Estos días Kakashi estuvo en aldea descansado, ya que su última misión tomo mucho tiempo, debo confesar que no me ha dejado sola ni un instante, y eso me gusta.
Después de aquella petición a la orilla del rio hemos compartido cada segundo juntos, todos los días le contaba algo diferente, de lo que había pasado o de las personas que había conocido, se sentía tan bien el hablar con de esa manera tan fluida, como en los viejos tiempos, no sentía ese temor de hablar o de cuidar mis palabras, cocinar junto a él me hacía realmente feliz.
Una noche, luego de haber pasado la tarde con mi sensei, deambulaba por los pasillos de mi casa, hasta llegar a el mural, cuando llegué encontré lo mismo que había pintado hace 4 años, era Ryota, sonreí al verlo, debo reconocer que para haberlo hecho una pequeña niña de 14 años, era muy bueno, fui por las latas de pintura y brochas, pero justo al momento de llegar al murar, no quise borrarlo, era mi hermano Ryota, no podía hacerlo, me senté frente a el, y sonreí soltado un pequeño suspiro
-Cuanto tiempo idiota -, decidida y con el pensamiento de que haría uno mejor comencé a pintar, con pintura blanca para borrar lo que ya había
-¿Qué haces? – mi piel se erizo y por el susto la brocha cayó al piso, al girarme vi a Kakashi desde el techo, suspire mientras recogía la brocha – Estaba lindo -, un pequeño flashback vino a mi al recordar esta misma escena con Ryota, volví a suspirar mirando un punto dijo el mural -¿sucede algo? – pregunto Kakashi junto a mi, negué rápido
-No, solo me tomaste por sorpresa – volví a dar un brochazo lento – ¿Que haces aquí?
-No puedo dormir – lo escuche decir tras de mi -¿Quieres que te ayude? – volví a negar sin míralo -¿Te molesta si te acompaño? – volví a negar sin míralo, y sentí que se sentaba en el suelo, sonreí
-¿Cómo estuvo tu día? – pregunte ya que el día de hoy no nos habíamos visto
-Bien, supongo – volví a sonreír al escuchar su tono insípido -¿el tuyo?
-Bien, es lindo volverlos a ver a todos, todo tan tranquilo y tan ... cálido – dije sin dejar de pintar -Es lindo volver a casa – uno de mis planes era tratar de hacerle recordar a Kakashi lo grandioso que es estar aquí con los chicos – Obito es un idiota – reí levemente – quiere que lo ayude a idear un plan para conquistar a Rin – suspire – creo que soy la menos indicada para eso –
-¿Por qué? – cerré mis ojos con fuerza, una de las cosas que me pasa cuando hablo con él, es que me siento tan a gusto que a veces olvido que él está ahí
-Bueno yo ... - no sabía que decir, tal vez uno de los motivos por los que no sirvo para esa misión es porque "amo a alguien desde que tengo memoria y nunca le he dicho", lo que demuestra claramente que no sé que hacer en esos casos – Nunca he experimentado ese tipo de amor – mentí, obvio que mentí, se claramente lo que siente Obito, porque yo lo siento por Kakashi
-bueno como entiendes a las chicas debes saber lo que le gusta – me gire para mirarlo ofendida
-¿Cómo que "entiendo" a las chicas? – me cruce de brazos, eso me confirmo que no me ve como una chica, el me miro apenado, negué rápido – No te preocupes – me gire de nuevo al mural – se a lo que te refieres – dije en voz baja
-Se por que Obito te pidió – guarde silencio, me sentía realmente decepcionada – Conoces a Rin, y le puedes ayudar usando eso a su favor, por que al ustedes ser chicas se cuentan todo –
-Yo te cuento todo y no eres una chica – el tono que use no era el que me imaginaba en mi cabeza, al darme cuenta que el no decía nada, maldije internamente, me gire para mirarlo – lo siento, si te entiendo – me gire para seguir pintando – Entre chicas tenemos mas confianza – suspire
-¿estás bien? – hice un sonido de afirmación con mi garganta sin mirarlo, suspire cerrando mis ojos
-Solo estoy un poco distraída – sentí su presencia junto a mi
-¿Qué piensas? – volví a pintar
-Nada en realidad – reí sin gracia el detuvo mi mano haciendo que la brocha callera al suelo
-Se que te pasa algo – me miro con seriedad, desvié mi mirada
-Ya te dije que no es nada – en vez de soltarme la muñeca antes su garre se hizo mas fuerte, conecte nuestras miradas "pasa que cada vez me rompes mas el corazón, idiota" – Enserio no es nada – su mirada se suavizo al igual que su agarre hasta al final soltarme por completo, me agache y tome la brocha -¿Quieres ir a pescar? – pregunte tan de la nada que el se sorprendió
-Son casi las dos de la madrugada – me recordó, sonreí con inocencia
-Quiero que me enseñes hacer ese pescado que tanto me gusta – sonreí, pero sin la más mínima emoción, la verdad es que no quería seguir hablando sobre ese tema
°|°
Pescábamos en silencio, yo me deleitaba con su presencia y con su cercanía, a pesar de que estos días lo he tenido tan cerca a veces lo siento muy distante, creo que es por ... ella.
-¿En qué piensas? -pregunte haciendo que me mirara rápidamente, el negó levemente, sonreí dándole confianza – Vamos Tonto-kashi, me puedes contar todo – realmente quería saber que era lo que rondaba por su mente, ya que nunca se lo que realmente ronda en ella, el suspiro
-Es Fujioka Ayaka -, algo dentro de mí ya me preparaba para esa respuesta, aun así sonrió ampliamente
-Es cierto – fingí entusiasmo – ¿Cómo van las cosas con ella? – su cara de sorpresa lo decía todo, hasta yo estaba sorprendida por eso, lo miré con "ansiedad" esperando que me contara, el suspiro
- Este tiempo que no estuviste pasaron muchas cosas con ella – asentí expectante – se ha vuelto una chica muy fuerte – el rio levemente mientras mi ceño se fruncía levemente – Realmente me impresiona, y siento que cada vez la quiero más – mi mandíbula se tensó, pero al momento que me mirarme con sus ojos brillando llenos de amor he ilusión sonreí con "dulzura", en un segundo su mirada cambio a triste, mi ceño se frunció – pero ...- hizo una gran pausa
-¿Pero qué? – lo incite a continuar
-Ella quiere a otro -, su amor como el mío, era uno no correspondido.
![](https://img.wattpad.com/cover/90596031-288-k544790.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Siempre Fuiste Tu - Kakashi Hatake
FanfictionDebo reconocer que la vida de un ninja no es fácil, y menos la de un ANBU. A la edad de 4 años asesinaron a mis padres, motivo por el cual no recuerdo casi nada sobre ellos, pero si como agonizaban y morían lentamente ante mis ojos. Desde su mue...