La Otra Cara De Escorpio

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07 de junio 08.

El tiempo pasaba más rápido de lo que se sentía en los zapatos de los eslabones, primordialmente en la menor de los ahora 13 chicos. Cada minuto que pasaba estaba perdido, sin lograr ningún avance en el comportamiento de Escorpio. Sus colapsos se había vuelto más frecuentes de lo que debía y todos intentaban ayudar a evitar esos sobre niveles, pero nada daba frutos por demasiado tiempo, ella seguia detras del escarlata; pero nadie la culpaba, pues eran esos malos momentos o el destierro definitivo.

A pesar de las cargas extras, Libra también trabajaba en el templo. Había recobrado la vida de los jardines traseros y, siempre que podía jugaba con las bestias que la rodeaban por las tardes en las que, mientras Escorpio trabajaba, ella descansaba debajo de los árboles.

Era extraño no verla o escucharla por las tardes, incluso cuando llovía en los jardines ella corría bajo el agua como cualquier infante ante la precipitación de las nubes. Ofiuco navegaba detrás de ella como si de su padre hablara. Él se había convertido en su mayor confidente y amigo, aunque conversaba con todos, de algún modo el serpentario conoce más de ella que incluso su alter ego mismo.

El narraba largas historias que ayudaban a la llegada de Morfeo y velaba si era necesario para deslavar el efecto de las pesadillas, esos eternos temores que la atormentaban sin justificación alguna, solo aparecían. Razón por la que últimamente no se le veía tanto como antes en los alrededores o incluso dentro del templo.

— ¿no has visto a Libra? — cuestionó escorpio después de sentir una extraña falta de regaños del dia.

— no ha salido de su habitación desde hace días y tú apenas te dignas a preguntar por ella — la pregunta del menor había creado cierta indignación en el rubio quejándose por las faltas de atención del escarlata.

— no te preocupes... Si es que realmente puedes hacerlo — comentó Acuario ayudando a Géminis con una pintura — Ofiuco cuida de ella así que mejor has algo de... — como de costumbre, el escorpión se marchó dejando a la chica con las palabras en la boca.

El taconeo de su zapatos sonaba por el pasillo, rebuscando entre las puertas como si no supiera hacia dónde dirigirse.

~~~

— ya estoy mejor, yo puedo acabar con todo eso — protestó la chica de Venus hacia el pelinegro que merodeaba por la recamara dando orden a el lugar.

— tus cuidados son mi trabajo, ademas aun sigues demasiado pálida como para decir estar mejor — una suave risa escapó de los labios de Libra haciendo sonreír de satisfacción a su compañero — sabes... Desde que te conocí he intentado descifrarte pero simplemente no te comprendo — comentó observando como aquella sonrisa que él había creado se desfiguraba a algo más deprimente.

— todos tienen motivos y pensamientos muy bajo llave — contestó finalizando con un ligero suspiro.

— aun así, no veo ninguna inspiración para que continúes detrás de Escorpio, a menos que seas una masoquista —

— quizás sea un poco masoca*— bromeó con una de esas sonrisas fingidas que te plasman dolor.

— puedo convencer a Zeus para que rompa el trato y haga lo que deba hacer con Escorpio — sugirió sentándose en la extensa cama de la habitación.

— No es necesario... —

— ¿confías en tus habilidades para cambiar a ese escorpión? O mejor dicho ¿confías en que él cambiara asi porque si? —

— bueno... — la duda podía sentirse y escucharse en su voz sin necesidad de una respuesta clara — ... No puedo asegurar nada, pero creo que el problema soy yo y no él — ... — desde que yo llegue me he envuelto en cosas en las que nunca debí envolverme —

No son solo estrellas (Libra X Escorpio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora