La gente caminaba por doquier. Jimin sostenía la mano de YoonGi quién miraba a sus alrededores como un niño pequeño demasiado emocionado. Lucía demasiado tierno.
-Mira allá, wow-habló YoonGi apuntando una gran montaña rusa que subía hasta lo más alto lentamente para luego bajar haciendo gritar a todos los que la montaban.
Jimin miró aquella escena y sintió su estómago retorcerse, nunca había sido gran fanático de los parques de diversiones, de pequeño nunca le llamaron la atención, a excepción de YoonGi quien parecía disfrutarlo.
Jimin no notó en que momento YoonGi lo había llevado hasta una larga fila. Jimin levantó un poco su cabeza para ver de que juego se trataba y al hacerlo sintió sus manos sudar.
-¿L-la casa embrujada?-preguntó mientras YoonGi asentía rápidamente.
-Es genial. ¿O acaso te asus-...?
-¡Claro que no! Es solo que es demasiado infantil.
Jimin infló su pecho mientras fingía valentía.
YoonGi estaba demasiado ansioso por poder entrar en aquella casa que no se dio cuenta de que la cara de Jimin estaba un poco pálida y apretaba la mano de YoonGi haciendo una ligera presión.
Cuando por fin fue su turno, Jimin tomó aire y intentó fallida mente tranquilizarse a si mismo.
Las paredes tenían charcos de sangre y la madera del suelo hacía ruidos al ser pisada. La verdad era que nada de eso asustaba a Jimin, lo que si lo hacía era aquella gente que se disfrazaba de niñas muertas o asesinos con sierras y los perseguían por toda la casa intentando matarlos.
Avanzaron hasta lo que parecía ser un baño. YoonGi no perdió el tiempo y abrió la puerta, dejando escuchar unos molestos lloriqueos que venían desde la tina. Jimin estaba nervioso y si YoonGi no hubiera estado tan ocupado abriendo la cortina de la tina, de seguro lo hubiese notado.
Ambos se asomaron y pudieron ver un bulto enrollado que lloraba, al parecer era un bebé. YoonGi miro a Jimin y luego al bulto y sonrió. Acercó su mano a aquella cosa y Jimin lo detuvo.
-No creo que quieras hacer eso...
-Pero si quiero.
YoonGi acercó su mano otra vez, siendo detenido una vez más.
-¿Ahora qué?
-¡¿Y si nos ataca?!
YoonGi puso cara de poker.
-¿En serio, Jimin?
Aquella cosa seguía llorando dentro de la tina, o mejor dicho chillando.
-Solo estoy in-
-MI BEBÉEEEE.
Un fuerte grito femenino hizo a YoonGi saltar hacia atrás cubriendo sus oídos con sus manos. Una mujer demasiado delgada y sucia los miraba desde un rincón, su mandíbula caía haciendo que el interior asqueroso de su boca se viera. Comenzó a acercarse o más bien dicho arrastrarse, ya que sus piernas estaban molidas. Jimin, quién se había estado ocultando detrás de YoonGi reaccionó. Se apresuró a correr por la puerta.
-¡No te quedes ahí, corre!
YoonGi pudo ver como aquella mujer se arrastraba más rápido intentando alcanzarlo. Corrió fuera de aquel baño y buscó a Jimin con la mirada, pudo verlo doblando en un pasillo.
-¡Espera! ¡Jimin, joder!
YoonGi dobló en aquel pasillo y cuando vio a Jimin ser perseguido por lo que parecía ser un maniático dejó de correr.
-¡Jimin, cuidado!
Pero ya era demasiado tarde, Jimin había caído al suelo haciendo un gran estruendo mientras veía a aquel hombre de cara sonriente acercarse a él mientras lamía su cuchilla llena de sangre.
Capítulo kk, perdón. Estaba un poco ida y no sabía como terminar este capítulo. Más tarde estaré subiendo el siguiente. Gracias por leer y votar, caramelos.
Xoxo.
