A la mañana siguiente me levanté muy temprano me vestí y bajé al comedor y me di cuenta que mi padre ya se había ido, así que me fui directo a la empresa, estacioné mi automóvil y fui directo a la oficina de mi padre.
Raquel me dijo que estaba con el señor Coulter, tenía que saber que era lo que pasaba, asi que sin que se diera cuenta me metí en la sala de juntas, ahí había una puerta seguida de un pasillo que conducía a la oficina de mi padre, siempre estaba con llave y por suerte yo tenía esa llave, me quedé en el pasillo escuchando por detrás de la puerta.
—¿Quieres dinero?Dime la cantidad —decía mi padre desesperado
—Creo que no me entiendes, la información que yo tengo es demasiado valiosa —decía Eric de lo más tranquilo
—Dime que es lo que quieres para entregarme esos papeles y acabar con esto de una maldita vez.
—¿Estás consiente de su valor? —pregunta Eric
—Claro que lo sé, si esos papeles salen a la luz todo lo que tengo se irá a bajo, estoy dispuesto a pagar lo que sea —dijo mi padre molesto
—Quiero a tu hija.
—Mi hija no está en el trato, no empieces con ironías, Eric —dijo molesto
—Pues si no aceptas, la afectada será ella, y lo sabes Richard, sabes que esa información puede destruirte la vida y tú nenita descubría la clase de persona que eres.
—Con mi hija no te metas, ella no tiene nada que ver en esto, aparte ¿por qué te apareces en mi vida en estos momentos?.
—Mira Richard, tú sabes porque me aparecí y con que intensiones, al final tu decides...
No entendía que de papeles estaban hablando, ¿Qué había hecho mi padre para estar así de alterado? ¿Quién es Eric?.
Realmente no entendía mucho de lo que estaba pasando y menos del interés de Eric hacia mi, estoy segura que mi papá lo echará de aquí antes de considerar entregarme a ese sujeto por su propio interés.—¿Qué quieres decir con que quieres a mi hija?
No podía creer lo es que escuchaba, ¿pretendía aceptar ese estupido trato?
No puede ser, ¿esos papeles son más importa que yo?—Vaya creo que recapacitas, quiero casarme con ella —dijo Eric seguro
¿CASARSE? No podía creer la barbaridad que ese hombre había dicho, no me conoce, no lo conozco y ¿por venganza a mi padre quiere casarse conmigo?
—¿Casarte? Apenas la conoces —gritó mi padre desesperado
—Es muy bonita, con eso me basta —dijo cínico
Maldito, no me tendrá como esposa ni mucho menos me tendrá para solo tener sexo conmigo.
—Puedo darte todo lo que me pidas pero a mi hija no.
—La quiero a ella —dijo decidido
Mi padre se quedó cayado por unos minutos y después dijo
—¿No le harás daño verdad?
—No, digamos que solo quiero... algo de compañía, una esposa trofeo, en cambio si rechazas mi propuesta la perjudicada será ella... le calculo como unos 20 y yo tengo 35, no sería el primer matrimonio con diferencia de edades —dijo indiferente.
—Dame tiempo de hablar con ella, ¿pero por qué ella? —preguntó desconcertado.
—No lo sé, tal vez me parece interesante —dijo con una sonrisa —tienes dos días, cuando tu hija y yo estemos casados te entregaré los papeles.