La muchacha mantenía la vista baja, mirando a la ventana. No quería girarse, pues sabía que ese chico de pelo rojo iba a estar ahí, mirándola fijamente con aquellos ojos ámbar. Estaba muy nerviosa, la profesora continuaba hablando sobre la historia de la música, pero ella solo podía escuchar sus lejanos murmullos, tapiados por el ruido de sus pensamientos.
<<Bonnie, ¿dónde estás?>> refunfuñó en su mente, casi rogando por ayuda. Los segundos estaban pasando demasiado lentos.
– Señorita Chica ¿Está escuchando?
– ¡Ah! – Exclamó ella, agitando su cabeza – ¡S-Sí!
– ¿De verdad? – la adulta dejó la tiza en la mesa, se cruzó de brazos y miró a la joven rubia – La escucho, entonces.
La de ojos púrpura tragó y tartamudeó un poco. No había prestado atención en nada de lo que llevaba de clase. Jugueteó con sus dedos y tomó aire.
– Yo no -
– Estaba hablando de cómo se creó la percusión, no ha ni empezado, Charlotte.
La clase se giró hacia el chico que acababa de hablar.
Foxy.
La rubia tragó y aquella profesora miró al pelirrojo, antes de exhalar con resignación y volver a coger la tiza, empezando a explicar de nuevo. Chica alzó las cejas y sintió como sus mejillas se sonrojaban un poco. Él le echó una ojeada, ella le sonrió con suavidad, tímidamente.
Sabía que tenía que hablar con alguien sobre lo ocurrido, pero hacerlo con los chicos definitivamente le daba demasiada vergüenza.
Cuando la de ojos púrpura aún estaba perdida en sus pensamientos, mirando fijamente el papel de su cuaderno, el chico de pelo morado entró a la clase, tranquilo. Caminó hacia su sitio, sentándose con calma. La rubia volvió en sí y le lanzó un pequeño trozo de goma de nuevo. El chico se giró para mirarla, haciéndole bufar. Arrancó una pequeña parte de su cuaderno y garabateó con rapidez.
<<¿Y Freddy?!>>
Le lanzó el papel y esperó la respuesta del chico. Este lo leyó con calma, y luego se giró para encogerse de hombros y sonreírle como siempre solía hacer. Ella infló sus mofletes y se recostó en el respaldo de su asiento, resignada.
[...]
El castaño corrió como pudo mientras se reajustaba la sudadera adecuadamente y entraba a la cafetería de la universidad. Había decidido no ir a la primera clase para no interrumpir, total, historia de la música se le daba bien así que no había mayor problema, pediría los apuntes a Chica después. Aún así, y sabiendo que no era correcto, aquello no era lo que ahora ocupaba casi por completo su cabeza.
<<¿Por qué lo hiciste? Eso... podría haber acabado... mal>>
Aún así el castaño oscuro no reprochó nada, simplemente se quedó en silencio, haciéndole desesperar.
Fuera del castaño, quien miraba la mesa de la cafetería con resignación, y le daba pequeños golpecitos con las yemas de los dedos, se encontraba mirándole una chica rubia. Esta jugueteó con uno de sus largos mechones. Suspiró una suave sonrisa y se acercó con calma, hasta sentarse al lado del nervioso y pensativo castaño con su pequeña taza de café solo.
— Buenos días Freddy. Se te ve pensativo hoy. — Comenzó aquella conversación con una sutil sonrisa y su típico y dulce todo de voz.
— Ah — El castaño la miró rápidamente — J-Joy... Hola. ¿Pensativo? Bueno... Han habido un par de cosas que han pasado y ... — Entonces negó, sonriéndole amablemente — No te preocupes, total, no es nada.
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Mitades [FreddyxGoldenxFred] FNAFHS #SAVEGOLDDY [Pausada]
Hayran Kurgu- ¡Todos tenemos fallos! - ¿¡Tú consideraste todos ellos fallos!? - Bueno... - El chico tragó - ¡No le entiendes! - ¡Claro que lo entiendo! No puedo creer que me estés tratando de esta forma después de todo. Silencio ¿Cómo podía explicarle que él n...