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Al llegar al apartamento que compartía con Lee todo estaba muy bellamente adornado y la mesa dispuesta. A que se debía la ocasión se preguntaba ella. Hasta que el apareció detrás de la puerta y se agachó quedando de rodillas frente a ella.

-eh esto es lo que creo? Me esta proponiendo matrimonio?-se decía para ella.

-te quieres casar conmigo, belleza-

-SI- eh! lo dijo, si, estaba segura.

Tres meses después TN estaba dando sus últimos pasos hasta el altar. Ya no había vuelta atrás.  Estaba casada. Seúl sería su nuevo hogar y ahora tenía que preparar todo su equipaje junto con los papeles del proyecto, después de todo el viaje le saldría mas barato de lo planificado. Una vez instalados en su nueva casa, TN era solo un ama de casa, no conocía a nadie aun y su esposo se limitaba a llevarla solo a los eventos que así lo requerían, demostrándole así algo muy distinto a lo que había vivido antes.

-querido tengo algo que decirte- cariñosamente así le decía a su esposo.

-dime cariño. Yo también tengo algo que decirte- le declaró el algo serio.

-bueno sabes que me conociste durante mi investigación y doy gracias a Dios por eso. Bueno, la cosa es que me invitaron para presentarlo en la bienal dentro de 5 meses aquí en Seúl. Y tengo que salir constantemente de la casa, no quería molestarte y que lo supieras cuando fuera seguro- decía ella esperando la reacción de su esposo.

Este a su vez quedó completamente serio y rígido.

-bien, yo quería decirte que quiero que dejes de trabajar. Te dediques totalmente a la casa y nosotros, que yo me ocupo de que nada te falte. Sabes que nuestra posición es buena y las amistades de mi familia hablan de que soy muy liberal. No creo que sea buena idea que participes en esa cosa que dices, habrá muchas personas y comentarán de más sobre ti. Ya fue suficiente con el que hiciste en Sidney-

-pero querido….- objetaba ella intentando defenderse.

-TN, no hay nada que discutir, no lo harás- se puso de pie y su postura daba temor.

-que dices?- no podía o quería escuchar lo que el decía, como era que había cambiado tanto?

A partir de ese día las cosas comenzaron a cambiar totalmente, ya no dormían juntos, el amor desapareció y en la cama era solo un objeto que el usaba a su antojo sin preguntar su estado, muchas veces dañado. Ya no eran la pareja perfecta que ella imaginó, estaban cayendo en la rutina, ella esperaba cada día que el llegara del trabajo y encontrara la comida y todo dispuesto. Al mes siguiente las acciones se habían disparado y su empresa pasó a ser una de las más reconocidas del país pero en casa las cosas seguían mal. Esa noche de marzo……

-querido te prepare la comida que más te gusta….Mira estos son los papeles que tengo que entregar para la bienal. Por favor déjame ir no será mucho tiempo. Es mi trabajo más importante, la posición de muchos profesores están en juego también-

Lee había llegado tomado a casa, en Corea era normal y más ahora que estaba celebrando, sin su esposa, sus logros por lo que escuchar aquello no le pareció muy agradable.

-ya te dije que no. Acaso no me escuchaste. Eres sorda!!- la había empujado por suerte para ella sobre el sillón de la sala. Las lágrimas comenzaron a salir. No podía creer que aquella persona era la misma que había conocido un año atrás.

-no por favor. No lo hagas- decía entre lágrimas y suspiros. Lee tomó los papeles en sus manos y los rompió sin dudar. Ella se levantó y trato de detenerlo pero fue para peor.

-perra no te dije que no te atrevieras a salir de esta casa - le había pegado justo en la mejilla derecha, tan fuerte que no podía escuchar nada y sentía el sabor a hierro en la comisura de su labio. Eso no se lo esperaba, el estaba segado por la rabia y el alcohol. Ella corrió hasta el cuarto de invitados y se cerró con llaves dentro. No había pasado ni un mes y el verdadero Lee estaba mostrándose de la manera mas cruda posible. Una semana, dos y tres, así paso un mes y el ni siquiera se disculpó con ella, se acercaba la presentación y ella no sabía que iba hacer ahora, sus amigos confiaban en ella. Su esposo había salido de viajes del país por más de 1 mes y no regresaba aún, por lo que en las tardes comenzó a pasear cerca de su casa, que estaba en una de las zonas más residenciales de Seúl y nadie la conocía. En uno de sus paseos descubrió una de las tantas cafeterías que había al lado de la calle y le pareció muy tranquilo para trabajar, más que quedarse encerrada en esa casa que no soportaba. Ya llevaba una semana frecuentando la cafetería e incluso tenía bonos de descuento allí y conocía a la dueña que estaba contenta de tener con quien conversar. El idioma le daba un poco de trabajo pero conversar la ayudaba a mejorarlo. El sábado en la tarde, se encaminaba como de costumbre hacia su cafetería, cuando descubrió que había gran multitud de chicas, fundamentalmente escolares apilándose como hormigas contra el cristal, a punto de aplastarse unas a otras contra el. TN no sabía que sucedía y llamó a la dueña para preguntar lo que pasaba.

Change {Jimin & _____} BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora