—¿Estás segura de que no seré una molestia para ti? —preguntó Selena, agachada con el trasero en pompa y la cabeza metida en el cajón más bajo de la cómoda que ________ había vaciado para su amiga. Estaba guardando sus camisetas. ________ siempre había admirado el modo de doblar las camisetas de Selena. Claro que cuando se las ponía, en cinco minutos estaban tan revueltas como su despeinado y negro cabello.
Mientras la miraba, ________ se dio cuenta que realmente había echado de menos tener una amiga íntima. Se llevaba muy bien con Demi y con otra compañera del trabajo, pero solo eran relaciones laborales. Justin era su mejor amigo, y aunque lo quería muchísimo, era muy agradable tener de vuelta a Selena.
—Estoy segura de que sí, de que lo serás. No es nada cómodo vivir en un apartamento de una sola habitación con una amiga, y eso sin contar a un novio que viene muy a menudo. Pero eso no significa que no me encante que estés aquí. Será muy divertido.
Selena daba unos abrazos muy cariñosos. ________ solía pensar que había conseguido salir adelante gracias a la paciencia de Sel, de su oído siempre dispuesto a escucharla, y sus abrazos. Se habían conocido cuando cursaban séptimo, y durante los seis años siguientes habían pasado menos tiempo separadas que la mayoría de los matrimonios. En todo ese tiempo jamás se habían peleado ni discutido, sin contar la vez en que Selena quiso comprarse un vestido con una chaqueta de imitación piel para el baile de fin de curso.
________ pensaba que se habían hecho tan íntimas porque en aquella época ambas tenían las mismas imperiosas necesidades, a pesar de ser tan diferentes. Selena era alta y ________ era baja. Selena era corpulenta y ________ era delgada (cincuenta kilos, pero no más ataques de bulimia desde que le prometiera a Selena no vomitar más). ________ parecía un muchachito, casi no tenía pecho y llevaba el pelo corto y con mechas rubias. Selena era una morenaza de grandes tetas y una larga cabellera imposible de domesticar. A Selena siempre le había gustado guisar, mientras que ________ ni siquiera estaba segura de que en su casa de Encino hubiera cocina.
—Puedes quedarte todo el tiempo que quieras. Siempre que no hagas pasteles, claro —le dijo ________ a su amiga cuando se separaron tras el abrazo—. Creo que deberías mudarte definitivamente a Seattle. Pero hagas lo que hagas, no vuelvas con Nick.
—Nick el Caníbal le comió el chocho a la vecinaaaaa —canturreó Selena.
—¿De verdad estaba haciendo eso cuando los pillaste?
—Claro. Y no sé por qué, pero era mucho peor que si se la hubiera estado fo.lla.ndo —dijo Selena. Dejó de acomodar la ropa y se sentó en el borde de la cama de ________—. Un tío puede fo*llar con una chica que no le gusta, pero no le come el… —Selena hizo una pausa y luego exclamó—: ¡Por Dios, si a mí no me lo hacía casi nunca! —Suspiró, y se agachó para coger de su maleta otra camiseta impecablemente doblada.
—No tiene importancia —le dijo ________—. No volverás a verlo, y él te echará de menos.
—No sé cómo me sentiré yo, pero estoy segura de que él echará de menos mis chuletas guisadas con repollo, y mi tarta de manzanas y mango. Pero ya hemos hablado demasiado de Nick, y estoy ansiosa por conocer al famoso Ryan.
________ movió las cejas en una chapucera imitación de Groucho Marx.
—Bueno, no tendrás que esperar mucho tiempo. Termina de deshacer tus maletas mientras yo trabajo en este estúpido artículo. Después cenamos alguna cosa, y te llevo a Cosmo, a que conozcas a Ryan.
—¿Qué es Cosmo?
—Es más fácil llevarte allí que explicártelo —le dijo ________—. Ya lo verás esta noche.
Cuando ________ y Selena cruzaron las puertas de cristal negro de Cosmo, el lugar estaba completamente lleno. Era muy amplio —tres pistas de baile en distintas plantas—, con luces de neón en las paredes pintadas de negro, y también luces estroboscopias que animaban a los más lentos, si es que había alguno. Selena echó un vistazo al panorama.
—Es como la pesadilla de un epiléptico —observó mientras se dirigían a la barra.
—Espera hasta que veas el espectáculo de luces informatizado —chilló ________ para hacerse oír por encima del estrépito.
—¿Hay también nieve artificial? —gritó a su vez Selena.
—¡Solo luces! ¡¡Espectáculo de luces!! —volvió a chillar ________, y entonces vio la sonrisa de Selena y se dio cuenta de que le estaba tomando el pelo—. Ya está bien, ya está bien —le sonrió.
