Capítulo 52

1K 54 12
                                    

La estación era lo más parecido a un centro comercial muggle en medio de las rebajas, por lo que debías de examinar cada rincón del lugar y a las distintas personas que pasaban por tu lado, si tu intención no era perderte entre la multitud.

Ya atravesado el andén, quedando a unos pocos metros de la locomotora roja que les devolvería de nuevo hacia Hogwarts, Lysange sintió lo más parecido a unos nervios en la parte de su estómago, como si volver a la rutina la intranquilizara. Segundos pasaron para notar que la persona que andaba delante suya había dejado de caminar repentinamente, obligándo a la Slytherin por poco a desequilibrarse, a causa de su desconcentración.

-¿Qué te pasa Granger? -Preguntó, siguiendo con la mirada lo que su madre observaba con atención.-

-¡Papá! -Gritó Rose, antes de correr hacia donde Ronald Weasley se encontraba, no obstante, Hugo no emuló a su hermana mayor, sino que se quedó junto a su madre.-

-Hugo saluda a tu padre. -Mandó Hermione, sin apartar sus ojos de su justo punto de atención.-

Una exhalación de aire se escuchó, antes de percibir unos pasos, sin muchas ganas, pero es lo que tendría que hacer. Su relación con su padre habría disminuido bastante, Ronald no se preocupaba por él, solamente por su hermana, como si ella fuera su única prioridad ¿Acaso Hugo había hecho algo para merecer aquello? No, no lo había hecho, solamente el dirigirse hacia otras personas como los Malfoy, mientras que Rose, se suponía, que no hacía tal cosa. Sin embargo algunos futuros sucesos podrían cambiar aquel parecer.

-¿Tus dos babys? -Preguntó Lysange, dirigiéndose más allá de donde se veía la enorme cabeza naranja de Ronald Weasley.-

-Cállate Lysange. -Ordenó Hermione, para adelantarse, con velocidad hacia su ex marido, este creyendo que iba hacia él, y sin darse cuenta de quienes se hallaban detrás suyo, iba a hablar, no pudo lograrlo al observar como Hermione no se detuvo delante de él, sino que siguió, al Ronald voltearse, mantuvo su compostura, al saber de que no caminaba hacia él, sino hacia Draco Malfoy e hijo.-

La castaña dejó de caminar justamente a unos centímetros del aristócrata , quien mantenía su mirada inclinada, sin ningún tipo de expresión, no le pareció nada al hombre que ella había conocido en ese último año, pese a eso, Hermione había aprendido a desvelar más allá en él de lo que el resto del mundo podría observar, por lo que sin importarle las cuantiosas miradas que contemplaban el momento atentamente, hablando sobre ellos, inventado divertidas suposiciones, se acercó aún más, sin saber si abrazarle o no, si tocarle el hombro o el brazo, si levantarle el mentón o no hacerlo, se decantó por la primera opción, era consciente de que eso era lo que él necesitaba, por lo que perdió toda su vergüenza, llevando sus manos hacia su espalda, envolviéndole en un reparador abrazo.

-Granger, somos el centro de atención. -Susurró cerca de su oído, una dulce risa se distinguió de cualquier otra.-

-¿En qué piensas? No me importa el resto, tan solo tú, Malfoy. -Prometió, para entonces, conseguir un diminuto encorvamiento en las comisuras de Draco, tristemente no visto por Hermione, aunque pudo deducirlo al sentir sus heladas manos entrelazándose por su cintura, con fineza.-

-¿Cómo te encuentras? -Preguntó Scorpius, aproximándose hacia su hermana.-

-Mejor. -Dijo, su rostro ya no parecía débil, ni mucho menos, sino en mejor estado, eso alegró al Malfoy como nadie se imaginaba.-

-Es estúpida, necesita ordenar sus prioridades ¿cómo puede hacer eso en mi presencia? es asqueroso. -Criticó Ronald, para el cuello de su desordenada camisa.-

-¿No era que seguías con tu novia? -Preguntó Hugo, con bastante curiosidad en sus palabras, sin entender el por qué de todo, el por qué de la situación en la que vivía, con la única información que él mismo observó, su madre volvía a sonreír.-

Lysange Malfoy (CANCELADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora