Seguiré tirando de esta cuerda perpleja frente a tus ojos,
y comenzaré a decirte sin reparos que ni siquiera el más dulce de los besos,
ni siquiera el dolor más amargo,
despierta en mi interior algo tan extraño... Tan confuso.
Tan confuso como acariciar los versos de tu espalda,
y recitarlos uno a uno.
Algo tan grande y pequeño al mismo tiempo,
como refugiarme en tus manos y cerrar los ojos para encontrarte.
Algo tan absurdo como desearte las buenas noches y llamarte para que apagues las luces de la habitación a menudo...
Es nuestra vida;
Pequeña e inmensa,
sencilla y compleja.La historia de la vida en nuestras manos.
Algo que quiso ser y no pudo.
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Sin Tus Palabras...
ПоэзияNo sé si después de esto podré mirarte a los ojos, ni siquiera si esto está bien; si debería callarme y aceptar que lo nuestro es un simple otoño sin el calor esperado.