Quiero Quedarme A Tu Lado (Yaoi)

Virgo. "Ella, La Más Odiosa"

Narra:Sagitario

Me desperté abrazando a Leo, de verdad que quiero quedármelo. Quiero que sea mio por siempre.

Cuando pensaba, sentí que se movió, lo miré y abrió los ojos, se sentó y miró  debajo de las sábanas asustado, suspiró aliviado. Tal vez pensó que habíamos hecho algo indebido. Tan lindo.

Sagitario.  —Buenos días. —le dediqué una sonrisa.

Leo.  —Buenos días. —me devolvió la sonrisa. —Voy a darme una ducha, vuelvo pronto. —

Leo se levantó y se metió a la ducha. Me quedé viendo mi teléfono que tenía 4 llamadas perdidas con 9 mensajes de
Cáncer:"Hola""¿Que haces? ""¿hola? “contestame" “oye""oye ""¿ donde estás?" estás bien?""¿Hola? ",y tenía  2 llamadas perdidas de Capricornio... ¿Que quería?

¿Debería llamarlo? No, no lo haré..

Tan distraído estaba que no me dí cuenta que Leo había vuelto, lo miré mientras se secaba el cabello, estaba vestido ¿Cuando lo hizo?...

Leo.  —¿Te gusta lo que ves? —me había olvidado de que me quedé  mirándolo.

Sagitario.  —Sí. —se sonrojó.

La puerta estaba abierta y la chica de antes había  vuelto, olvidé su nombre...

Virgo. —¿Ahora podemos hablar? —miró  a Leo.

Leo. —Claro, pasa. —la chica entró y se sentó junto a mi. Me sentí tan incómodo. —Bueno, para empezar, él  es Sagitario... Mi novio. —me señaló.

Virgo.  —¿Sa...gi...tario?—abrió sus ojos sorprendida. —¿Conoces a Tauro? —¿Tauro? ¿Conoce a Tauro?

Sagitario.  —Eh... Si... —en su cara se formó una cara de rabia.

Virgo.  —Por favor vete. Ahora. —señaló a la puerta.  ¿Qué? ¿Irme?

Leo.  —¿Qué?  No lo trates así, es mi novio, no tienes derecho a hablarle así. Mejor luego hablamos tu y yo, ahora tú sal de aquí. —ella no replicó y se fue.

Sagitario. —¿Tú  conoces a Tauro? —pregunté confundido.

Leo.  —Sí, es el mejor amigo de mi hermana. ¿De dónde se conocen? —se sentó junto a mí.

Sagitario. —Salíamos, pero me dí cuenta que él era muy celoso y no soporto eso. —

Leo. —Aveces puede llegar a ser así... Pero sólo con personas que realmente quiere. —

Sagitario.  —No tenía idea... Yo también puedo llegar a ser así... —sentí que mi teléfono vibró, lo miré y era una llamada de Capricornio. —Cuando quiero a alguien, no lo dejaré  ir y menos que alguien con intenciones amorosas se le acerque, no dejaré que te alejes de mí sin darte motivos. —ignoré la llamada de Capricornio y abracé a Leo.

Leo. —Te quiero. —

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Leo quería que conociera más a Virgo, así que organizó una cena en la que conviviríamos.

Cuando cenábamos, Leo fue al baño, dejándonos a Virgo y a mí en un momento incómodo.

Virgo.  —-¿Qué es lo que quieres de mi hermano? —me preguntó sin mirarme.

Sagitario.  —Su amor...¿Te desagrado? —

Virgo. —No me desagradas, es sólo que le hiciste mucho daño a mi mejor amigo y no quiero que le hagas lo mismo a mi hermano. —comió un pedazo de carne después de decirme eso.

Leo llegó y el silencio nos volvió a invadir.

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Leo. —¿Y? ¿Ahora adoras a mi hermanita, cierto? —dijo con una tierna sonrisa.

Estábamos fuera de la casa de Leo, abrazados. Él me rodeaba por el cuello con sus manos y yo le rodeaba por la cintura. Estamos casi de la misma estatura, sólo que como por cinco centímetros soy más alto.

Sagitario. —No quiero que te vayas a enojar, pero creo que tu hermana es muy fría, no me agradan mucho las personas así, pero haré un intento. —besé su frente.

Leo. —Me alegra saber que lo intentarás. —juntó sus labios con los míos, nos besamos delicadamente.

Nos despedimos, cuando estaba cerca de mi casa, pude lograr ver a alguien sentado en una banca que estaba afuera. Al acercarme, me sorprendí, era ella.

Me paré frente a Virgo.

Virgo.  —Conocí a tu compañero... ¿Con él  engañabas a Tauro...? ¿Tú y él son algo? —dijo sin mirarme y un poco molesta.

Sagitario. —Yo no engañé a nadie y sí, él y yo somos amigos. Eso no tiene nada de malo. —¿POR QUÉ  LE ESTOY DANDO EXPLICACIONES?

Virgo. —No quiero que te acerques a mi hermano. Aléjate de él, no le expliques el porqué, sólo aléjate. Deja de hablarle y mucho menos le digas que yo fui quien te prohibió acercarte a él. —dijo levantándose y yéndose.

No dije nada, pero no por eso voy a alejarme de Leo.

Esa chica, en definitiva, la odio.