Sin Tus Palabras...

Ya No.

Ya no me depeinan tus suspiros,
ni siquiera se me acelera el corazón
cuando te miro.
Porque sé que el dolor viene sin opción,
pero quererse uno mismo gana en posición.

Ya sólo quedan unas cuantas cenizas
que queman de vez en cuando al remover los recuerdos,
o al verte con ella en la parada del metro.

No pasa nada.
Porque será mi propio esfuerzo,
el que hará palanca contra el miedo.
Porque el tiempo es sólo aire,
y no tiene ningún valor o peso.

No me retiene nada aquí,
salvo las ganas de reclamar mis derechos.
¿Qué ganaría al huir?
Sólo te deseo suerte,
yo ya me enfrento a mis sueños.

No daré lugar a nuevas heridas,
tan sólo pondré las cartas en orden,
y después las pondré boca a bajo;
sin que nadie las toque.

Empezaré de nuevo,
así ganaré mi batalla.
Gritaré sin miedo a la luna,
al sol,
al cielo.

Ya no creo en nada,
tan sólo en mí.
En mí tendré la confianza que nunca
vi venir.

Caminaré a paso firme,
destaparé la sonrisa que se esconde
tras este infierno;
apartarme de ti será el acto más fácil de este invierno.

Porque no será mi sed de venganza la que te retenga,
no deseo hacerte daño.
Porque yo te sigo queriendo,
pero valoré el amor sobrehumano.

Y descuidé lo importante,
Como mi padre,
Mi madre
O mi hermano.
Al fin y al cabo,
Son los únicos que te echan una mano.