De amor y tormento #1 "De amor y tormento"

Capítulo 10

Las sombras se habían cernido sobre el departamento y Axel le daba un trago más a la botella de whisky.

—Soy un maldito —tragó whisky—. Soy una basura...

Se puso de pie y fue hasta el armario en donde su traje de gala lo mirada desde el perchero tras un impecable cristal..

—Y todo por ti —escupió las palabras con rabia—. Todo por tu culpa, tu maldita culpa. Me arruinaste la vida. Destruiste todo lo que soy, por ti olvidé todo lo que era.

Abrió la puerta de vidrio y descolgó el traje, las medallas destellaban todas juntas como estrellas, brillos vacíos tapados por los horrores que el corazón coronado tendría que acallar para siempre.

—¿Qué clase de héroe soy? —Se preguntó con una sonrisa sardónica— ¿Qué clase de héroe soy si no pude aceptar nada de lo que pasó? ¿Qué clase de héroe soy que he lastimado a mi Emily?

Los ojos de Emily le recordaban que la había herido. La había herido cuando ella lo único que había hecho era protegerlo, protegerlo de las posibles preguntas que esa mujer le podría haber dicho. Quiso evitar que le hiciera daño y el sólo le había hecho daño a ella.

¿Por qué las mujeres tenías que ser tan... maternales?

Podrían culpar a todos los que quisieran: la fecha, su familia, la insistente camarera, la misma Emily que buscaba algo «un lo que sea» para borrar algo de dolor. Pero la culpa era solo suya.

Pero se había ido.

—¿Axel? —Teresa fue hacia él que tenía el traje en la mano.

El no respondió, solo miró su traje. Ese traje que lo maldecía.

—Dijiste que ibas a venir por la noche ¿Ha ocurrido algo? ¿A dónde está Emily?

—A donde sea, porque se fue —dijo el regresando el traje a su lugar y luego cerrando la puerta de cristal—. Emily Walker se fue, Teresa.

Teresa frunció el ceño.

—Pero ¿Por qué?

—No lo sé. Todo empezó en el italiano y una camarera que le gustaba saber más cosas de mí. Se puso celosa y le hice saber que yo no soy suyo. Que no soy de nadie, porque soy libre...

—¿Se puso celosa de una camarera o se puso celosa de una zorra? —no pudo evitar preguntar Teresa.

Hubo silencio.

—Todo estaba bien esta mañana —recordó Teresa—. Axel...

—Y así va a seguir porque Emily Walker malinterpretó todo lo nuestro.

—Por como llevabas las cosas pensé que era tu novia —dijo Teresa y Axel farfulló un insulto— Axel responde. Tu mismo dijiste cosas muy lindas con respecto a Emily. La trajiste a casa, la amaste ¿Qué paso con todo eso, hijo?

—No es nada, nunca lo será. Se acabó y ahora debo seguir con mi vida normal. Me lo merezco.

—Pero, cariño te gustaba esa chica. Es muy simpática y se preocupa por ti. Tu vida estos días junto a ella era normal y ahora...

—Esa chica —dijo con voz apagada— cree que le pertenezco.

—No. Esa chica hace lo que toda novia normal hace, cuida de su novio ¿No dijiste tú que era tu novia? ¿Que era especial? ¿Qué te habías enamorado?

Hubo silencio.

—¿Que vas a cenar? Porque ya no quiero bebas wiski —le quitó la botella y el otro quiso arrebatársela— ¡Axel!