EDITADO 02.08.2018
Las manos de Louis estaban sobre la nuca del rizado, y el ojiverde sintió como lo acercaba más a sus labios.
Comenzaban a sentir el aliento del otro sobre sus rostros, el mundo se desvanecía lentamente.
La distancia entre ambos desapareció, en un profundo beso.
Louis comenzó a mover su boca, y Harry lo siguió, fundiéndose en un beso. De repente, ambos estaban recostados sobre el sofá. Louis abajo de Harry y este entre sus piernas.
La situación comenzó a subir de temperatura rápidamente, porque, vamos, habían estado posponiendo ese momento durante días.
Las manos de Louis comenzaron a recorrer el cuerpo del rizado, su pecho, la cintura, el trasero. Presionó un poco provocando que Harry diera un respingo en medio del beso, sin apartarse ni un segundo de sus labios.
Las manos del rizado bajaron por el torso del castaño, hacia su entrepierna, acariciando la zona. Louis estaba duro, y Harry comenzaba a endurecerse también.
Harry presionó un poco, y el castaño jadeó. Harry sonrió ante eso.
La mano de Louis iba encaminada hacia la entrepierna del menor, cuando escucharon un llanto en la parte de arriba de la casa.
Harry se separó del beso, sonriéndole.
—Creo que es Evan... —Le dijo Louis, separándose un poco.
Porque claramente era completamente valido dudar de si era otra persona en la casa, cuando solamente estaban ellos tres.
El llanto se incrementaba, se hacía más histérico, y claramente se trataba de Evan.
Harry se levantó, dejó un corto beso en los labios de Louis y fue hacia las escaleras para subirlas corriendo.
A Louis le gustaba Harry. Y eso estaba bien.
El castaño se detuvo en cuanto se levantó, y recordó la erección de Harry al ver la suya, no podía creer que estaban a punto de hacer algo indebido mientras que Evan estaba en la casa, ellos estaban en la sala, sobre todo. Jodido Dios, que par de pervertidos.
Se acomodó un poco su erección para que no molestara al caminar, y se aventuró a ir hacia arriba, siguiendo a Harry.
Arriba había un largo pasillo hacia la derecha, lleno de puertas, y la última de ellas estaba abierta, con las luces encendidas, dedujo que era la habitación del pequeño.
En cuanto llego, la imagen que vio lo enterneció, Harry se había sentado al borde de la cama y abrazaba a su hermanito, que aún estaba llorando, pero esta vez ahogaba los sonidos con la camisa de su hermano.
—Lou, ve al baño, es la puerta de al lado, y trae el termómetro que está en la caja de primeros auxilios, ahí también hay unos paños para enfriar y calmar la fiebre —le indicó, a lo que el castaño asintió y fue en busca de dicho elemento.
La noche se había convertido en un caos, Evan estaba con un dolor de cabeza terrible, y rozando los cuarenta y un grados de temperatura.
Harry estaba comenzando a ponerse nervioso, justo antes de llamarle a Liam para que fuera a ayudarlo. La verdad era que ni Louis, ni Harry tenían idea de qué hacer.
A las tres de la mañana en punto había llegado Liam en su auto, estacionándolo sin fijarse cómo, y entrando a la casa del rizado completamente apurado, y en pijama.
Llevaba una pequeña bolsita en sus manos, eran un par de píldoras que podrían hacer que la temperatura del pequeño mejorase.
Cuando Liam llegó, el rostro de Evan se relajó un poco, y continuó llorando en los brazos del ojimiel. Este comenzó a dar órdenes sobre qué deberían hacer y, mientras tanto, interrogaba a Harry sobre la comida que habían ingerido antes de dormir, o si en algún momento se expusieron al frio de manera exagerada.
A las cuatro y media por fin Evan pudo dormirse, su temperatura había bajado un poco, pero no demasiado como para que Liam dejase la casa. Harry volvió a humedecer el trapo que tenía Evan en su frente, y lo colocó nuevamente.
—¿Te quedarás? —Cuestionó Harry, a lo que ambos chicos en la sala se dieron vuelta.
—Sí, mañana le prepararé algo para que Evan mejo-
— Le decía a Louis — le cortó Harry, brindándole una sonrisa tímida al castaño.
—Oh, sí, podría dormir en el sofá, si no te importa...
— Hay una habitación de huéspedes, al lado de la mía, puedes dormir ahí Lou, no hay problema — le dijo, sonriendole. — Liam puede dormir en el sofá.
—No —le cortó Liam —. Yo dormiré en tu cuarto.
Louis lo miró, con cara de muy pocos amigos, mal interpretando la situación. Liam se dió cuenta y se apresuró a aclararlo.
—Louis puede dormir en la habitación de huéspedes, pero tú dormirás en el sofá.
—¿Por qué? —Reprochó el rizado, casi a punto de iniciar una rabieta.
—Tu habitación está junto a la de Evan, podré escucharlo mejor desde ahí que desde el sofá.
Y así fue, a Louis no le agradaba la idea de que Liam esté durmiendo en la cama de Harry y él no, pero ya qué, Harry estaba en el sofá, y él estaba desvistiéndose para dormir en esa cama, horrible cama de huéspedes.
Un segundo antes de que cerrara sus ojos, se le ocurrió algo.
Se puso sólo la camiseta que traía puesta, quedando en boxers y medias, tomó la manta que cubría su cama y bajó las escaleras dirigiéndose hacia el sofá.
Harry dormía plácidamente abrazando una almohada y el castaño sonrió ante esa imagen, el rizado estaba en pijamas, y con esa cara tan adorable... Louis quiso capturar el momento para siempre.
Quitó la almohada cuidadosamente, tomando su lugar entre los brazos del rizado, y colocó la manta sobre ellos dos. Minutos después, se durmió el también.
Chaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan, para la niña de mi dedicación, le quiero decir que lo siento, pero es casi smut, gracias por tus comentarios❤.
Gracias por leerme, y espero que lo hayan disfrutado!
Perdón si fue medio kk, no estoy acostumbrada a escribir casi-smuts )? ¡Todos recemos porque Evan se mejore y deje de hinchar las pelotas el wueon!
Díganme que les pareció, sinceramente ahr
No se vayan✨🌸✨🌸✨🌸✨🌸✨🌸✨🌸
Mi Twitter: @bluegreenyls ✨🌸✨🌸✨🌸
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Shut up, brat!
Romance"Hey, eres bastante lindo, ¿Te gustaría salir con mi hermano?" "¡Oye! ¿Que te hace pensar que soy gay?" "Puess..." "Ya, calla, pequeño descarado, no necesito oírlo. ¿Quién es tu hermano?" "Ese rizado de allá, tiene 19 y está completamente de...
