¿Era realmente ella la que estaba frente al espejo? Sus ojos no lo podían creer. Estaba hermosa, el vestido estaba hecho para ella. El color, el diseño, la forma en la que se aferraba a ella...
–Deja de mirarte así –dijo su prima con una sonrisa–. De verdad esa mujer eres tú, Em.
El vestido se ajustaba a su cuerpo y su característico azul contrastaba con su pálida piel. El cabello negro, le caía lacio y sus piernas terminaban en unos zapatos altos que estilizaban su figura.
–Toma –Martina le extendió una hebilla con piedras que lanzaban destellos azules y plata– Quedará perfecta.
Emily se colocó la hebilla y se sonrió al espejo. En pocos minutos pasaría a buscarla Axel y quería estar más que lista. Su prima le extendió un bolso y dentro puso su perfume y ¿Paquetitos plateados?
–Martina... ¿Qué...?
–Mejor prevenir.
–No ¡Martina! –Emily le extendió los profilácticos a su prima y esta no se los aceptó–. Por favor... Martina...
–No te los acepto.
–¡Martina! No me acostare con un hombre en la primera cita. Eso deberías saberlo.
–Eso es porque has salido con mediocres como Tony. Este es Axel Carmichael y es... sexy. Además ¡Mírate! Hasta yo desearía acostarme contigo –Emily hizo mueca de asco– De acuerdo no, pero... estas hermosa.
Martina guardo los profilácticos en la mesilla de su prima y le guiñó un ojo. Emily desvió la mirada y se enderezó cuando oyeron el portero. Emily abrió la puerta y vio al hombre parado en el umbral.
–En el lobby hay un tal Axel que pregunta por ti, Emily.
–Ya llegó –festejó Martina– Ve, ve. Esta noche será la mejor noche de tu vida...
–Vamos linda, te acompaño...
Emily insegura comenzó a pensar en cuál sería el mejor plan para evadir estar con ese hombre repugnante. Entonces recordó que Axel le había dado su número teléfono personal.
–No, no. Todavía nos falta tiempo –lo cortó– Hazlo pasar o... o dile que me espere. Que me espere, que yo ya bajo –sonrió.
Cerró la puerta y tomó el celular ante la atenta mirada de su prima, marcó el número de Axel que atendió al segundo pitido.
–Aqui Carmichael...
–¿Axel?
–¿Emily? Mira estoy atascado entre la setenta y la esquina de tu casa. Un idiota se llevo consigo un VW estacionado. Esto es un desastre... espérame no voy a dejarte plantada.
Emily suspiró aliviada y casi se desmayó. Se sentó en el sofá y sintió como la sangre volvía a su lugar.
–No, no es eso Axel.
–¿Paso algo? -ella no respondió- Emily el silencio es una respuesta o bien un secreto. Y a veces hasta ambos. No me gustan las mentiras y los secretos, menos cuando están en un cuerpo tan bonito.
Emily se llevó una mano a los labios completamente sonrojada ¿Qué tenía ese hombre? ¿Por qué tenía que decir esas cosas?
Emily, dime la verdad, preciosa.
–El portero vino a buscarme diciendo que estabas esperándome en la puerta del lobby.
-Mierda... quédate en tu departamento. El tránsito se está abriendo. Ya llegaré corazón.
–Muy bien. Te espero.
–Emily -dijo con voz calmada- te llamaré o enviaré un mensaje cuando esté en la puerta y deje el auto estacionado. Desde ese punto tengo una buena vista del ascensor, yo mismo te recibiré.
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De amor y tormento #1 "De amor y tormento"
RomanceAxel Carmichael era un hombre con un doloroso pasado. Como parte de las Fuerzas Especiales fue enviado a Irak a cuidar un pequeño pelotón en donde Andy, su hermano, era médico. En un reconocimiento de terreno encontraron a una mujer herida y se la l...