-¡Loca, Josefa, estaí cagá! – me gritó la Dani. – no podís hacer eso, osea ¿Dónde está la hembra alfa que se respeta?
-Puta me cansé po – me deslicé por la pared hasta llegar al suelo, ay ta helao. – quiero decirle.
-Hay muchas maneras de decirlo sin decírselo. – me dijo. ¿Qué? – Ay por tu cara, no entendiste ni una hueá. Josefa, escúchame...
-Yo le diré – me paré – estoy decidida.
-¡NO! – se tiró encima de mí – si tú le dices yo... yo....
-¿Tú qué?
-Te morderé la teta, Josefa. – me amenazó. Auch, no la cuestionaré porque sé que es capaz.
-No sé qué haré, explotaré. – me moví como si quisiera hacer pis. – Le diré. Sí, muérdeme si queris pero yo le diré.
Comencé a caminar buscando al weón del JP, pero no estaba por ningún lado, la Daniela me seguía gritando de atrás que no hiciera esa hueá. Claro po, porque ella está pololeando y felíh. Pero no po, yo aquí con cuea di mi primer beso.
-Josefa, para – me gritó pero no la pesqué. – Josefa, no vayas como si estuvieses buscándolo.
-Déjame si lo estoy buscando po. –le grité.
-Josefa como tu hermana mayor, te digo que – lo vi en la escalera – no vayas como...
-¡Jp! – le grité.
-Disispiridi – bufó mi hermana, la miré feo y fui a donde el JP.
-¡Jo! – me respondió el JP y me vino a abrazar. ¿Por qué tan feliz este? - ¿Me estabas buscando?
Nooooooooooooooooooo, como se te ocurre.
-Puede ser, te tengo que decir algo. – al tiro me puse nerviosa.
-Yo también.
Yes, this is the moment.
Prepárense señores, para vivir conmigo la llamada "Declaración".
-Dime tú primero – le moví las pestañas lo más coqueta posible.
-Ay... no sé cómo decirlo. – se rascó la cabeza. Ihhhhh, se pone nervioso como yo.
Mire a la Daniela que estaba con unos amigos y me negó con la cabeza, ay que es pesá.
-Solo dilo. – le sonreí y el asintió.
-Estoy pololeando con la Javiera. – dio saltos el muy weón y me abrazó.
Estoy pololeando con la Javiera.
:-)
Está pololeando con la Javiera.
:D
Siempre le gustó la Javiera.
:)
Le dará sus besitos a la Javiera.
:|
Javierta culiá.
:-(
Me cagaste la vida.
.l.
-¡Dime algo! – me miró y arregle el caracho. - ¿No te pone feliz? ¡Me declaré después de meses sintiendo eso!
Ahhhhhhhhhhhh, osea que ese "te adoro" que me dijo el otro día fue de puro amigo.
-Y- yo... yo me alegro tanto por ti. – hice una cara, no, es que yo voy a llorar.
Lo abracé y nos hice dar una vuelta para quedar mirando a la Daniela.
La weona se estaba comiendo a su pololo.
-¿Y tú que me querías decir? – me preguntó y quise llorar más.
-No, nada importante.
-Dime, no te irás de aquí hasta que me digas. – se cruzó de brazos.
"Hay muchas maneras de decirlo sin decírselo"
-Yo... yo ayer vi una película d-de una gatita que se enamoraba de un gatito – se me salió un sollozo.
-¿Estás... estás llorando?
-Y el gatito se enamoraba de una perra culiá – lloré – y dejaba a la gatita en la senda friendzone pasándose royos todos los días el insensible y nunca se daba cuenta que si la gatita le daba su Whiskas , o le regalaba su leche es por algo po, ciego de mierda.
-Wow, y esa película ¿cuándo salió? – me miró sorprendido.
-Este año. Pero la gatita decidió que era suficiente, que ya le habían visto la cara de weona – me sequé los mocos – y se decidió a buscar otros gatos, o unirse a otra colonia de gatos o gatería no sé cómo mierda se dice... - seguí llorando - y se decidió a abandonar a ese gatito.
-¿Qué pasa aquí? – escuché a la Dani.
-Y la gatita se convertirá en perra – terminé.
-¿En la segunda parte? – me preguntó.
-Sí, la que se estrena mañana. – abracé a la Daniela llorando.
-¿Qué onda la película?
-Sí, el gato pobrecito no... igual merecía morir así. – escuché a la Daniela.
-¿El gato moría? – le preguntó él.
-Sí.
-¿Quién lo mató? La Jo se saltó esa parte. – se rió.
-La hermana de la gatita. - le dijo la Dani y comenzó a llevarme al baño.
***
-¿Qué era eso del gato, Josefa? – me limpió el rímel corrido.
-Una manera de decirlo sin decirlo. – me quité los mocos de la cara. – ¿No funcionó?
-No sé. – se encogió de hombros. – Yo sentí agua en mis pies, y después te vi regando el colegio con tus ojos. La cagaste para ser llorona, Josefa.
-Me dijo que estaba pololeando. – hice pucheros. – y no aguanté.
Mire mi celular para ver Facebook y distraerme y me salió un meme.
-Mira esta hueá, no me pudo llegar más - seguí llorando.
La Dani me abrazó.
-Te digo algo, Jose... - asentí – yo... no sé siento que te hace falta pegarte el cacho, ¿cachaí?
Negué.
-Weona, tu erís preciosa y no lo digo porque seas mi hermana ni porque nos llevemos bien. Lo digo porque de verdad lo siento y he escuchado a personas que piensan lo mismo.
-¿Quién mamá - papá – abuela? – bufé.
-No, mis amigos po, Jose. Pero cachan que estai enamorá de ese weón y te ven como, no sé...
-Como la weona. – terminé por ella.
Siempre me he fijado en que las amigas y amigos de la Dani me ven como la pendeja weona, una porque ellos van en cuarto y yo un año menor. Dos, porque siempre voy detrás del JP, pero es porque él es mi mejor amigo y puta me gusta pasar tiempo con él. Pero si estoy quedando como la pava, quizás es hora de cambiar un poco.
-Mira no sé si weona, pero como la "eterna enamorada". Tenís que ser más como eres en la casa, esa weona buena para la talla, la que a veces es media disparatera, o la que sale a fiestas. Hace dos años pendeja y todo hacías muchas hueás locas. Hacíamos en verdad y era bacán.
Igual extraño a esa Josefa.
-Es hora que vuelva. – me movió las cejas.
Sí, es hora que vuelva.
***
Ojala que les guste.
Es una historia corta :-).