Christian me miraba entre preocupado y enojado, me pareció extraño que estuviera más preocupado que lo otro, contando lo que paso hace un momento y a la entrada con su noviecita debería odiarme
-Qué querías lograr golpeando a ese chico?-Me va a dar un sermón de moral, no es así?-Querías matarlo? Eres una mujer, no puedes ir por ahí tirando golpes a cualquiera Dahiana-Y aquí vamos por el sermón!!- Te das cuenta de los problemas que te puede traer eso
-No te hagas ahora el afectado-No podía quitar mi mirada de sus ojos grises-No hagas ahora como si te preocupara-Le di la espalda sin moverme de donde estaba-Por qué mejor no te vas a meter en las faldas de tu noviecita
-Celosa?-Dijo con prepotencia
-De esa rubia teñida?-Solté una carcajada carente de humor-Solo estas con ella por miedo a mis recuerdos-Me gire y alce una ceja hacia él, Christian parecía nada afectado ante mis palabras-Necesitas unos labios diferentes que besar y para que así el recuerdo de mis besos no te martirice-Me fui acercando de a poco, pero él parecía demasiado tranquilo, puedo jurar que de la comisura de sus labios salía una sonrisa-Extrañas tanto mis caricias y mi cercanía que intestas reemplazarla con algo que se me parezca
-Realmente te sientes así Dahiana?-El tono divertido en su voz me hizo tensarme
Podía ser que en verdad fuera yo quien me estuviera sintiendo así? Imposible!
-No extraño nada de ti Blake
-Síguetelo repitiendo, tal vez así puedas convencerte de lo que dices-No había notado su cercanía hasta cuando pude sentir su respiración muy cerca de la mia-Puedes dejar que Dylan te lleva al cielo pero jamás olvidaras cuantas veces te lleve a las galaxias con solo mirarte
En qué momento habían cambiado los papeles?
Desde cuando Christian Blake se había vuelto tan seguro de sí mismo?
Y por qué sentía que lo que estaba diciendo era cierto?
-Nosotros los seres humanos tenemos la mala costumbre de tratar de curar heridas abiertas de maneras insanas-Las palabras salieron de mi boca, sinceramente no era consciente de que estaba pasando a mi alrededor, desde el momento en el que Christian dejo sus manos en mi cintura-Corremos detrás de lo que nos parece que está bien
-Acabaste conmigo Dahiana-Sus palabras chocaron en mi cara y mi cuerpo se estremeció, no sé muy bien si por su respiración juntándose con la mia o por lo que sabía que iba a decir-No puedes joderle la vida a alguien y después irte como si eso fuera un juego-Su expresión se volvió seria y su agarre en mi cintura fuerte-Me lastimaste, cuando te vi irte esa mañana con Dylan mi mundo parecía irse contigo-Mi pecho se comprimió por el recuerdo-Esto
Saco de su bolsillo un pequeño cigarrillo y lo puso en sus labios, sin alejarse ni un poco de mi, lo encendió y dejo que todo el humo que salió de su boca inundara mi cara, cerré los ojos
-Christian....
-Dahiana tu creaste este maldito vicio en mi-Quería refutarle que no era así, que él solo lo había hecho pero mis palabras al igual que mi respiración estaban totalmente ahogadas-Me dañaste de todas las maneras en las que puedes destruir alguien
Soltó su agarre alejándose de mi, sentí un extraño vacío donde sus manos me habían abandonado, tomo otra calada y la expulso fijando sus ojos en el azul cielo, me quede mirándolo, incapaz de decir algo y después de que pasara unos segundos de silencio que parecieron horas me miro con sus ojos grises de una manera tan inclemente que pude sentir una punzada en mi pecho, sin saber en qué momento mis lágrimas empezaron hacer un camino por mis mejillas terminado en mi barbilla
Sin dejar de mirarme levanto su camisa dejando ver la parte de su costilla un perfecto tatuaje con un negro intenso, mi boca se abrió en una perfecta O, mis manos que habían estado abrazando mis brazos cayeron sin previo aviso
La palabra DAHIANA con una caligrafía perfecta estaba plasmada en su costilla, al final del nombre se formaba una especie de cigarrillo que terminaba con algo parecido a un humo
-Mis dos más grandes vicios en el lugar de donde salió la perfección-Sus palabras me hicieron mirarlo a sus ojos, su expresión seguía siendo fría y calculadora-Me la hice un día después de acostarme contigo aun sabiendo que todo se había ido a la mierda, pero sabes no me importo, porque sabía que siempre que la viera me recordaría en quien me convirtió-Hizo una pequeña pausa sin dejar de mirarme-En un hombre fuerte y seguro-Alzo sus hombros como restándole importancia a lo que había dicho
-Yo...simplemente, no sé qué decirte-Pausa y balbuceo salía de mi boca, mi mano voló a mi tatuaje sin ni siquiera darme cuenta
-Los dos sabemos que un tatuaje no es cualquier cosa, es una marca de por vida, que alguien te deja-Él parecía comprenderme más que yo mi misma, bajo su camisa y se puso frente a mi detallando mi tatuaje-Me gusta el tuyo-Su mano fría rozo la parte de mi clavicula donde estaba el tatuaje, un suspiro salío de sus labios y yo solo quería corre a su brazos
-Adios Dahiana-Mi corazón se detuvo y un extraño pitido se puso en mis oídos-Yo solo quería decirte que en verdad te ame, pero Tiffany, Dios ella me enseño que es que en verdad te amen
Nunca había sentido tanto ardor en mi garganta, el recuerdo de mi primo vino a mi cabeza. El dolor parecía mezclarse todo en uno mismo, mi estómago se revolcó, mi pecho se comprimió y mi cabeza dolía
-Lo siento Christian-Y corrí sin volver a mirar hacia atrás.
