My alíen

35. Juramentación

Bueno me he perdido de nuevo y Por favor no me asesinen...

Si sé que es triste que matara a la mamá, pero eso estaba planeado desde el inicio, así que no me maten por eso...

Me he desconectado del mundo estos días y por eso no he podido actualizar...

la proxima semana posiblemente haga el maratón, así que estén listos 😌😅

¿Alguien quiere que le dedique capítulo?

Voten y comenten

Los quiere

Clau.-

***

Lentamente abro mis ojos y una luz blanca me siega. Por unos segundos no recuerdo nada.

-Al fin- escucho un suspiro-ya era hora, debes prepararte-

-Déjela tranquila- escucho un gruñido. Marfuz

Me incorporo un poco y logro enfocar. Estoy en lo que parece un hospital. Analizó lentamente todo a mi alrededor. Y como balde de agua fría caen sobre mi todos los recuerdos da las últimas horas, y con ello una dolorosa verdad: Mi madre a muerto.

-señora presidenta- observo los dedos en mi regazo- ¿señora? -

-Dalia- volteo a la puerta y el segundo de mi madre está ahí de pie llamándome como hacía con ella. No me siento preparada

-si- me limito a contestar.

Observó de reojo a Marfuz a una distancia considerable observando y analizando la situación.

O Dios que será de nosotros ahora. él es un futuro rey, y posiblemente desde ahora yo una futura presidenta.

-Debe prepararse. El doctor viene en camino, y como dijo el general- observo la habitación y si él se encuentra ahí- debe prepararse para la juramentación-

por un momento todos me observan y yo sigo sin ser capaz de responder. sé que debo hacerlo, pero el dolor haciendo hueco en mi corazón como una pequeña espina aun atravesándolo me lo impide. ¿cómo es esto posible? mi madre aún no ha sido enterrada, pero todos quieren que yo usurpe su puesto. sé que por la gravedad de la reciente guerra es necesario hablar a la humanidad y demostrarles a todos que somos fuertes. además de la necesidad de fortalecer los lazos con otras especies. especies de otros mundos...

-salgan todos- escucho a Marfuz hablar, seguido de varios pasos resonando.

el silencio reina en la habitación por lo que parece una eternidad.

-sé que debe de ser doloroso- una lagrima traicionera se derrama de mi ojo derecho- sé que esta es una gran responsabilidad la que estas apunto de sostener en tus brazos. pero te has preparado para esto toda tu vida... tu naciste para ser grande mi amor- siento como me toma entre sus brazos y me jala hacia donde se encuentra, sentándome en su regazo, mientras me rodea con sus fuertes brazos.- sabes que te amo, que no estás sola... y que siempre estarás rodeada de la gente que te quiere aunque ella ya no esté- una punzada de dolor a mi corazón con el recuerdo de una verdad que yo ya se- debes levantarte, ir a ese lugar a hacer esa dichosa juramentación de la que hablan y demostrarle a todas esas personas que nunca creyeron en tu madre todo lo que ella hizo por ellos... por todos- levanto mi rostro para verlo directamente a sus hermosos ojos dorados- pero más aun demuéstrales el gran error que cometieron a no creer en ustedes, y que aun sumergida en un enorme dolor, rodeada de las peores tiniebla, y mucho más aun sumergida en la peor de las oscuridades, tu harías todo por ellos... porque naciste para ser su líder-