Maratón 3/3
Alejandro
Decidí soltarlo todo de golpe, la señorita Blake es una mujer muy inteligente y seguro que con ella es mejor ser directo, eso ya me quedó bastante claro.
Sigo esperando su reacción, pero no dice nada.
Comienzo a creer que tal vez venir con ella no fue una muy buena idea, pero fue lo único que se me ocurrió.
Se levanta, entra a su cocina, y sale cinco minutos después con dos tazas de té que huelen bastante bien.
–No tengo una habitación de invitados. –Dice.
–¿Qué? –. Pregunto más confundido que antes.
–Quieres mi ayuda, y por lo que entendí, no puedes ir a tu casa, si saben dónde vives, pueden controlarte a cualquier hora. Te dejaré quedarte aquí, pero no tengo una habitación de invitados.
Genial, y yo pensando que esta mujer es inteligente.
Le suelto toda esta mierda de estar en problemas con personas que saben donde vivo, y ella me sale con esta chorrada.
–Me puedo quedar en esta alfombra–. Digo señalando a mis pies. –Recuerdo que es cómoda.
Ella suelta una pequeña risa.
Extrañaba escuchar su risa.
–No me importa si te quedas en el sofá, en la alfombra o el maldito corredor, pero debes ir mañana a clases, te quedan dos días antes que llamen a tus padres para preguntar dónde has estado. Éste edificio tiene sótano, no se puede entrar a él sin un carro o sin tener acceso a uno de los pisos para poder llegar en el ascensor. Yo te voy a llevar a la escuela y te traeré de regreso. Puedes estar aquí hasta que resuelvas tus problemas, o hasta que vengan tus padres, pero no puedes seguir faltando a clases. ¿Entiendes?.
Alguien que le diga a esta mujer que si una persona llega a ella con la sarta de cosas que yo le he soltado, se le brinda ayuda, pero no se le exige asistir a clases. Esta mujer no tiene corazón, eso está más que claro.
No chisto ante su única exigencia.
Espero no estar metiéndola a ella en problemas por esto.
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Como les dije, es una maratón pequeña, espero les haya gustado. Tengo grandes planes para esta historia así que espero lleguen conmigo hasta el final y averigüen lo que tengo planeado.
Gracias por leer.
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Un estudiante peligroso
RandomSi enamorarse es peligroso, lo es más cuando tu carrera y tu futuro están en juego. No está bien todo lo que hacemos ¿está bien todo lo que sentimos? No sé qué pensar al respecto. No puedo verlo como algo más, es mi alumno. Es peligroso. Es ilegal...