La madre de Axel se sentó en la soledad de su habitación reviviendo un nuevo día triste de su vida.
Creía que nada iba a superar el dolor de la muerte de Andrés, pero hoy había descubierto que no, nada lo superaba como esto.
Estaba perdiendo a Alex, estaba perdiendo a su primer hijo, al pequeñito que la había convertido en madre. Sobre el escenario se lo veía tan bien, tan fuerte, tan recuperado y tan... feliz ¿Qué era lo que había pasado? ¿En qué momento se había convertido en ese hombre? Había pasado tanto tiempo y se había perdido de tantas cosas y se avergonzaba, se avergonzaba tanto...
Se cubrió el rostro y lloró, lloró con toda la amargura que la consumía. Su hijo la había necesitado y ella no había estado, como siempre.
La puerta se abrió y Sarah asomó la cabeza.
—¿Mamá? —Sarah, al verla llorar entró y cerró la puerta con llave—. Mamá no hay porque llorar. Mamita no todo es tu culpa...
—Si ¿Sabías que tú hermano siempre me necesitó y jamás le di apoyo y amor? —Confesó.
La otra quedó en silencio mientras le acariciaba la cabeza con mimo. No sabía en qué momento su madre le había negado algo a Axel.
—¿De qué hablas mamá? Siempre has estado con Axel, siempre.
La mujer negó la cabeza con desesperación.
—No...
—Mamá...
—¡No...! —La mujer tomó las manos de su hija y las besó entre sollozos—. No. Axel siempre me necesitó más que ustedes, mucho, mucho más. Cuando comenzó su carrera militar tu padre y yo estábamos muy felices, pero a medida que avanzaba con sus estudios ni tu padre ni yo nos dimos cuenta que el necesitaba más apoyo, que necesitaba a... palabras de aliento. Se sentía débil ante sus demás compañeros, por sus propios... problemas de salud —Mintió desesperada. Había estado a punto de decirle la verdad a su hija.
—¿Que problemas mamá? Nunca habíamos hablado de esto, siempre fue muy inteligente, mamá.
—Cambió con Andrés —dijo la mujer—. Cuando Andy nació Axel comenzó a estudiar mucho y... y fui muy feliz.
Sarah miró a su mamá, confundida con sus palabras.
—Entonces ¿Por qué estás tan dolida? —preguntó— Si me dices que Axel está bien ¿Qué pasa con eso? Déjalo vivir su vida, deja que se marche ya de las nuestras.
La mujer se secó los ojos y se puso de pie, los celos la estaban cegando. Estaba perdiendo a su hijo por una mujer y ya no iba a recuperarlo.
—Está hecho un hombre —dijo—. Valiente y honrado y no gracias ni a tu padre ni a mí. Ahora tiene otra persona en su vida.
—Una tal Emily Walker. Le agradeció a ella en el acto. Es su chica de turno mamá, alguien sin importancia.
—Es más que eso...
—¿Acaso estás celosa de Teresa? —se rio—. Es ridículo mamá, Teresa Molina es la que le limpia la casa.
—Hay más que eso, mucho más y no lo puedes saber, no todavía, pero tiempo al tiempo.
Aunque el tiempo se le estaba acabando y estaba totalmente en su contra.
Emily se desperezó después de ver una película y perderse en final quedándose dormida en los brazos de Axel.
—Te perdiste el final. Mini no... —pero ella lo interrumpió.
—¡No me lo cuentes! Está noche volveré a verlo.
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De amor y tormento #1 "De amor y tormento"
RomanceAxel Carmichael era un hombre con un doloroso pasado. Como parte de las Fuerzas Especiales fue enviado a Irak a cuidar un pequeño pelotón en donde Andy, su hermano, era médico. En un reconocimiento de terreno encontraron a una mujer herida y se la l...