Hasta siempre...

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Quiero empezar a escribir el final, donde podré aclarar todo, hasta dudas que aún tengo.
Empezar por pedir perdón a todo aquel que haya leído esta carta, pero agradecerle también.
Me siento muy avergonzado, pero orgulloso a la vez. Sentí un amor que después de irse me llenó de dolor, hasta sentía cierto resentimiento. Aún así pude sentirlo hasta el último momento, me dolió, pero me enseñó. Aprendí que en la vida nos vamos a enamorar más veces de las que pensamos, no importa si la mayoría de las veces es de la misma persona (como en mi caso).
Está bien llorar a veces, es lo que nos hace humanos. Pero también debemos ponerle un límite, para no ser unos estúpidos masoquistas.
No recuerdo de dónde saqué que para olvidar a una mujer había que convertirla en literatura, pero gracias a eso pude "olvidar" a quien tenía todo mi amor.
El olvidar entre comillas hace referencia a que me olvidé de esa persona como a alguien que amé hasta el punto de dedicarle un libro, pero la recordaré siempre, más si la veo todos los días.
Me suena un poco triste escribir una despedida, pero en este caso no, porque estoy dejando atrás algo que me hizo mucho daño.
Me hubiese encantado que al final de todo, terminaramos juntos, como la típica historia de amor, pero esta no era una de esas... Era más bien de desamor.
Ni un "Gracias" es suficiente, ni un "Perdón" repara todo. Pero gracias por llegar y también por irte, perdón por no ser a quien buscabas, ni necesitabas.
Esta carta de despedida, más extensa que cualquiera demuestra los cambios que podemos sufrir en un rompimiento, más cuando hay altos y bajos, idas y vueltas.
Al leer esto (si algún día te tomas el tiempo de hacerlo) entenderás que a pesar de todo, había alguien que llegó a quererte ciegamente, incluso cuando tú no lo veías.
Aguanté tantas cosas, merezco un trofeo o unas felicitaciones, me alcanza el sentimiento que viene a mí al leer cada palabra que te dediqué.
No miento cuando digo que hasta llegué a reírme de lo patético que me sentí al hacer tantas cosas por vos, me desconocía.
A lo largo de la vida vamos a encontrar a personas que nos dolerá tanto dejar ir, no necesariamente tiene que ser un amor. Es decisión nuestra si dejamos que nos maten... Tenemos la opción de ser fuertes y seguir adelante, viviendo ese amor hasta que muera y de una vez ser libres de recuerdos, para poder sepultar cada lágrima que hemos dejado salir.
Yo hoy, no te digo "Adiós", sino hasta siempre.

Carta de despedidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora