--¿para que fuiste a casa de la princesa?--pregunto corinna mirando a marianne leggar a casa
--para nada relevante--respondio ella--¿sucedio algo en mi ausencia?
--si, su cuñada, katerine le espera en la estancia mi señora
--perfecto--sonrio mientras se quitaba su capa de terciopelo negra--ten, llevala a mi habitacion y luego ve a buscar un te para mi
--como ordene mi señora
marianne sonrio y se dirigio a la sala donde katerine le esperaba sentada, siempre era para marianne un honor recibir a katherinne, o cualquier hermana de antony en su casa, era sin duda para ella algo muy placentero tenerlas en casa
--katerine querida
--oh marianne cielo--respondio la mayor mientras abrazaba con fuerza a la pelirroja
--¿a que debo tu visita?
--venia a ver como estabas
--pues como me ves querida, muy bien
--y radiante
--si, lo creo
--supe lo de mi sobrino hace 5 meses pero estaba en mi casa en cambridge y no pude venir antes ¿como te has sentido?
--bien, creo que ya no me duele tanto
--me alegra saberlo ¿y antony?
--¿no esta en casa?
--no llegue y ninguno de los dos estaba crei que salio contigo
--tal parese que no--respondio frunciendo el ceño--¡EVA!
grito, y en menos de un segundo la azabache chica estaba justo frente suyo mirandola con respeto y sumision
--te ordeno que me digas donde esta mi marido
--mi señora, yo no lo se--respondio ella con temor
-- te creo, quiero que me des respuestas, dime donde esta mi marido en este mismo instante
--le juro que no tengo ni la menor idea, pero a lo mejor agnes sepa, ella fue la que mando arreglar la caleza del patron
--muy bien, llamala ahora
katerine miro con imprecion a la pelirroja pero no dijo nada, al parecer los rumores eran ciertos, desde la llegada de los danwork a londres nuevamnete la duquesa era una mujer tosca y cortante, nada parecido a la bella marianne berryclouth
--lamento mucho eso
--no querida tranquila
--¿me mando llamar señora--pregunto agnes aciendo una caravana ante las presentes
--si, quiero que me digas donde esta mi marido ¡ya! y ni se te ocurra decirme que no lo sabes por que ya me dijeron que si
--el patron me dijo que si yo decia algo me golpearia
--pues yo no lo permitire, el no sabra que fuiste tu pero dime ¿donde esta mi marido?
--el salio a visitar a la señora isabel
marianne abrio la boca sorprendida y katerine se paro de un brinco del asiento, y miro con impresion a la mucama
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My Lady: boda arreglada
Historical FictionLibro #01 de la trilogía my Lady Lo último que necesitaba Marianne BerryCloth condesa de Loughty era una boda arreglada a sus 21 años con un hombre del cual no conocía prácticamente nada salvo su nombre y título y que era un hombre ridículamente ri...