The Curb. |Mature| |h.s, au| -Español-

Bonus chapter, 2.

Estoy de pie frente a la gran ventana; viendo como las nubes oscuras dejan caer gotas pesadas de lluvia. El sonido de un trueno me sorprende y mi mirada preocupada se dirige al reloj de pared.

Desde mi teléfono le llamo a Harry, cierro los ojos y tomo una respiración profunda mientras espero a que conteste. Al igual que las tres veces anteriores, la contestadora me invita a dejar un mensaje de voz.

Me alejo de la ventana molesta y comienzo a caminar de un lado a otro.

Un segundo trueno se escucha y maldigo en voz baja, sintiendo el enojo crecer dentro de mí.

Estoy molesta con Harry, furiosa. A pesar de mi protesta de que el clima no era seguro para que él y Sarah salieran, se escapó con ella cuando tome una ducha. Han pasado dos horas y ambos, padre e hija, no han dado señales.

La preocupación me come viva al esperar quince minutos más y volver a llamarlo, lo cual fue en vano. Lanzo el teléfono al sofá soltando maldiciones hacia el mal clima, y sobre todo a la conducta obstinada de Harry.

El sonido del timbre hace eco a través de la casa, mi postura tensa se relaja pero al mismo tiempo, aumenta.

Rápidamente camino hacia la puerta y la abro de par en par.

Mi mirada molesta cae primero sobre Sarah, está sosteniendo una caja más grande que ella en brazos, Harry tiene sus cejas alzadas mientras mira su celular, probablemente notando mis llamadas perdidas.

"¿Quieren explicarme donde han estado?" Pregunto bruscamente una vez que han entrado y la puerta ha sido asegurada.

Sarah no me presta atención, simplemente intenta tomar la gran caja rosa que ahora se encuentra tendida en el suelo.

"Mírame cuando hablo, jovencita." Cruzo los brazos sobre mi pecho. Cuando ella vuelve a ignorarme, ruedo los ojos: "¡Sarah!" Eso parece captar su atención y ella se endereza, mirándome con su pequeño ceño fruncido antes de mirar a Harry, esperando a que el intervenga y la rescate de mí, como siempre.

"Oh no, tu padre no te salvará esta vez. Es tan culpable como tú." Por encima de mi hombro miro que Harry se encoge de hombros. "Ahora dime por qué saliste sin el permiso de tu mamá."

"Quería una casa de muñecas." Responde mirando hacia la gran caja e intenta levantarla otra vez.

"¿Por eso salieron?" Esta vez, mi pregunta está dirigida a Harry, quien se acercó a Sarah ayudándole a levantar la caja recién comprada. "¿Es en serio Harry?" Pregunto frustrada. "Estaba preocupada, y ¿estaban comprando una jodida casa de muñecas?

"Lenguaje, nena." Harry responde con una sonrisa divertida. Le murmura algo a Sarah, ella asiente y lentamente se dirige a su habitación arrastrando la casa de muñecas detrás de ella.

La observo hasta que llega a su habitación solo para asegurarme de que no tropezara al arrastrar un objeto más grande que ella. Cuando desaparece dentro de su habitación, mi atención vuelve Harry. Ahora está delante de mí, y aquella sonrisa sigue presente en sus labios.

"¿Qué es tan divertido, Harry?" Pregunto molesta y su sonrisa se extiende un poco más antes de acercarse e intentar envolverme en un abrazo.

Doy un paso atrás y niego con la cabeza, plenamente consciente de que tan pronto como este en sus brazos, todo mi enojo se esfumara. Él tiene ese efecto en mí.

"Tengo un vuelo en la mañana, no tenemos tiempo para pelear, te quedas molesta o me dejas compensar el mes pasado." En ese momento toda mi atención está en él, lo demás ha desaparecido.