Canción Para Fantasmas. (Solangelo)

Tiro con arco.

Nico se encontro una tarde fría con Will, el había estado toda la mañana intentado que su puntería con arco mejorara un poco pero no lo había conseguido. En el arco era bastante pésimo.

Entonces Will apareció recargado sobre un árbol y con la sonrisa lánguida que ponía siempre que estaba a punto de hacer algo estúpido o gastarle una broma a Nico.

–Lo haces todo mal, ja, no me sorprendería que acabarás disparando una flecha a tu propio trasero.

–No necesito tu ayuda Solace.

Nico estaba un poco molesto pero también debía admitir que estaba esperando que Will le hablara.

–¿A no?

–No.

Y Nico se esforzó lo mas que pudo para que la flecha diera en el blanco pero cuando salio desviada en otra dirección Will empezó a burlarse.

–Cierra la boca Solace, solo estoy calentando.

–Si claro lo que tu digas.

Lo intento otra vez y en esta ocasión la flecha impacto en la gorra del señor D.
Afortunadamente no supo quien la había lanzado y fue a regañar a otros campistas. Esta vez Will no pudo contener la risa y empezó a carcajearse sosteniéndose el estomago.

Nico soltó el arco y murmuró un "A quien le importa" "Ni que necesitara un arco para matar monstruos" "Que arma tan estúpida".

Will dejo de reírse.

–Eh Nico espera, solo necesitas mejorar algunas cosas.

–Ya. Mi interés en el arco se a esfumado con todas tus burlas.

–¡No puedo creer que haya ocasionado tan trágica calamidad!

Nico rodó los ojos.

–Ahora si me voy.

Y lo iba a hacer pero Will lo tomo por la muñeca y lo arrastro de vuelta a su posición, Nico no tuvo de otra que quedarse.

–Bien –Dijo Will que estaba detrás de el sosteniéndole los brazos en la correcta posición que tenía que tener para disparar el arco, su voz sonaba bajita y Nico tuvo que reprimir un escalofrio– ahora aquí.

Will extendió sus manos hasta tocar las de Nico y le indico como debía colocarlas.

Y luego su mano

Viajo

Hasta

Su abdomen

Nico se sonrojo pero intento no parecer nervioso.

–Relaja aquí Nico –Dijo Will tocando suavemente su estomago.

Nico estaba vagamente consiente de que no era necesario que hiciera eso pero no se atrevió a decirlo en voz alta.

Puso sus manos de nuevo sobre sus brazos y cuando estuvo satisfecho con el resultado se aparto y le indico que tirara.

La flecha dio en el blanco, una tremenda suerte por que de ninguna otra forma hubiera logrado acertar.

Will levantó los brazos y grito un "¡Si!" De victoria.

–No puede ser... ¿Le pediste a tu padre que me ayudara? Porque de ninguna otra forma puede ser eso posible...

–Es solo cuestión de técnica, yo sabia que en cuanto supieras como colocarte tu puntería no estaría tan mal.

–¿Como puedes saber eso?

–Soy el hijo de Apolo tengo una buena intuición hacia esas cosas... ¿Quieres ir a las canoas? Para celebrar, de todas formas no tengo nada que hacer.

–Bien.

Will durante todo el camino hacia el lago mantuvo una charla informal, haciendo uno que otro comentario y chiste del que Nico se reía.

En las canoas no hablaron mucho, la noche había caído y todos los semidioses estaban en la cena, Nico se limitaba a mirar el agua y la luna reflejada en ella.

–Creo que esto fue una mala idea –Dijo Will entre risas.

–¿Porque?

–Porque tengo demasiada hambre y ya todos están cenando.

–Podríamos volver.

Y tras unos cuantos

"¡Hacia el otro lado!"
"¡Demonios Will esa no es la izquierda!"
"¡No puedo creer que no sepas distinguir la derecha de la izquierda por hades!"
"Nico deja de decirme que hacer yo se lo que hago"
"Creo que nos estas hundiendo".

Y bueno después de muchas risas y casi morir ahogados llegaron a la orilla.

Will le tendió la mano para ayudarle a bajar.

Nico la tomo.

–Gracias Will, me divertí.

–Cuando quieras podemos repetirlo.

Nico le dijo a Will que el no iba a cenar.
Will lo miro un poco triste pero le dijo que estaba bien.

–Buenas noches di angelo.

–Que tengas pesadillas Solace.

****

En la oscuridad de su cabaña Nico descubrió algo que no le gusto.

Una sensación, un sentimiento al que no se atrevió a darle nombre.

*****

Ese verano fue el mejor hasta entonces en la vida de Nico.

Pero entonces una noche cuando regresaba de la cena Nico se encontró con su padre el mismísimo señor Hades en la habitación.

–Nico tenemos que hablar.