Nervios. Eso me definía. No se como me deje convencer...
Marfuz me pidió ser su reina pero aun no tengo ni la menor idea de lo que implica... Pero al final dije que si...
En la tarde Marfuz me dejo en la habitación para ir a hablar con Celas, el que ahora se es su hermano.
Aun no sabemos como resultara nuestra relación pero estoy feliz de ello.
Marfuz cree que su padre no se mostrara desacuerdo pero que si el toma esta decisión no lo obligara a cambiar de opinion, pero si deberá atenerse a las consecuencias.
-es hora- susurra a mi oído mientras me abraza mi cintura.
-crees que sea lo correcto-
-si-
-funcionará?-
-mira- me gira y toma mi rostro- no importa lo que suceda. Pase lo que pase estaré a tu lado... Iremos ahí, te presentaré ante mi padre y debera aceptarté... Pediré su ayuda, y luego partiremos a salvar a tu planeta-
-saliendo de tus labios se escucha tan fácil pero se que no lo es...-suspiro- todo es tan complicado-
-las cosas complicadas siempre son las mejores... -
-ya se... Si en verdad cuesta, es por que vale oro-
-exacto-
-bien... Vamos- tome su mano y vajamos.
Lentamente la puerta se abrió y una escalinata de al parecer algún tipo de metal, me daba paso a un nuevo mundo completamente diferente. Lo que estaba ante mis ojos era sorprendente...
Un planeta muy diferente a la tierra se habria paso ante mis ojos. Lo que parecían ser árboles rodeaban la zona despejada. El suelo paresia hecho de cemento solo que era negro. Los árboles tenían troncos rojos y hojas rojas, amarrilas y lilas.
Caminamos hasta llegar a un vehículo parecido a un auto solo que no tenia llantas, sino que en cambio flotaba en el suelo a una distancia aproximada de 50 cm. Color cobre brillante, parecía uno de esos carruajes que salen en la tele, asientos rojos, y pequeñas puertas deslizantes, y lo mas sorprendente era el techo. Un rectángulo oscuro levitando en el aire a una distancia aproximada de 1 mt de lo mas alto del asiento.
Subimos e inmediatamente comenzó a seguir un pequeño camino parecido a una vereda, la cual estaba igualmente cubierta de la cosa negra parecida al cemento. Lo que parecían ser aves de diversos colores volaban por el cielo, acompañadas de un inmenso sol naranja rojizo que iluminaba todo el lugar. Eran raras, Tal vez sea por sus colores brillantes o el hecho de que eran morfologicamente mas grandes y simplemente no había forma de compararlas con ningún otro animal. Era todo tan parecido pera a la vez tan diferente, y vaya que se sentía diferentes.
A lo lejos una enorme estructura curva se alzaba. Era muy parecido a un castillo o mas bien a una fortaleza con la peculiar diferencia que en lugar de ser con rectas, cada línea era relativamente curva.
Al entrar, paredes blancas decorados con detalles rojos brillantes me resivieron... Era todo tan maravilloso... Tan diferente... Pero a pesar de ver tales cosas por primera vez, a pesar de lo asombrozas que fueran... Me obligue a controlarme. Mi expresión sería pero traquila, pasiva... Simplemente serena. Pero lo que me dio la fuerza para mantenerme así fue Marfuz... El nunca soltó mi mano desde que nos bajamos de la nave.
***
-al fin regresan y mi heredero con bien... Querido Marfuz como te atreves a preocuparme- mi madre salio, rápida y felizmente a mi emcuentro.
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My alíen
General FictionEl mundo hacen mucho dejó de ser como lo conocemos... Despues de una caótica y devastadora guerra. Las Naciones se unen gracias una gran mujer... Amelia... Su hija Dalia es todo lo que ella pudo desear y lo que se esperaba de la digna hija de la...