Capitulo 10 - La chica nueva

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<< ¿Vecinos? >>

-Ohm... hola –Dije, mirándola con curiosidad.

Es bastante raro que alguien se haya venido a vivir aquí, ósea, cerca de nosotros, además... ¿A estas horas? ¡¿Mudándose?! ¿Hace cuanto que estaba esa casa? Jamás, desde que llevo viviendo aquí, la he visto.

-Yo... Siento haber molestado.- Miro unos segundos hacia el interior, desviando la mirada, para luego descender los peldaños de la casa y desaparecer por completo a través de los arbustos que se encontraban a un lado de la calle.

-Eso fue...extraño.- Miré una vez más la calle, extrañada, y cerré la puerta de entrada apoyándome en ella.


Nuevo día.

Otro día en el cual estar encerrada nueves horas, una verdadera torturada, un lugar señalado como el mismísimo infierno... la escuela.

Con pesadez, caminé por el largo pasillo directo a los escalones, bajando uno por uno. Pero dejé de hacerlo al escuchar risas provenientes de la cocina.

Al llegar al lugar del ruido, me percaté que se encontraba la chica de anoche, sentada a un lado de James y frente a mi padre.

Todos al percibir mi presencia se giraron, observándome de pies a cabeza.

-Buenos días Leah. Tu desayuno está listo.- Habló mi padre, señalando el platillo que se hallaba a un lado de la chica, que aun me observada.


¿Tendré algo en la cara? Mira demasiado.

Bufé, negando con la cabeza.


-No, gracias. Se me fue el apetito.- Sentencié, achinando los ojos hacia la chica que se encontraba en casa y más... en mi sitio favorito.


No me cae bien esta tipa.


-Leah.- Me llamó mi padre, haciéndome gestos de buenos modales hacia la nueva, pero eso no pasara.


Primero. Llega a mi casa en mitad de la noche, interrumpiendo lo que hacía.

Segundo. Entra en mi casa, como si nada, como si se conocieran, con MI FAMILIA y más encima se sienta en mi sitio favorito. Puff... por favor, que se largue.


-Ella viene de lejos, Leah, a quedarse en Cotswolds con su tía- Prosigue mi padre emocionado.- Y los más interesante... es que irán en la misma escuela. Podrán ser amigas. Así que alista tus cosas que los pasaré a dejar.


¿Interesante? Que tiene de interesante eso. Iremos en la misma escuela, estará viviendo cerca de mí, de nosotros, lo que significa... ¡¿Que vendrá todos los malditos días a mi casa?!

Ja. No, no, no, eso no pasará.


{...}


Cuatro semanas después...


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