando me entrega su mano camino guiándola hasta la habitación al final del pasillo, abro la puerta y la guio dentro dejándola parada en medio de la habitación, -Abre los ojos-pido, ella lo hace y mira a su alrededor. Sus ojos comienzan a abrirse cada vez más a medida que se da cuenta de todos los cambios que ha sufrido la habitación.
Para empezar ninguna de mis cosas de entrenamiento están allí, las lleve a la habitación que no estaba usando. Para seguir, durante los últimos días hemos estado trayendo sus cosas y, decidí acomodar su mesa de trabajo, su máquina de coser y las demás cosas que utiliza para trabajar en la habitación y convertirla en su estudio dentro de casa, tiene una buena ventana por dónde entra luz natural, perfecta para que trabaje en casa cuando quiera hacerlo.
-Jax-susurra, -¿Cuándo hiciste todo esto?-pregunta sorprendida,
-No entras aquí hace como una semana y...le puse llave sólo por si las dudas-admito, ella se ríe,
-¿Es para mi?-,
-¿Y para quién más va a ser?-me burlo, -Claro que es para ti-aseguro, -Tu estudio en casa-, se voltea y mira la otra pared, la que quiero que vea,
-Dios-susurra,
-Ese es un toque especial-admito, he hablado con Gabe, el fotógrafo de Cosmopolitan, y por una suma que no voy a admitir jamás, conseguí fotos del desfile y de la sesión de fotos de la revista,
-¿De dónde las sacaste?-,
-Tengo mis contactos-admito, ella se ríe y corre hasta mi, colgándose de mi cuello,
-Gracias por hacer esto-susurra rozando su nariz con la mía, -Gracias por darme un espacio-sonrío,
-Si yo tengo uno, tu te mereces uno-aseguro,
-Gracias-dice, -Vamos a cenar así vas al bar-,
-No abrimos los lunes-le recuerdo, -Ni los martes-, ella sonríe,
-Lo olvidé-admite, -Estas nuevas reglas que has puesto me confunden-se burla, -Pero me encanta tenerte en casa por más tiempo-,
-Y a mí me gusta estar en casa-admito.
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Hay Lugar Para el Amor (Libro 3 de 3)
Teen FictionAlexis suele decir que los hombres pertenecen a la raza de los idiotas, pero aun no se ha dado cuenta que las mujeres también tienen sus momentos ¿Será capaz de dejar de lado su orgullo para escuchar lo que su corazón está tratando de decirle? ¿Nat...