El reencuentro

Samantha y Scorpius

Definitivamente, no hay una fuerza más grande que el amor. Dirán que soy cursi, pero en mi caso, es cierto, mi amor por Rose me hizo tomar una decisión muy importante, dejar mi casa, mi familia, la seguridad que ellos me habían dado toda la vida, para empezar de cero y probarle a ella y a mi mismo de lo que era capaz. Logré mucho, y con el tiempo, su recuerdo se fue desvaneciendo del plano físico para quedar en el plano espiritual, es decir ella era como una musa lejana que me inspiró a cambiar y hacer todo lo que he hecho estos años. Luego ella llegó a mi vida nuevamente y me sacudió totalmente el mundo. Sentí con fuerza, con mucha mayor fuerza esos sentimientos, mi amor por ella no sólo no se fue sino que creció y me hizo sentir cosas muy lindas, me hizo sentir valiente, y logré lo imposible: escucharla decirme que me quiere. Pude por fin sentir sus besos, sentir su piel, su cuerpo pegado al mío, y la fuerza de mi amor me ayudó a aguantar también para no desnudarla y hacerla mía inmediatamente.

Hasta aquí todo es bueno, pero también la fuerza del amor se aplica a cosas malas. Como lo que acaba de suceder. Ella me hirió profundamente con tan sólo 12 palabras:

- Qué típico de los Malfoy... arreglando el mundo con su cochino dinero

Todo mi trabajo, todos mis sacrificios, todo lo que hice para impresionarla no sirvió de nada. Ella aún me juzgaba por mi nombre y mi familia. Nunca, jamás me había sentido tan herido. Tuve que decirle lo que hice por ella, y escupí mi dolor, con las palabras que le dije. Ella lloraba mientras me escuchaba, me pedía parar y mi corazón estaba estrujado por verla llorando, él solo quería que yo me callara, la tomara en mis brazos y borrara con besos todas sus lágrimas, pero seguí y seguí. El amor me había hecho mucho daño...

Y luego todo regresó, otra vez ella con unas cuantas frases aquí y allá se llevó todo mi dolor:

"Tu recuerdo fue lo único que me confortó", "¡Pensaba en ti todos los malditos días!, fantaseaba que te encontraba, que nos abrazábamos, nos besábamos, que estábamos juntos en la bañera después de ver una película."

¿La bañera? ¿Nos besábamos y nos abrazábamos? Mi corazón saltó ante esa imagen, se derritió, su dolor se fue, volvió a latir emocionado por ella y sus palabras

"Luego te encontré y me di cuenta de lo maravilloso que eres, te dije que admiraba tu trabajo, te admiro a ti, te veo a ti, te amo a ti..."

Ahí ya me tenía. No importó lo demás, no recordaba mi enojo ni mi dolor. Es que una cosa es querer a alguien, pero un te amo no se dice tan a la ligera, yo la amaba a ella, eso era claro, pero nunca se lo había dicho porque tenía miedo de asustarla, yo llevo en esta relación 14 años más que ella después de todo, pero esto lo cambia todo...

"Scorpius te amo, te amo desde... no sé cuando... quizá te amo desde que te vi ese día en el compartimento... tan lindo sentado con todos tus dulces.... "Está libre. Soy sólo yo", me arrepiento de haberme ido Scorp, pero lo hice, fui prejuiciosa y estupida, la vida me pagó con la misma moneda. No quiero perderte otra vez. Te amo. Te amo"

No sé exactamente cuando comencé a llorar, dicen que los hombres no debemos llorar, por supuesto si le preguntas a mi abuelo Lucius te dirá que un Malfoy jamás puede llorar, pero yo soy un tipo distinto de Malfoy. Toda mi vida he hecho las cosas diferentes y esta no iba a ser la excepción. Mi corazón estallaba de felicidad, y se desahogó llorando. Estas eran lágrimas de felicidad. Tenía a Rose en mis brazos, llorando (esperaba que también fuera de felicidad) abrazándome con fuerza, besándome después de decirme que me amaba. Yo quería con ese beso transmitirle todo mi amor, todo lo que yo siempre sentí por ella, quería que le llegaran correctamente mis sentimientos y que nunca jamás se volviera a sentir sola.