Capítulo 23.

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Lucy me mira y me hace una señal muy discreta hacia su teléfono. Le asiento. Mientras tanto Génesis solo tenía ojos para Karla y esta, a propósito le ignora mientras limpiaba su rostro con dignidad y suficiencia. Señala unas sillas dos puestos de por medio entre nosotras. Reviso el teléfono, y le escribo un texto rápido a Lucy.

Alex: "¿Qué sucede?"

Lucy: "Pídele a Génesis que te cuente lo que paso el lunes, luego del frappe y en casa de Karla. Es bastante malo. Tenemos que hacer algo."

El profesor de inglés entra al salón, pero nadie le presta atención y a él tampoco parece importarle.

Alex: "Odio esto. Te extraño aquí a mi lado."

La rubia sube su cabeza cuando lee mi último mensaje y me lanza un guiño, acompañado de un beso.

Lucy:"Es parte de todo esto. ¿Podrás estar sin mi por lo que resta de día?. Karla necesita una amiga."

Me sentí un poco culpable ya que no podía estar ahí para la castaña que era mi mejor amiga también.

Alex: "Claro, pero eso no quita el hecho de que te seguiré extrañando a ti y a tu lengua suelta, y tus dos pies izquierdos."

Sube la cabeza con una expresión de sorpresa e incredulidad, que parece graciosa. Entrecierra los ojos y sonríe. Yo le sonrío de vuelta, dejando ver que era una broma.

Lucy: " Dos pies izquierdos. ¡Tú quisiste bailar conmigo! ¡Y por lo que vi lo disfrutaste bastante!"

Le hago un movimiento con la cabeza, aceptando la acusación.

Alex: "Es cierto. Estoy jugando ángel. Ten buena cacería."

Me mira y me lanza un beso. Yo hago como si lo atrapará en el aire, se me fuera a caer de repente y lograse mantener el control. Luego junto mis manos sobre mi corazón. Ella se ríe mientras se sonroja, y mis manos pican por llegar a ella y tocar su rostro.

- Lamento que hayan quedado separadas por esto.- Murmura Génesis a mi lado, frotándose la cara.

- Oh, no te preocupes por nosotras.- Respondí, restando importancia con un movimiento de manos.- Estamos aquí para ayudar. Bien, con la pregunta interesante que me hiciste antes.- Dije volviendo a la tierra, pero mis ojos jamás se despegaron de la despampanante rubia, aunque ésta estaba hablando con Karla, y por su expresión podía adivinar que de un tema bastante serio.- Besar a la persona que te gusta es lo mejor que puede pasarte en la vida. Es un sentimiento que sale desde el estómago, e inunda tu pecho con un calor... Que es sencillamente inexplicable. Sientes que te vuelves de goma y lo único que te sostiene son sus brazos a tu alrededor. No hay manera de interpretarlo. Solo puedo decirte algo con seguridad, no hay ninguna droga ni nada mejor en este mundo que supere ese sentimiento, y saber que la persona por la cual te vuelves más insana cada día que pasa te acompaña en tu locura.- Digo sintiendo el deseo de caminar hasta mi novia y robarle un pequeño beso en los labios, cosa que realmente me plantee. Tenía esta extraña necesidad de ir hasta allá y pasar un momento con mis brazos en su cintura y sentir sus manos jugar con mi cabello. Lucy voltea a mi dirección, sintiendo que alguien la miraba fijamente.

- Te quiero.- Dice la de ojos caramelo con los labios y yo enloquezco intentando no saltar sobre las mesas para caer sobre ella y comérmela a besos. Yo le correspondo con un guiño mientras mordía mi labio.

A la mierda todo.

Génesis me miraba con una sonrisa pequeña en el rostro, y a pesar de que sabía que ella me necesitaba, estaba segura que no podría quitarme a Lucy de la cabeza hasta besarla una vez más. Ella da un pequeño asentimiento, sin necesidad de mi explicación, dando el consentimiento para poder lanzarme a brazos de mi novia.

She Is My Everything.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora