Capítulo 7

2.4K 137 6
                                    

Al día siguiente Lysange se despertó pronto, tenía que arreglarse, desayunar y salir corriendo ya que había quedado con su padre. Al rato llegó al callejón Diagon y vió a su padre de lejos y corrió a abrazarlo, su padre la recibió con una sonrisa.

-¿Qué tal está mi princesa? -Le preguntó el rubio con ternura a su hija.-

-Muy bien Draco ¿Y tú?

-Estupendamente. -Le dijo a su hija con una sonrisa.-

-Draco, no me gusta tu mujer, recalquemos ese tema, tu hijo es otra historia. -Comentó, logrando hacer reír al adulto.-

-Astoria no es mala, solo es, diferente. -Murmuró, llevándose por sus pensamientos.-

Draco y Lysange dieron un paseo por el callejón Diagon y hablaron de muchas cosas y él la invitó a comer, cuando ya se estaba haciendo tarde Draco llevó a su hija a unos pasos de la casa de los Weasley, se despidió de ella y se fué a su mansión, la rubia vió a su padre irse en su lujoso coche y ella abrió la puerta y entró a la casa.

-Ya estás aquí, no te he visto en todo el día. -Dijo la castaña abrazando a la niña.-

-¿Qué haces Hermione? -Le preguntó la rubia a su madre con miedo de que las vieran así.-

-Calla, no hay nadie en casa. -Le explicó la castaña.- ¿Tienes hambre? -Preguntó a su hija y ésta asintió.-

-Hoy te voy a preparar tu plato favorito, chuletas. -Le dijo Hermione a la rubia, Lysange brincó de alegría al saber la noticia.-

-¿Dónde están los demás? -Preguntó la chica.-

-Se fueron a dar una vuelta al callejón Diagon, pronto empezarán las clases en Hogwarts. -Dijo la castaña con una sonrisa.-

-¿De verdad que no te importa pagarme el material?

-No digas tonterías, claro que no. -Aseguró su madre.-
Lysange se dió la vuelta y se dirigió a su habitación.

(...)

-Hermione cogió su teléfono muggle y marcó un número.-

-Orfanato Divina Caridad ¿Qué desea?

-¿Tricia Bertoni?

-Exacto, usted es Hermione Weasley ¿cierto?

-Sí, quería hablar con usted sobre Lysange...

-Claro, claro, se fué hace unos días de aquí ¿está con usted no?

-Por supuesto, doña Tricia ¿me podría quedar con ella?

-Obvio señora Granger, pero tendrá que pasarse en cuanto pueda con la niña para firmar unos papeles.

-Sí señora, mañana mismo estaremos allí y muchas gracias por cuidar de ella todos éstos años.

-Señora Weasley estoy para lo que necesite ya lo sabe.

-Igualmente, adiós doña Tricia. -Hermione colgó y dejó el aparato en la mesa.-
 
(...)

Al cabo de unos diez minutos se abrió la puerta de abajo, habían llegado Ronald y sus hijos, la rubia bajó a cenar. La cena fue como todas, a lo mejor Ron decía alguna tontería pero Lysange ya se había acostumbrado a eso.

Cuando terminó de cenar subió a su habitación y se dispuso a leer uno de sus libros y al rato se durmió.
Mientras tanto Hermione estaba tumbada en su cama y se le salió una lágrima de la cual salieron una detrás de otra, sus sentimientos estaban revolucionados, sentía culpabilidad por lo que le hizo a su hija y por haber engañado a su marido, tristeza por no haber podido vivir la infancia de su hija, sentimientos por un rubio de ojos grises... ni ella lo sabía, estaba confundida y ya no podía más.

Lysange Malfoy (CANCELADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora