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Todos los miércoles son iguales.

Me despierto de mal humor, no sé si debe a las materias que tengo todos los miércoles como matemática y química, el colectivo que me deja pagando o el simple hecho de que tengo sueño.

-Mamá, ¿me llevas?-pregunté suplicando.

-No puedo, ve caminando.

No respondí nada y me dispuse a comer algo molesta.

-La comida no tiene la culpa-dijo Luck-.No comas de mal humor.

-Tienes mucha razón, Luck.-dije tomando otra tostada.

Tomé mi mochila y comencé a caminar a paso rápido.

Al fin y al cabo en veinte minutos estuve en la escuela parada en la entrada.

Entre y busque mi casillero, éste se encuentra ordenado ya que lo ordene hace poco.Coloqué algo de ropa por si acaso, mis libros,  cuadernos y pegue fotos de mi banda favorita y otras fotos mías con mis amigas.

Sentí una mano en mi hombro y al darme vuelta vi a  Maddie.

-Hola-dije sonriente.

-Hola.

-Vamos a clase-dije tomandola del brazo.

-Espera, necesito ir al baño.

-Está bien.

Ella simplemente va al baño para maquillarse, todos los días es lo mismo.

-rápido, no quiero llegar tarde.

-deja de preocuparte y maquillate un poco, el maquillaje no hace nada malo.

-lo sé pero no me siento tan cómoda.

-bien, vamos-dijo tomando su bolso.

Al llegar a clase nos encontramos con Claire.

-¡Hola chicas!-dijo saludando con una seña de mano.

-¡Hola!-dije sentandome al lado de ella.

-Chicos por favor hagan silencio. la profesora de matemática comenzó a entregar los exámenes.

Me la había pasado todo el día de ayer estudiando para el examen y los nervios me mataban.

...

Al terminar el examen se lo entregue a la profesora, quién me dijo que podía salir.

-La primera en salir del examen, ¿entregaste la hoja en blanco?-escuché detrás mío.

No era difícil de adivinar, Frederick estaba detrás mío sonriente como siempre y revolviendo su cabello.

Di media vuelta y con los brazos cruzados.

-¿qué haces aquí?

-el profesor está ausente.

-Ah...¿Charlie es tu amigo?-pregunté.

-¿te interesa?

-no, a una amiga.

-¿Maddie?

-si-respondí algo desconcertada.

-¿no me puedes ayudar así él se acerca a ella?

-claro...

Una sonrisa brotó en mi rostro.

-sabía que en el fondo, muy en el fondo de tu corazón, no eres tan mala persona.-dije colocando mi mano en su hombro.

-espera, no me dejaste terminar.-dijo serio-con una condición te ayudaré...

-¿Qué...qué condición?dije con recelo.

~Sentimientos ocultos~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora