37.

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Es Miércoles, básicamente, después de lo que vi él Lunes en la fiesta de Jake, me fui. No por que haya visto lo que vi, para nada, mas bien porque que mi mamá estaba preocupada.
Como sea, Matthew ayer no vino a la escuela, pero mucho mejor para mi, no sé por qué, no quiero verlo aún.
Cuando lo vi con Kat sentí algo como...decepción, tal vez. No sé por que, pero creí que yo le gustaba, es decir, me invito a salir un par de veces y me beso.
Pero tampoco es que me guste Matthew como para estar celosa,¿ o si?
No.

(...)
Las primeras tres clases ya habían pasado y la próxima era junto a Matthew. Genial, justo lo que necesitaba.
Entré a la clase y me senté en una banca que estaba a un lado de la ventana que daba vista al pasillo donde habían un par de alumnos charlando y otros cuantos corriendo a sus próximas clases.
Después de unos minutos donde aún no llegaba él profesor, Matthew entró y se sentó un par de lugares adelante de mi.
Después de unos 20 minutos de clase escuché algo raro en él pasillo, volteé justo cuando él puño de un chico desconocido para mi golpeaba en la mejilla a Kendall.
Miré a todos en él aula de clase y nadie parecía haberlo notado.
Volví a mirar y Kendall yacía en él piso.
—Profesor, ¿puedo salir un momento?.—Me levanté en medio de la clase, él profesor asintió con la cabeza. Mire de reojo a Matthew que me miraba extrañado, me siguió con la mirada hasta que llegué con Kendall que seguía en él piso. Me agache a su altura y vi que tenía una pequeña herida en él labio y una en la ceja.— ¿Que sucedió, te encuentras bien, quien era ese tipo?.—Kendall hizo un gesto de dolor cuando involuntariamente toque su herida que tenia en él labio. Diablos, no debí hacerlo, lo lastime. —Oh, perdón.

—Estoy bien, ¿por qué no estas en clase?.—Lo ayudé a levantar del piso y otra vez hizo una mueca de dolor, creo que se lastimo la espalda también.

—Vi que ese tipo te golpeaba y quise ayudarte.

—Gracias.

—Te llevaré a la enfermería.—
Involuntariamente volteé a la ventana del salón y vi a Matthew un poco ¿enojado? Tal vez.

Cuando llegamos a la enfermería le explique todo a la enfermera, nos hizo esperar hasta que los padres de Kendall fueran por él ya que Kendall dijo que tenia un pequeño dolor en la espalda.

Me senté a su lado, él me miro y sonrió.
—Me alegra que te preocupes por mi...Gracias.

—No hay de qué.—sonrei. Él me miro unos segundos, sonrió. Pasó un pulgar por mi mejilla y la acarició.

—Te extraño.—se acercó, de un momento a otro junto nuestros labios en un beso.
Kendall me beso.

(...)
Era hora del almuerzo, Kendall ya se había ido. Justo después de lo que paso sus padres llegaron haciendo el momento aún mas incómodo.

Me senté en una de las mesas vacías en la cafetería, después de un rato llegó Cassie y Thomas.

—Hola.—los saludé.

—Escuché que fuiste con Kendall a la enfermería.

—Si...

—¿Y...?, ¿que sucedió?.—Cassie sabía que algo había pasado. Ella me conoce.

—El, ya sabes...Me besó.—Cassie abrió los ojos como platos.

—¿Volvieron? Dime que no.

—No.—Ahora su cara era de alivio.—Fue muy incómodo todo.

—Si, me imagino. Besar a tu ex no creo que sea muy agradable.

—¿Besar a quien?.—Matthew interrumpió.

—A nadie.

—Asi qué... Fuiste a la enfermería con Kendall.

—Si.

Camila. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora