Chapter 83. Parte 1.

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Harry sonríe al terminar la llamada y mira distraídamente la pared frente a él. Todo el enojo que sintió hacia Louis se ha evaporado después de hablar con el amor de su vida.

Harry podía sentir lo tensa que estaba cuando le habló en tono molesto. Podía imaginarla mordiendo su labio inferior y mirando a todos lados, Harry ríe.

Le había dicho que estaría en problemas cuando llegara a casa y realmente no puede decidir aún su castigo. Ha pasado bastante tiempo desde que hicieron algo y de tan solo pensarlo se excita como no tendrían una idea.

Harry la imagina en cuatro, su trasero hacia arriba con una marca rojiza después de azotarla. Luego la imagina atada en la cama con los ojos vendados y una mordaza en la boca, gimiendomientras la penetra duro y rápido. Después, ella está de rodillas mientras el bombea dentro de su boca.

"Mierda." Murmura cuando al mirar hacia abajo nota una erección causada por simples pensamientos. Al igual que un maldito adolescente.

Un golpe en la puerta lo hace salir de sus pecaminosos pensamientos, se aclara la garganta mientras se sienta correctamente y regresa su atención a los papeles sobre su escritorio.

"Adelante." Habla con la voz más autoritaria que puede hacer. Harry finge estar muy ocupado leyendo un papel hasta que alguien se aclara la garganta.

"Harry, quiero decir, Señor Styles." La familiar voz suena a través de sus oídos y Harry trata de no reírse ante lo asustado que está el muchacho. Probablemente teme que Harry lo saque de su oficina. Lentamente, Harry levanta su mirada y la fija en el chico frente a él, trata de mantener el rostro neutro cuando Louis le sonríe.

"Oh, aquí estas. ¿Tuviste algún problema al desayunar en mi casa? ¿Hubo algún problema en el camino?" Harry se burla tratando de sonar duro, pero sabe que no está funcionando. Louis siempre ha sido así. Irresponsable y despreocupado. Pero por alguna razón, Harry no ha tenido el carácter para despedirlo, quizá porque el chico trabaja para ayudar a sus hermanas o porque los chistes de Louis son agradables, no le tiene miedo a Harry, ni a nadie. O bueno, tal vez no le tiene miedo porque Harry es demasiado bueno con sus trabajadores.

"Lo siento. Su novia me invito a entrar, lo juro. Esta vez no fue mi culpa." Explica con su aguda voz mientras se rasca el cuello.

"Cometiste un error." Harry dice girando los ojos. "Ella es mi esposa, no mi novia. Quiero que seas respetuoso cuando hables de ella."

No es mentira. Bueno, si lo es, pero no a los ojos de Harry. Ha estado pensando en casarse con ella más temprano que tarde, y está seguro de que ella también quiere. Entonces, no hay nada de malo en llamarla su esposa, ¿verdad?

"Oh." Louis dice frunciendo el ceño. "Lo siento, es solo que..., ustedes no tienen un anillo o algo así."

"No necesitamos cosas materiales para demostrar lo que tenemos." Harry se encoge de hombros y Louis asiente inmediatamente.

"Bien, ¿dónde está el paquete?" Harry pregunta y Louis lo mira.

"Está en mi escritorio." Louis responde distraídamente y Harry sonríe asintiendo.

"De acuerdo, tráelo." Harry dice con una sonrisa y Louis amplía sus ojos.

"¿No me despedirás?" Pregunta y Harry se encoge de hombros. Louis se queda ahí durante unos segundos antes de salir rápidamente por el paquete.

"Gracias por tu servicio rápido y bueno." Harry se burla otra vez cuando Louis deja el paquete en su escritorio.

Louis sonríe tímidamente antes de reír.

"Es mi trabajo dar el mejor servicio de todos." Harry se ríe moviendo la cabeza y se recarga cómodamente en su silla mientras Louis sale de su oficina, dejándolo solo con el misterioso paquete.

Harry suspira, sus ojos viajan de la puerta hasta el paquete. Lo toma en sus manos y lo sacude un poco tratando de descifrar lo que tiene adentro. Segundos más tarde, rompe todo el papel marrón y sin cuidado lo tira al suelo.

Es un disco, está envuelto en cinta varias veces haciendo que sea imposible abrirlo. Después de intentarlo por unos minutos, se da por vencido y deja el disco en el cajón de su escritorio haciendo una nota mental de llevárselo cuando salga de la oficina.

El teléfono de su oficina suena, Louis le informa que algunos clientes de Filipinas quieren encontrarse con él. Harry se queja, no tiene ánimos para ser profesional, sin embargo, le dice que los mande a su oficina de todos modos.

Son las siete de la tarde cuando finalmente Harry se deshace de todos los clientes y decide que fue suficiente por el día. Agarra el disco compacto del cajón y se despide de Louis.

Harry en el camino, se detiene en una florería y compra un gran ramo de rosas rojas y negras, las favoritas de su mujer. Harry sonríe imaginando su reacción y luego se muerde el labio inferior cuando recuerda lo que pasará después.

A pesar de que esta emocionado por volver a casa, las dudas sobre lo que contendrá el disco lo atormentan constantemente y decide verlo antes de ir a casa. No necesita distracciones al hacer el amor, y sabe que ese CD lo distraerá.

Harry se detiene en el primer restaurante que encuentra y se sienta en una esquina donde nadie podrá molestarlo, después saca su laptop del maletín y la acomoda sobre la mesa.

Harry ordena una simple ensalada y un vaso de agua para pasar el tiempo, ya que solo está aquí para ver el disco. Luego ya estará cenando con Stella.

"Sal ya." Harry le murmura a la cinta adhesiva irritado y continua quitando una capa tras otra.

Diez minutos después, ha quitado toda la cinta y Harry respira aliviado, toma un trago de agua y luego pone el disco en su laptop, esperando a que inicie.

Frunce el ceño confundido cuando Stella aparece en la pantalla. Su cabello tiene el mismo color de antes, su piel está más pálida y hay ojeras debajo de sus hermosos ojos.

"Harry." Su voz es apenas un susurro y aunque ella sonríe un poco, es obvio que no quiere hacerlo.

"He querido decirte algo desde hace mucho tiempo, pero..., no sé cómo. Es algo horrible. Soy horrible, Harry." La chica del video continúa y Harry siente un nudo en la garganta cuando nota las lágrimas en el rostro de la chica que tanto ama.

A pesar de que es un video, Harry siente su corazón acelerarse al verla llorar, en ese momento, Harry desea regresar en el tiempo, abrazarla con fuerza y besarla.

"Yo sé que probablemente me odiaras después de ver esto, pero, te amo tanto, tanto, tanto." Su voz se quiebra y continúa llorando antes de suspirar.

Ella mira hacia la cámara y la respiración de él se detiene, es como si la mirara directamente a los ojos. Ella en silencio le pide algo, algo que no es capaz de descifrar.

"Yo..., yo no soy la chica que crees. He mentido todo este tiempo. Nunca trabajé para una revista, nunca escribí esos artículos que creías. Yo..." Se detiene y sacude su cabeza. Sus manos limpian sus mejillas y Harry frunce el ceño al ver lo que ella hace, parece que estuviera disgustada de ella misma.

"No quería que llegáramos a este punto. No tenía ninguna intención de enamorarme de ti, Harry. Pero sucedió, sólo. Y me odio por eso, maldición, te amo. Pero por favor, solo.., por favor perdóname."

The Curb. |Mature| |h.s, au| -Español-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora