Al llegar a la costa, una lancha conducida por una mujer los esperaba. Todos subieron por órdenes de William. Óscar lloró desconsoladamente, su esposa había fallecido en un abrir y cerrar de ojos. Kevin y Luke estaban sentados juntos. Travis abrazaba a su madre y ésta se aferraba al brazo de Elvis. William seguía observándolos fijamente mientras la mujer conducía la lancha hacia el destino. Era una noche estrellada y de luna llena... todo parecía empeorar...
Pasado un rato, todos divisaron luces. La mujer le dijo a William que habían llegado. Todos se dispusieron a bajar. Habían diez personas en la isla, en el centro se lograba ver una especie de torre de control con focos de luces en su zona más alta. No habían muertos vivientes; sólo humanos.
La mujer los llevó hacia esa torre. En el piso más alto había un cuarto con ocho sillas distribuidas en forma circular.
— Esperen acá - dijo la mujer -.
Y cerró la puerta. Todos guardaron silencio. Óscar continuaba sollozando. Pasaron quince minutos, era William.
— Bienvenidos a mi isla, ¿no es linda? - rió maquiavélicamente - lamento todo lo ocurri...
Óscar se lanzó sobre el hombre y comenzó a golpearlo con todas sus fuerzas. William intentaba defenderse, mas sacó su pistola y lo golpeó en la nariz, haciéndolo sangrar para luego acabar con su vida de un tiro en el pecho.
Kevin gritó fuertemente y lloró la muerte del hombre; Luke se contuvo apretand sus puños. William continuó riendo de esa forma tan perturbadora. La otra familia seguía unida. El hombre tomó el cadáver para lanzarlo hacia el vacío.
— No quieren que se convierta, ¿o si? - dijo -.
— ¿Por qué lo dices? - dijo Elvis asustado -.
— Recuerden que es casi cien por cien seguro que nos convertiremos en uno de ellos. No hay salvación alguna - lanzó el cuerpo al vacío -.
William se sentó en una de las sillas e invitó al resto al círculo.
— Como les decía. Bienvenidos a la isla. Cuando hicieron estallar mi fortaleza, me decidí a acabar con cada uno de ustedes. Pero no quería hacerlo de una forma aburrida. Quiero divertirme viendo sus caras de sufrimiento. Para eso, harán juegos... de vida o muerte. Ahora se dirigirán hacia un cuarto oscuro y tendrán que realizar la prueba. Les deseo suerte chicos, sayonara.
Y llegaron a buscarlos. Bajaron hacia el sótano de la torre. Allí habían cuerdas con vidrio incrustado, gillotinas, hachas balanceándose lado a lado, un parlante adherido a la pared y muchas cosas más. Todos tomaron sus ubicaciones.
Se oyó desde el parlante lo siguiente:
— Queridos participantes, bienvenidos a la primera prueba de la noche. Será una especie de carrera por la vida. Los cuatro que lleguen a la meta (a menos que no mueran), obtendrán el pase. Sólo eso, la explicación no hace falta darla, deben pasar por los obstáculos, claro está. Les deseo la mejor suerte del mundo y que ganen los mejores. Ah, una cosa: disponen de cinco minutos para realizarla, si no la cumplen en ese lapso, las paredes se contraerán rápidamente para aplastarlos. Ahora si, mucha suerte.
Se salieron de sus ubicaciones y se miraron a la cara.
— Esta será la última vez que nos vemos... ha sido un gusto estar junto a ustedes. Muchas gracias por todos los momentos que hemos vivido en este tiempo, han sido como una familia para nosotros - dijo Elvis -.
— Yo también digo lo mismo - agregó Lucy - son unos chicos muy agradables y carismáticos. No pierdan esa parte de su personalidad.
— Y acaben con William. Él esta loco - dijo Travis -.
Y se abrazaron. Se dispusieron a cruzar los obstáculos. Sus corazones latían fuertemente. Era de vida o muerte.
Kevin tomó la delantera, le siguió Elvis, Luke y luego Travis. Lucy se quedó estática en su lugar. Todo transcurría - afortunadamente con tranquilidad. Ningún muerto. Habían tres grandes zonas después de los primeros obstáculos: equilibrio, destreza y rapidez. Kevin llegó a la primera sección. Recordó mirar un punto fijo para pasar las pruebas, y lo logró. Elvis con dificultad lo logró. Luke iba en la mitad del trayecto y para no caer, pues perdía el equilibrio saltó hasta la plataforma. Travis estaba muy nervioso, llegó al palo que lo llevaría a la salvación si lograba superarlo, mas al ir en la mitad del trayecto, resbaló y cayó en las cuchillas giratorias matándolo al instante. Lucy asimiló las cosas... comenzó a llorar escandalosamente. Su hijo había fallecido. Elvis ignoró lo que estaba ocurriendo, aunque tenía el remordimiento en su conciencia. Kevin llegó a la siguiente estación. Debían escalar paredes con cuchillas en su constitución. Éstas servirían de apoyo para la realización de la prueba. Todo siguió normalmente. Lucy se decidió a cruzar los obstáculos... y comenzó a sonar la alarma. "UN MINUTO". Todos se pusieron más nerviosos. Kevin llegó a la última fase... hachas de un lado a otro se balanceaban con una gran fuerza y con una leve diferencia en los tiempos, permitiendo la realización de la misma. Elvis superó a Kevin pasando la prueba rápidamente y concluyendo el trayecto. Luke logró terminar el recorrido. Sólo quedaban en competencia Kevin y Lucy. La mujer llegó a la segunda prueba de milagro. "TREINTA SEGUNDOS". Las paredes comenzaron a juntarse lentamente. Kevin observaba atentamente las hachas. No sabía si hacerlo o no... pero su vida dependía de ello. Tenía que intentarlo... Luke y Elvis animaban a ambos participantes para que superaran la prueba. Lucy alcanzó a Kevin con una velocidad increíble. "QUINCE SEGUNDOS". Las paredes se hallaban mucho más cerca. "DIEZ SEGUNDOS". Lucy terminó el trayecto con esa velocidad inimaginable. Kevin inhaló y exhaló. Corrió con todas sus fuerzas. Las paredes se unieron en el momento en que el muchacho acabó la prueba...
Todos se abrazaron con mucha alegría. Pero Lucy no estaba tan contenta... su hijo había fallecido. Las paredes se volvieron a separar. Los mecanismos volvieron a funcionar. Lucy repentinamente sollozó con mucha tristeza y gritó: "¡Traviiiiis!" y se lanzó a las hachas, provocando que la sangre fuese disparada hacia todas direcciones, manchando a los hombres que quedaron vivos. Éstos quedaron anonadados ante tal situación... Elvis se arrodilló....
— L... Lucy... Travis... mi familia... - lágrimas salían de sus ojos -.
— Hey, debemos seguir si queremos sobrevivir... - dijo Luke palpando su hombro, mas Elvis rechazó el gesto y comenzó a gritar -.
— ¡MI HIJO Y MI ESPOSA MURIERON IMBÉCIL! Sálvense ustedes... yo quiero estar con ellos... son mi familia...
Y disponiéndose a lanzarse a las hachas, Kevin y Luke lo sujetaron con todas sus fuerzas. El hombre logró zafarse, pero los jóvenes seguían luchando para evitar el suicidio. Elvis golpeó las narices de los muchachos y se lanzó hacía una muerte dolorosa y rápida. Desde el parlante se oía una risa maquiavélica:
— Así me gusta... dramático, ¿no? Lamento la muerte de todos su amigos... ahora tendrán que realizar la última prueba... y yo participaré con ustedes...
Próximo capítulo: La Ruleta Rusa.

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Esperanza: El gran viaje
Science FictionResultó ser cierto... el apocalipsis zombie ocurrió, cada día habían más infectados. La situación fue de mal en peor. Sólo quedaba el 15% de la población humana a nivel mundial. Kevin, junto a su mejor amigo, Luke son unos de los pocos sobrevivient...