~Sentimientos ocultos~

3

Me dirijo a mi casillero para tomar mis cuadernos e ir a mi clase de matemática. Detesto matemática, nunca me gustó, siempre trato de prestar atención pues no quiero reprobar la materia así que con mis dos mejores amigas, Maddie y Claire, la verdad es que nos ayudamos mucho en esa y todas las materias.

Camino a la clase me encuentro con Christopher Cooper, me quedo mirándolo como tonta, él me tiene loca desde hace mucho y es el mismo al que trato de olvidar. La verdad es que no sé que trato de olvidar porque no pasó nada entre nosotros, él ni siquiera debe saber que existo.
Su cabello rubio y sus ojos azules pueden enamorar a cualquiera, pero él sale solo con las chicas populares o como yo las llamó,"zorras".

Volviendo al tema de invisibilidad,  ningún chico debe saber que existo, nunca he tenido novio ni nada por el estilo.Tal vez estoy esperando al chico adecuado.

Es por eso que mi grupo social es reducido, no es que me importe, es más, creo que es mejor contar con amigos que valen la pena y no tener muchos que simplemente aparecen cuando te necesitan. Mis dos mejores amigas han estado siempre conmigo y hemos pasado todo los momentos malos juntas, ellas son mi amistad.

En cuanto al estudio, no es que sea nerd o los que dicen todos, bueno...puede ser que crean que soy nerd en mi curso, pero simplemente me gusta estudiar un sola vez para una prueba y no tener que estudiar lo mismo mil veces.

Bueno ya saben algo de mi.

Al entrar al salón me siento junto a mis amigas.

-¡Hola!-exclaman las dos al mismo tiempo.

-Hola-respondo con una enorme sonrisa al tiempo que saco mis cuadernos.

-¿Ya sabes que eligiras como taller?-pregunta Claire.

Hay talleres de toda clase en Prive, nos dieron un folleto con las diferentes opciones, y me concentré solo en una: escritura.
Quiero realmente aprender a mejorar mis habilidades.

-Si, me decidí y voy tomar clases de escritura-respondo con entusiasmo- ¿Ustedes?

-Yo atletismo-responde Claire moviendo sus piernes -siempre me ha gustado todo lo relacionado con deportes.

-Que lindo, deportes-dice con ironía Maddie dibujando garabatos en un papel -elegí Arte.

-¿Entonces nos vemos después de taller?-Pregunto-¿en mi casa?

-Como siempre.

  [...]

Al terminar la clase salimos del aula y nos acercamos a un amontonamiento de chicos que estaban en ronda y gritando como animales. Dos chicos están peleando o más bien un chico y Frederick Anderson.
Al chico le sangra la nariz y suda como puerco, en tanto Frederick, el simplemente suda y no dejaba de golpear al chico que ya casi está tirado en el suelo sin reaccionar. Me quedo observando la pelea con sorpresa, no puede ser que un chico se meta en líos tan rápido y sea tan agresivo.

Se golpean hasta que una voz detiene la pelea.

-¿Qué está pasando aquí?-pregunta el Director.

El director lleva a los dos chicos a dirección y nos ordena a todos a volver a nuestras respectivas tareas.

-Ese chico no lo había visto en la escuela antes- comenta Maddie.

-Es Frederick Anderson, ingresó hoy, se acaban de mudar a la ciudad  y su padre trabaja con el mío.

-Se ve un chico realmente problemático.

-Si, menos mal que no es nuestro compañero.

Símplemente me alegro que no fuese mi compañero de ser así temía que me trajera problemas, desde ese día de la cena tengo un mal presentimiento.

...

Todos los alumnos al terminar las clases se retiran o se van a los talleres así que me dirijo a la clase de escritura.

Al entrar me siento en la fila del medio, saco un cuaderno que había preparado especialmente para esa materia. Lo había  decorado con frases de mis libros favoritos, realmente me gusta como quedó.

Estaba prestando atención a la profesora cuando vi entrar al aula a Frederick. No sé que hacía aquí, no lo encontraba amante a la lectura ni nada de eso.

-¿Escritura?-pregunta sin interés.

-Si, pase y tome asiento.

El camina tranquilo hasta que me registra, sonríe y se sienta junto a mi. Luego saca su cuaderno y comienza a escribir.

-Chicos les dejaré una lista de libros que pueden pedir en la biblioteca. - dice la profesora, y sigue leyendo su libro, nos ha dejado descansar los últimos cuenco minutos de la clase.

Estoy a punto de agarrar mi celular y chatear con mis amigas hasta que Frederick habla.

--¿Qué tal, Liz?

Lo mire a él y respondo

-Bien, ¿tu? ¿Te duelen aún?-pregunto señalando las heridas.

-¿Estás preocupada por mi, Lizzy?

-No me llames Lizzy-respondo cortante

-Está bien- "Lizzy"

-¿Cómo llegaste aquí?-pregunté

-Caminando-responde con una sonrisa de oreja a oreja.

-Qué chistoso eres-digo con sarcasmo y comienzo a revisar  mi celular.

-Por la pelea me castigaron poniéndome en la clase de escritura.

-Te salieron mal las cosas-comento sonriendo- No puedo creer a una persona pueda ser tan agresivo y meterse en problemas el primer día de clases.

-¿Sonries? No creas nada, la pelea la buscó él.

-Si, sonrió, soy humana.-contesto seria.

-Que cambios de rostros son esos-dice riéndose.-No eres humana tampoco, te alegraste de mi desgracia.

La profesora se para y anota en el pizarrón, "escribir un poema"

-¿Es para la próxima clase?-pregunto.

-No simplemente quiero que vayan pensando en escribir uno, escribir lleva su tiempo chicos-responde la profesora.

-bueno el año que viene se lo traigo profesora- dice irónicamente Frederick. Idiota.

La profesora le lanza una mirada amenazadora, se despide y sale del aula.

Al salir tomo mi celular para leer los mensajes.

-Hasta luego Lizzy- escucho a   Frederick decir mientras se aleja.