Ninguna Eternidad Como la Mía (Nowaki x Hiroki) Omegaverse

CAPITULO 5 Sentimientos.

---Keichi---

Siento tanto coraje.

Una parte de mi quiere golpear a ese Alfa que trata de conquistar a mi Omega.

Hasta el restaurante percibo las testosteronas que está soltando.

Acaso...

¿No tiene vergüenza?

Al verlos sentí tanto odio.

Así que me acerque a ellos y sujete a mi omega de la cintura.

Lo recargue en mi pecho y mire a ese idiota con desafío.

Le deje en claro que Ishi es mío y me lleve a mi prometido.

Caminamos hasta el restaurante y tome su mentón.

-K-Keichi yo...

Lo silencie de un beso apasionado.

Soy un poco desconfiado.

Pero no hacía Ishi.

Sino hacía mí.

Soy un hombre muy celoso y posesivo.

Pero es así como me educaron.

De proteger a lo que más amo.

Ishi es un chico tan sincero.

Tan lindo y hermoso.

Yo lo amo.

-Keichi, -acaricio mi mejilla- no estés triste.

No me había dado cuenta que tenía una lágrima en mi mejilla.

-Lo siento. –bese su mano.

Creo que soy un sentimental de lo peor.

-Te amo Ishi.
-Keichi, yo también.

Lo abrace a mi pecho.

Me fue difícil conquistarlo.

Hace 5 años yo lo conocí, él era una persona callada, triste, un omega tan lindo pero con una mirada tan vacía.

Él estaba estudiando en el mismo curso que yo sobre cocina internacional.

Nos tocó trabajar juntos.

Conforme pasaba el tiempo nos fuimos conociendo.

Me gane su confianza a base de esfuerzo.

Él casi no hablaba con nadie.

Yo era su confidente.

Me conto lo que paso con su alfa destinado.

Pero que nunca lo marco como suyo.

Que simplemente.

Tenían relaciones.

Ese hombre solo jugo con él.

Pasaron dos años para que después de que le ayudara con el dolor, ayudándolo a superarlo...

Me declare a él.

Me enamore.

Y como si la suerte estuviera de mi lado.

Me acepto.

Empezamos a salir.

Citas, salidas, trabajos, sueños, metas.

Compartíamos muchas cosas.

Hasta que hace un año.

Nos entregamos al amor.

Lo hice mío.

Y me permitió marcarlo.

Mordí su nuca y anude en su interior.

Estuvimos "pegados" como media hora mientras le decía lo hermoso que es, que lo amaba.

Jamás lo vi tan tierno y hermoso, y recuerdo muy bien sus palabras.

"Gracias Keichi, me has enseñado a ser amado, y realmente yo, -susurro con sus ojos cristalinos- te amo, tanto, tanto"

Solo recuerdo que lo volví a hacer mío.

Su ser es mi todo.

Somos el uno para él otro.

Nuestros cuerpos son compatibles.

Nunca busque a mi Omega.

Porque cuando encontré uno me cambio por otro Alfa con más dinero y posición.

No quería a alguien "pobre" como yo.

Alguien que quería ser chef y no un empresario.

Me dejo botado.

Me sentí tan triste.

Pero Ishi fue mi salvación.

Siento los labios de Ishi sobre los míos.

-Ishi. –sonreí.
-Keichi, te amo, tanto.
-Gracias mi amor.

Lo abrace más a mi pecho para sentirme seguro.

---Nowaki---

Este omega debe ser mío.

Debe pasar por mis brazos.

Su dulce aroma.

Su esquicito sabor.

Sus labios son tan suaves.

Quiero besarlo más tiempo.

Se siente tan bien.

Este chico tan lindo.

Sus manos estaban en mis hombros y sentí su calor.

Jamás había sentido así.

Esta sensación de calidez.

De confort.

¿Qué tiene este omega?

¿Por qué es así?

Maldición.

Acaso ¿es un embrujo?

Este chico realmente...

Nos separamos por falta de oxígeno y lo mire a los ojos.

Sus ojos estaban cristalinos, acaricie su mejilla y lo tome de la cintura.

-Hiroki.
-E-Esto...
-¿No lo sentiste?
-¿Qué cosa?
-Esa chispa, -sonreí- algo que dice que debemos estar juntos.

Él se sonrojo y desvió su mirada.

Joder...

Si fuera una de mis conquistas.

En este momento estaría rogando por estar en mi cama.

Maldición.

No me digas que es virgen.

Su sonrojo es tierno.

Creo que sí.

Es puro y casto.

Y eso es lo que quiero.

Quitársela.

Que sea simplemente para mí.

Cuando iba a besarlo de nuevo, él coloco su mano en mi boca.

-...
-Lo siento, yo debo irme.
-Hiroki. –me sorprendí.

Se apartó de mi lado y tomo un taxi.

Quise detenerlo pero no me dejo.

Rechine mis dientes y apreté mis puños.

Maldito Omega.

Me siento cachondo por su culpa.

Maldita sea.

Pensé que él caería ante mis testosteronas.

Maldición.

Ese omega va a caer ante mí.

Lo he decidido.

Kamijou Hiroki va a hacer mi pareja.

Lo llevare a esa fiesta.

Él será mío.

Hiroki es mejor.

Quiero que él sea mi primera experiencia con un hombre.

Quiero tomarlo.

Hacerlo mío.

Debo comunicárselo a mis amigos, quiero que me ayuden para que sea lo más pronto.

Hiroki vas a ser mío.

Camine hasta mi auto y conduje por la carretera.

Tengo que arreglar este problema.

Juro que follare a Hiroki con tanta fuerza que no se podrá sentar por una semana.

No permitiré que me lo ganen.

Es simplemente mío.

Así que daré lo mejor de mí para conquistarlo.

Supongo que un Omega así se conquista con citas.

Tendré que llamarle a mi amigo y nerd Tsumori.

---Miyagi---

El aroma que desprendía mi Shinobu-chin era tan delicioso y muy fuerte.

Lo tome del mentón y lo bese.

Lentamente baje a su cuello y comencé a besarlo.

-M-Miyagi. –suspiro- A-Aquí no.
-Lo siento. –sonreí.

Lo cargue y lo lleve hasta mi habitación.

Shinobu es tan hermoso.

Me encanta.

Mi Omega.

Lo que siempre espere.

Le quite su ropa hasta dejarlo completamente desnudo.

Maldición.

Mi miembro está palpitando reclamando con fuerza ser atendido.

De solo verlo así me siento tan excitado.

-N-No me veas así. –jadeo.
-Eres hermoso Shinobu, hueles tan bien. –susurre en su oído.

Comencé a besar todo su cuerpo provocando que se estremeciera.

-M-Miyagi.
-Te amo Shinobu.

Tome su miembro y comencé a acariciarlo.

-Ahhh M-Miyagi.
-Me encanta ese sonido.

Me di cuenta que estaba goteando y su entrada se veía tan sexy.

Joder...

No puedo contenerme.

Mis impulsos me obligar a tomarlo con fuera.

Marcarlo y anudar en él.

Joder...

Debo contenerme.

No quiero lastimarlo.

Metí su miembro a mi boca y con cuidado inserte uno de mis dedos en su entrada.

Él ya estaba tan lubricado.

-Miyagi, -jadeo- ahhh.

Saboree cada parte de su miembro y metí otro dedo.

Mi amado coloco sus manos en mi cabeza mientras me aferraba a él.

-Ahhh e-es tan bueno. –jadeo.
-Te amo, te amo. –comente.

Después de unos minutos se corrió en mi boca.

Tan delicioso.

Tan tierno.

Sus sonrojos son impresionantes.

Me encanta.

Realmente.

Es mi Omega.

Me quite la ropa y mi miembro estaba muy erecto.

Shinobu me miro con esos hermosos ojos grisáceos.

Tan encantador.

¿Cómo no enamorarme de él?

-Voy a entrar. –comente.
-Y-Yo...
-Confía en mí.

Él asintió y coloque sus piernas alrededor de mi cintura, le i un beso apasionado y entre en él de una embestida.

-Ahhh N-No.
-¿Duele? –pregunte preocupado.
-E-Es extraño.
-Tranquilo, no te voy a lastimar.

Su respiración era irregular, su interior es tan bueno y cálido.

-Shinobu eres tan cálido, me encantas.
-M-Miyagi.
-Quédate conmigo.

Tome su cintura y comencé a embestirlo.

Se aferró a las cobijas mientras lo hacía con calma.

-Ahhh t-tan profundo.
-Lamento si soy brusco, sé que es tu primera vez.

En sus mejillas habían algunas lágrimas.

-Lo siento. –limpie sus mejillas.

Él tomo mi mano y me sonrió.

-N-No me siento mal, m-me gusta.

Siento como me enciendo de nuevo y lo coloco que cuatro.

-M-Miyagi.
-Lo siento.

Tome su miembro y comencé a masturbarlo.

-Ahhh n-no.

Mire su cuello y se veía tan delicioso.

Me acerque a él y me di una mordida.

-Ahhhgg.

Mi amado se quejó y se corrió en mis manos.

Siento como su interior se contrae apretándome tan bien.

-E-Está h-haciéndose más grande.
-Estoy anudando en tu interior Shinobu, -susurre en su oído- tendremos que estar así por al menos 30 minutos, lo siento.
-N-No pasa nada. –susurro.
-Te amo.

Empecé a lamer la sangre que le saque al morderlo.

Desde hoy este Omega es solo mío.

---Kisa---

¿Qué ha dicho?

Él....

Y-Yukina ¿se me confeso?

No...

Esto es...

-Perdón, -lo mire- c-creo que no te entendí.
-Kisa-san, -tomo mi mano- te amo
-...
-Me gustas tanto y me gustaría que fueras mi pareja.

Yo lo miro sorprendido y me quedo sin habla.

Esto es un sueño ¿no?

Un Alfa como él...

Tan perfecto y tierno conmigo.

Esto no...

No puedo creerlo.

No sé...

-Yukina. –murmure.
-Te amo Kisa-san-
-No sé que decir. –susurre.

Dentro de mí se muere por decirle que sí, que lo amo, que me deje estar a su lado como su Omega pero... la otra parte dice que es muy bueno para ser cierto, que seguramente se cansara de mí, que me tachará de cualquiera y se irá.

-No te preocupes Kisa-san, puedo esperar a tu respuesta.
-...
-Solo quería decírtelo.