Babysitter

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Lily contestó a la llamada del brujo quien parecía preocupado y quien temía que en ese instante ella estuviera muerta por causa del híbrido, cuando escuchó su voz normal dio un suspiro de alivio pero volvió a estar perturbado al enterarse de que ella no volvería a casa porque estaría cuidando del vampiro. Llevaba ya un día fuera de casa y encima se estaba preocupando por alguien a quien ella le había dicho incontables de veces que no le preocupaba, no obstante esa acción de cuidarlo demostraba hasta que punto era verdad. Al colgar la mujer miró por la ventana buscando algún rastro del vampiro quien se suponía que debería de haber vuelto, exhaló, volvió a recostarse en la cama y apagó la lampara de noche dado que ya era de día.

-¿Dónde íbamos?- le pregunta al vampiro inconsciente que seguía dentro de la pesadilla y que al mismo tiempo sudaba pero su cuerpo estaba frío lo que significaba que sudaba porque tenía miedo pero no valía la pena intentar entrar en su mente, el hechizo de Esther le impedía- Se que llevamos muchas horas, pero siempre viene bien deshaogarse con alguien que te escuche. Te propongo que hagas lo mismo. Bien. Estábamos en que siempre has puesto a tu familia por delante y que nunca te has preocupado por ti, como cuando sufrías por la muerte de Celeste pero en vez de llorar en el hombro de alguien lo guardabas todo dentro de ti, sin embargo tu siempre estabas ahí cuando alguien necesitaba que lo consolaran. Si tal vez te abrieras un poco más no te dañaría ni dejarías de parecer el hombre honorable que siempre está metido en trajes, a las mujeres nos gustan los hombres sentimentalistas. Según un estudio, claro.

<< En cuanto a mi creo que ya he llegado a mi límite, porque ya no hay nada que pueda sorprenderme o destrozarme. Lo realmente importante para mi ya pasó al otro lado y lo que me mantiene aquí es la ciudad porque me necesitan y porque no es vida para nadie vivir en un sitio donde todos se odian a muerte e intentan matarse a otros. Con la persona adecuada, es decir, yo, podremos llegar a ese paraíso donde vampiros, brujos y hombres-lobo podamos vivir en paz, sin guerras. Quiero lograrlo, quiero pasar a la historia como la persona que logró que las tres razas conviviesen en armonía.

Ella lo observa como mueve la cabeza atemorizado intentando huir de lo que le estuviera persiguiendo y eso le daba pena, es mejor decir que le conmovía de verlo tan asustado y sin poder ayudarlo. Se arrodilla en la cama y sujeta su mano para acariciarle la frente con la otra.

-Marcel si me viera diciendo lo que te he dicho se quedaría impresionado, pero estate seguro que cuando despiertes tu hermano irá a por vuestra madre. Sólo quiero que despiertes de ese sueño y sigas siendo el mismo Elijah de siempre: audaz, elegante, sobreprotector, el que nunca falta a su palabra, el leal, el romántico, el que le vuelve loco tocar una buena composición. Eres el único con quien se puede tener una buena pelea pero sino vuelves el mismo las disputas ya no serán las mismas- esboza una débil sonrisa mientras aprieta la mano con más fuerza.

...

Ethan salió del apartamento pero se quedó recostado en la puerta de la entrada observando a la gente pasear de mientras sacaba de su chaqueta el paquete de cigarros y prendía uno. Lily le prohibía rotundamente hacer acción dentro de la casa porque odiaba el olor a tabaco y odiaba que se quedase por todos lados infestando la casa, conque no tenía más remedio que bajar y fumar para acalmar los nervios. Se preguntaba en cada calada que veía ella en aquel vampiro que la abandonó y que encima le había arrebatado el amor de su vida, como ella siempre decía cuando hablaba de él. Elijah Mikealson no era un santo y esa repentina preocupación por la vida en peligro de un Original le extrañaba hasta el punto de que dudaba si en algún momento ella dejó de amarlo, pero prefería creer que algo extraño le sucedía y que debería de ser una artimaña para acabar con esa familia.

De sus labios dejó salir el humo que se disipó en el aire e instantáneamente volvió a dar una calada pero el tabaco no le surgía efecto contra sus nervios porque estaba desesperado, porque ella nunca lograse sentir ni un poco de lo que el siente a causa de aquel vampiro. Aún quería saber que era lo que Elijah tenía y el no, ¿era porqué el es un vampiro y el un brujo? O ¿porqué era más refinado y elegante que él? En cuanto ella llegara de nuevo al apartamento le preguntaría porque quería saber la respuesta correcta para ver en que cambiar. En cuanto el cigarro se apagó echó la colilla al suelo y volvió a prender otro mientras pensaba en las palabras exactas que le diría en cuanto entrase por la puerta, tal vez le diría «¿Qué tal el señor Mikealson? ¿Sigue con vida?» en un tono irónico pero que demostrase que estaba furioso y no desesperado o tal vez «Espero que avisen con tiempo cuando tengas que volver a hacer de canguro».

The Wicked Girl  | The Originals  #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora