Capítulo 57

1K 51 9
                                    

Lysange y James seguían encerrados sin saber nada de fuera de la enfermería. Durante esos minutos allí dentro sin Pomfrey, con el único público de un niño de segundo año. Lysange y James se mantuvieron en silencio mientras tanto Lysange le sanaba la herida de su labio con total cuidado, algo que a James le costaba creer en ella, ya que normalmente Lysange no solía ser cuidadosa, hasta ese día. James comenzó a pensar en por qué ese cambio, ya que si eso hubiera pasado hace varios meses atrás no hubiera sido de ese manera, tan perfecto, aunque desgraciadamente no tardó mucho en volver a la realidad, ya que empezó a escuchar bastantes risas de parte de Lysange.

-¿De qué te ríes? -Preguntó James queda cuando ella ya le había sanado el labio y comenzaba a recoger el frasco y las gasas esparcidas por la camilla con una burlona sonrisa.-

-De que deberías de resistir un poco más al agua oxigenada, Jamie. -Ésta vez fue James quién rió, se sentó en la camilla y abrazó la cintura de Lysange, impidiéndola retomar el paso hacia las vitrinas. Lysange vaciló por un momento, pero luego intentó liberarse del atrape de James, entre risas, risas que se hicieron más notables cuando la inmovilización cambió por un tornado de cosquillas.-

-Cuando quieras llamarme así te lo pensarás dos veces. -Aseguró entre felices carcajadas junto a las de ella, carcajadas que no eran correspondientes en justo aquel momento, pero no les importaba lo que ocurría al rededor de ellos.-

Al no poder aguantar las risas, Lysange volvió a posar las gasas y el frasco de agua oxigenada sobre la mesa de al lado de la camilla. Para evitar más cosquillas, volteó, encontrándose con la mirada divertida de James Potter, por un milisegundo, se quedó sin respiración ante sus ojos, pero reaccionó enseguida y lo abrazó, sabiendo que así dejaría cualquier cosa, y así fue. James detuvo las cosquillas, para recibirla entre sus brazos, los dos dejándose caer en la camilla y aún riendo.

-Pues tú no me llames enana, ni pequeña... -Objetó ella, evitando compartir miradas con James.-

-¿Y pequeñaja? -Preguntó él con evidente felicidad. Y el querer evitar su mirada se desvaneció en su más completo significado. Lysange negó con rapidez, pero sin dejar de sonreír en ningún segundo. Por un momento se le vino a la mente que... Mason quisiera separarles todo ese tiempo, desde que Lysange pisó Hogwarts, y que por eso fue por lo que llegó hasta ese punto, por el fracaso de sus intentos. Sin embargo, que las personas se interpusieran entre ellos dos, que Mason tratara de separarles, solo les unía más, y ese hecho no la angustiaba ¿Qué demonios le ocurría?-

Las dos puertas abrirse en el mismo tiempo fue lo que les obligó a separarse súbitamente y a desconcentrarles ambos de sus pensamientos, conversaciones y ataques de risa. La puerta de la enfermería, y la del final de la enfermería se abrieron para dejar ver por un lado, al profesor y jefe de la casa de Gryffindor, Neville Longbottom, y al final de la enfermería, a la señora Pomfrey con dos tazas con, seguramente té ardiendo. Lysange se sentó en la camilla, liberándose de James y aclarándose su voz, tratando de ignorar cómo el niño de la camilla de enfrente disimulaba su risa. Tratando de ignorar principalmente, la mirada no muy furtiva que le dirigía James Potter.

Neville Longbottom se apresuró hacia la camilla dónde ahora solo se encontraba James, mientras Lysange guardaba al fin el frasco de agua oxigenada y las gasas sobrantes. El profesor Longbottom no llevaba un semblante simpático, como en la mayoría de ocasiones, sino que llevaba consigo una mirada severa mientras caminaba, cómo si les fuera a caer a ambos la reprimenda del año.
La señora Pomfrey se acercó al mismo momento, dirigiéndose primero hacia James, entregándole una de las tazas de té caliente y después lo mismo con Lysange, aunque con ella, lo hizo con una sonrisa suave.

-Mis niños, tomaroslá, os vendrá de maravilla. -Dijo Pomfrey con una voz melosa. Lysange asintió agradecida y Pomfrey giró hacia el niño sonriente por el nervioso comportamiento de Lysange, aunque cuando observó que Pomfrey cambió su mirada dulce a una seria, la sonrisa del niño también se ocultó.-

Lysange Malfoy (CANCELADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora