Capítulo XI

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Holaaa! Feliz Año Nuevo a Todos!! son una de las experiencias mas bonitas de este 2016, espero me sigan leyendo en el 2017 :3 les deseo las mejores cosas y las mejores energías <3

Espero les guste el capitulo. Nos leemos el otro año ;)

Desperté con el sonido de todo mundo corriendo de un lado a otro en la habitación.

-Ella, levántate. Saldremos para Hogsmeade en poco tiempo -Hermione me quitó las cobijas de encima.

-Ya voy -resignada que no podría seguir durmiendo, me levante y me metí en la ducha.

Al rato ya estábamos desayunando y no había otra conversación que no era la visita al pueblo de Hogsmeade.

-Harry, te traeremos algo de cada tienda si podemos -dijo Hermione tratando de animarlo, ya que este no pudo obtener el permiso para ir.

-No quisiste seguir mi idea de la capa -replicó Ron

-No se preocupen -dijo algo desanimado- ya nos veremos en el banquete.

-Por cierto, ¿hoy no es tu presentación, Ella? -Hermione me miró y levanté la vista de mi plato.

-Eh... si, hoy es la primera... -dije algo nerviosa, hasta ese momento no me había sentido así por la presentación.

-Vaya, seguro te irá genial -mi amiga me sonrió y no pude evitar devolverle el gesto.

Tiempo después, todos ya nos encaminábamos hacia Hogsmeade en los carruajes. Al llegar todo mundo se dispersó y entro en varias tiendas a la redonda. Con Hermione y Ron entramos a Honeydukes y quedé con la boca abierta por la inmensa cantidad de golosinas que había. Probamos de todo y compramos mucho, casi quedo sin dinero y solo llevaba una tienda.

Al salir decidimos recorrer las calles y ver que más llamaba nuestra atención. Al final de una calle se hallaba un local donde varia gente entraba y salía. En letras amarillas se leía "Zonko's". Entramos y todo era fantástico, un olor a pólvora y alguna fragancia se mezclaba en el aire. Las paredes estaban llenas de raros y algunos coloridos elementos que no pude distinguir que eran. Entre las personas que se hallaban ahí, estaban los gemelos, que a diferencia de los demás estudiantes que veían todo con asombro y algunos otros no sabía que hacía cada cosa, Fred y George iban de aquí para allá tomando de las paredes objetos que ya conocían muy bien.

-Hola -me saludó Fred cuando nos cruzamos

-Hola Fred -sonreí- vaya, ¿llevarás todo eso? -dije mirando que traía sus brazos llenos.

-Si, necesitábamos recargar nuestro arsenal y no podemos llevar tanto por los pasadizos secretos -se veía emocionado y sus ojos brillaban de un color miel.

-Me imagino, ¿quieres que te ayude a llevar algo? Te veo atareado -levante mis brazos en señal de cargar con algunos de los objetos que traía.

-Esta bien, gracias -me pasó algunos y nos dirigimos a pagar.

Salimos de la tienda y los gemelos cargaban dos grandes bolsas llenas de objetos de broma.

-¿Qué harás ahora, D'frend? -George me preguntó mientras revisaba el contenido de su bolsa.

-Eh... iré a La Casa de las Plumas -dije no muy convencida y Fred lo notó

-¿Hermione y mi hermano irán contigo? -Fred me escudriñaba con la mirada

-No creo... ellos iban a Las Tres Escobas, supongo que los veré allá luego.

-Deberías ir con ellos, siguen merodeando los dementores por aquí. No quiero que andes sola -su tono era serio y lo notaba tenso.

Para Siempre FredDonde viven las historias. Descúbrelo ahora