El chico que creía en Peter Pan (HunHan)

La casita de Wendy

La casita de Wendy

No había risas, la música había desaparecido y al fin el suelo tenía un soporte firme para el cuerpo de aquel chico rubio quien aún desmayado se encontraba ahora en una cómoda cama dentro de una habitación cálida y acogedora en compañía de otros tres chicos menores que él, quienes aún en murmullos con miedo de despertar a aquel bello durmiente hablaron.

–Te dije que no debían ser agresivo –el chico de sonrisa felina ahora completamente serio y con ceño fruncido regaño a cierto castaño alto que también se encontraba ahí.

–No he sido yo, jamás haría algo así y estás loco si crees que yo lo cause –había una tercer persona que se limitaba a mirar en silencio a aquel par con, debíamos admitir, culpa plasmada en toda la cara.

–¿Entonces qué fue Sehun? –Por mucho que el chico bajito llamado Baek intentará ocultarlo le molestaba que JongDae estuviera regañando a Sehun de algo que él no había causado–. ¿No lo notaste raro durante el tiempo que estuvieron en el bar? ¿Qué tomó o comió?

–Solo tomamos lo que Baek llevo para nosotros, solamente eso –y para el chico mayor de aquel trio de amigos aquello había quedado completamente en claro, casi podía decir que había resulto todo con un nombre que le dieron: Baek.

–¿Baek les sirvió de beber? –El inmutable chico de ojos delineados paso saliva, luego miró con un poco de miedo al chico que lentamente se acercó a él–. Baek, ¿qué le diste de beber a Luhan?

Los ojos del interrogado rogaban prácticamente a JongDae no decir nada al chico que los miraba desde atrás, pues Sehun se encontraba confuso y atento a todo lo que pasaba ahí.

–Yo solo le di un “Bébeme” si no lo soporto no es mi culpa –JongDae abrió grandes los ojos ante el cinismo que aquel chico podía mostrar, pues era muy sabido por el que el pequeño usaba siempre ese tipo de bebidas para molestar a las personas que no le agradaban en lo más minino.

–Y de casualidad, Baekhyun, ¿a esa bebida no le habrán puesto algo? –Sehun miraba por encima del hombro de JongDae a aquel chico culpable de aquel gran problema.

–Baek llevo ambas bebidas, no pudieron haber puesto algo en ella –parecía como si el alto no conociera las malas intenciones de su amigo, y la verdad era que no se daba cuenta.

–Baek, esas bebidas son para las chicas y no deberían causar problemas de este tipo. ¿Qué diablos hiciste? –Aquel chico se levantó  de su asiento completamente molesto e indignado.

–Solo quería ayudar un poco para hacer trabajar a la mente de Luhan, tú mismo dijiste en privado a Sehun que podría funcionar si...

–¡En privado Baek! ¡Tú lo has dicho! –El cuerpo sobre la cama pareció moverse ligeramente a lo que Chen volvió a calmar su tono de voz–. No tienes por qué meter tu cuchara en esto y menos de esta manera. ¡Mira al chico!

Aquel par de ojos bien delineados de un momento a otro se tornaron acuosos y tristes mirando a Sehun quien se acercaba a aquella cama donde su profesor descansaba ahora más tranquilo y acariciaba su mejilla lentamente.

–Yo solo... –al mirar aquello JongDae soltó un largo suspiro.

–Baek no te pongas así, solo entiende que...

–¡Yo solo no quería verlo con Sehun! –Aquello sorprendió a aquel par de chicos quien mirándolo fijamente podía ver el coraje en aquellos bellos ojos.

–¿Y por eso tenías que dañarlo? –Fue turno del de sonrisa felina cuestionar al chico quien ahora con ceño fruncido gritó.

–¡No está muerto, así que no pueden culparme de ello! –La frialdad de sus palabras dejo sorprendido al mayor de los tres quien se había quedado literalmente sin palabras, parecía que Baek enserio no tenía remedio.