Capítulo 4.

11.4K 1K 1.4K
                                    

EDITADO 27.02.2018

—Ustedes dos son demasiaaado problemáticos. —Comenzó a hablar Evan, mientras se iban del parque —. Podrían solo haberse pedido una cita, y ya.

Ambos rieron con nerviosismo.

—Adolescentes. —Renegó, como si tuviera cuarenta años otra vez.

Louis había tomado la iniciativa de pedirle el número de teléfono a Harry, y este entre risitas se lo dictó. El rizado no quería imaginarse como lo habría agendado, o tal vez sí.

¿Harry?

¿Hazza?

¿Harold? 

¿Roberto?

Recordó lo mucho que se había burlado Louis cuando le dijo que su nombre real era Harold y lo comparó con Roberto.

Y se preguntaba también cómo reaccionaría él cuando le envíe un mensaje.

¿A qué se deben tantas especulaciones, Harold? ¿A caso Louis te gusta?

Y claro que sí, Harry no creía en el amor a primera vista, quizás atracción, que por cierto Louis le pareció muy atractivo en cuanto lo vio, pero eso no viene al caso.

A Harry le agradaba Louis, a Louis le agradaba Harry.

Mensaje entrante. 

123123123: Hola! :)

¿Quién eres?

123123123: ¿De esa manera pretendes ir a tomar helados de nuevo? :(

¡Lou! Lo siento, pensé que era un tipo de acosador o algo así...

Louis*, lo siento

Lou*is: Podría acosarte, así cumplir tus expectativas ;)

Eres más descarado por mensaje, jaja x

"Jaja x" ¿Qué demonios? Solo, ¿qué demonios? Estaba completamente en contras de ese tipo de mensajes idiotas. ¿De qué se reía? ¿La equis acaso por qué? ¿Estaba marcando un tesoro y de repente era un pirata? ¿Qué mierda, Harry? Contrólate por el amor de Dios.

Lou*is: Es que por mensaje tu linda cara no me distrae, de todas formas, debería estar ignorando todo el tiempo tu foto de perfil.

Harry sonrió a la pantalla de su celular. Planeaba invitarle otro helado el día que por fin lo contratasen, Zack le había dicho que tenía mucho potencial y que "aquí entre nosotros, no eres de esos idiotas de veinte y tantos años completamente sudados".

Ignoraba el hecho de que, ahora mismo, estaba rojo como un tomate. Tirado en la cama de su habitación, mirando la pantalla de su teléfono con una sonrisita tonta, no tan típica en él.

Evan se cruzó por frente de su cuarto, con un vaso de chocolatada en mano, iba a pasar de largo, claro que sí, tenía mejores cosas que hacer, pero eso no lo iba a dejar pasar por alto.

—Tienes esa sonrisa tonta, hermano. —Se burló el pequeño, entrando a la habitación.

—Ni que lo digas...

—¿Te gusta, no es así? —le preguntó, como si de lo más serio del mundo se tratase.

Harry solo bajó la mirada a su teléfono.

Shut up, brat!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora