Nameless Memories

capitulo: 18

Capítulo 18

—Mae Ri. —Gritó Sam cuando entró a la casa corriendo. — ¿Dónde estás? —Buscó por todos lados, sólo se tranquilizó cuando la encontró en la cocina, estaba ayudando a la señora Hwang a decorar galletas.

— ¡Mami! —Dijo la niña emocionada cuando vio a Sam.

— ¿Cocinaste galletas para mí? 

—Sí, sólo que —La pequeña levantó dos cachos de una galleta en forma de gato. — a Peluso lo atropelló un coche. —Dijo en forma de disculpa por romper la galleta.

—Vamos a darle sepultura. —Dijo mordiendo la galleta. —Están deliciosas, ¿para quienes son las demás?

Había una galleta en forma de vestido, Sam entendía que esa galleta era para Hae Ra, la mayor era diseñadora de moda, trabajaba en uno de los emporios de la moda más importantes de Corea del Sur, pero de un tiempo para acá había dirigido su atención a la ropa para niña, Mae Ri era su modelo favorita, la mayoría de la ropa que vestía la pequeña era diseñada por Hae Ra. También había galletas en forma de un control de videojuegos, una moto, un disco, una flor y un alien. 

—¿Para quién es el alien Mae Ri? —Preguntó Sam curiosa.

—Para mi nuevo amigo, se llama Kim Hyun Joong. 

Sam iba a preguntar cómo había sido el encuentro, pero su celular sonó, era Hae Ra. 

—Potra, ¿no me digas que te volviste a enojar con tu caballo?—Sam escuchar con atención a su amiga. — ¿No sabes para qué quiere verme? —Suspiró. —Está bien, dile que iré. 

— ¿Pasa algo Sam? —Preguntó Geum Hee.

—Debo arreglar un asunto. —Terminó de comer su galleta. —Mae Ri, ¿ya terminaste?

—Sí 

—Sube a cambiarte, irás a medirte el vestido para la boda. —La niña se bajó de la silla y fue se fue corriendo.

Sam ayudaba a eomeoni a levantar el caos que había producido su hija en la cocina. Cuando Mae Ri bajó, ambas se dirigieron a casa de Hae Ra. 

…

—Hola, ¿tenías mucho tiempo esperándome?

—Un poco, nunca pensé que fueras tan impuntual. —So Min se encontraba a la defensiva 

—Es mi gran defecto.

—De seguro tienes peores.

—¡¡¡Uy!!! Relájate o me voy. —amenazó la chica de ojos verdes.

—Lo siento.

—Tengo hambre. —Sam llamó al mesero con la mano. —¿Cuánto dinero traes?

—¿Eh? —So Min estaba sorprendida por el extraño comportamiento de la menor. 

—Querías hablar conmigo ¿cierto? — So Min asintió con la cabeza. —Mi precio es la comida, pero no me quiero verme abusiva.

— ¿Prometes contestar a todas mis preguntas?

—Sí, pero después de comer.

—Trato hecho.

Ambas chicas comieron, estaban nerviosas, el motivo que las unía era Hyun Joong. Una era su pasado y la otra su presente, lo importante aquí era saber quién sería su futuro. Samantha comió mucho y rápido, mientras que So Min apenas pudo probar bocado. 

—Escupe. —Samantha interrumpió el momento de letargo en el que estaba sumida So Min.

— ¿Qué?