Ninguna Eternidad Como la Mía (Nowaki x Hiroki) Omegaverse

CAPITULO 14 Enredadera.

---Akihiko---

De nuevo tengo esa sensación de que me falta algo.

La sensación de perder algo valioso.

Pero... ¿Qué?

No me gusta sentirme así.

Es una fuerte impotencia.

Joder...

No me gusta esto.

Maldición.

Debo ir a ver a Misaki.

Él debe de entender que no debe rechazarme.

Que debe contestar mis llamadas.

Y buscarme cuando lo indique.

Acaso...

¿Ese Omega no entiende?

Debe responder a mis demandas.

Maldita sea.

¿Por qué soy yo el que lo gusta?

Odio esto.

Juro que me las pagará.

Esto no se quedará así.

Me subí a mi auto y maneje hasta su departamento.

Maldición.

Esto me molesta tanto.

Al llegar baje de mi auto y camine hasta su puerta.

Estuve tocando como media hora.

Y el idiota de Misaki no salía.

Joder.

¿Dónde se encuentra?

¿Por qué me rechaza?

Se supone que es MI OMEGA.

SOLO MÍO.

¿Cómo?

¿Mío?

Maldita sea.

Me está afectando no verlo.

Joder.

Esto no puede ser posible.

Golpee de nuevo la puerta y me fui.

Me subí a mi auto y maneje a la casa de uno de mis tantas conquistas.

Necesito quitarme esta sensación.

Maldito Misaki.

Juro que cuando te vea te arrepentirás.

Pagaras caro tu atrevimiento.

No sé qué habrá pasado con él.

Siempre parecía un chicle a mi lado.

Pero él volverá.

Los omegas como él vuelven solos como las perras en celo que son.

---Hatori---

Voy a hacer que Chiaki me desee.

Ser su único pensamiento.

Que rechace a ese imbécil.

Que lo haga a un lado.

Y luego botar a ese idiota.

Le mostrare que conmigo nadie juega.

Le bajaré los humos a ese par.

Tendré la primera vez de Chiaki.

Cumpliré con su más grande sueño.

Pobre ingenuo.

Un chico tan torpe e idiota.

En fin...

Su olor es muy atrayente.

Joder.

No me quiero mezclar más con él.

Solo lo haré mío unas cuantas veces.

No planeo marcarlo.

Quien quisiera a un Omega idiota a su lado.

Solo él sirve para abrir las piernas y dejar que lo cojan.

Solo sirve para abrir las piernas a cualquier Alfa o Beta.

Lo vi junto a ese estúpido Alfa y no lo pensé dos veces.

Me apresure a llegar a su lado y lo besé.

DIABLOS...

Su sabor es tan delicioso.

Sus labios son tan apetecibles.

Siento como mi cuerpo empieza a reaccionar.

Mi entrepierna me da un tirón y gruño.

Necesito tomarlo.

Nos separamos por falta de oxígeno.

-Vienes conmigo Chiaki.
-¿Eh?
-Acaso, -susurre en su oído- debo explicarte que quiero hacerte el amor.

Sus mejillas se sonrojan y desvían su mirada.

-T-Tori.
-Vamos.

Lo tome de la muñeca y ese Alfa se interpuso.

-Quítate.
-No lo haré.
-VENGO A RECLAMAR A MI OMEGA.

Él me miro y cruzo los brazos.

-Tú solo quieres jugar con él.
-Eso es algo que no te importa y...
-Nee~ Hatori me dejaste esperando en el hotel, que malo.

Llega la tonta Omega de ayer con nosotros.

Siento la mano de Chiaki temblar y lo miro.

-Chiaki esto.

No sé como pero aparta su mano con fuerza.

-Que idiota, estaba por caer. –susurro.
-Chia...
-Vámonos Chiaki.
-Sí Ukyo, gracias.

Siento una fuerte punzada en pecho.

Joder... Un poco más y era mío.

---Hiroki---

Aunque...

Extraño la Universidad.

El estudio, los libros.

Quisiera terminar mi carrera.

Ser un amante de la literatura.

-Piénsalo Hiroki, eres mi mejor estudiante
-Shinoda-sensei.
-No dejes a un lado tus sueños.
-Yo...

La puerta se abrió y entró mi hermano.

Lo escuche gruñir al ver a Shinoda a mi lado.

-N-No pienses mal Kou, él es Shinoda-sensei, del que te hable hace tiempo.

Él medito un poco y se sorprendió.

-¿Es quién te salvo de esos malditos Alfas?
-S-Sí. –admití.

Mi hermano estrechó la mano de Shinoda y sonrió.

-Muchas gracias por salvar a mi hermano.
-No tienes nada que agradecer muchacho.
-Siéntate hermano.
-Me alegro que llegarás, -comento Shinoda- quisiera hablar contigo de algo.
-Ok.

Mi hermano se sentó a mi lado y me recargue en el brazo del sillón.

Shinoda le empezó a explicar sobre mi desempeño en la Universidad, sobre una beca que me daban por las calificaciones y que el director me apreciaba mucho, como un hijo porque siempre lo apoyaba.

Mi hermano me miro y sonrió.

No quiero que lo diga.

Él adopto a Shinya por mí.

El dinero de nuestros padres es de él.

Simplemente de él.

-Te lo mereces Hiroki.
-Pero...
-Shinoda, ¿podrías hacer el trámite para que mi hermano se reincorpore?
-Claro, el director está encantado de la noticia.
-Gracias a usted Shinoda-san, yo también estoy de acuerdo con que mi hermano se lo merece, tiene que cumplir sus sueños.

Shinoda nos siguió explicando sobre el plan de estudios.

Que no sería difícil reincorporarme ya que estaba casi por concluir.

Después de unas cuantas horas, intercambiamos números y dijo que vendría pronto para darme los horarios y papeles correspondientes.

Mi hermano dijo que saldría, así que le dije que iría por Shinya.

Me coloque mi chamarra y me tome un par de supresores.

Salí y comencé a caminar hacía la escuela de Shinya.

Para mi fortuna el mercado de Betas ya se había marchado.

Odio ver esos "espectáculos" como lo llaman.

¿Por qué?

¿Por qué los Alfas son así?

Aunque no son solo ellos.

Hay también Omegas que hacen lo mismo.

Maldición.

¿Qué clase de mundo es este?

¿Qué hicieron los Betas?

Maldición.

Maldito mundo de porquería.

Ojala que alguien pueda detenerlo.

Y darnos a todos esa libertad que deseamos.

¿Es mucho pedir?

Pero...

Ese Alfa de porquería.

Solo por un simple rechazo nos quita libertad a los Omegas y a los Betas les toca la peor parte.

Al llegar a la escuela me di cuenta que un faltaba 10 minutos.

Me quede recargado en la pared y suspiro.

-Hiroki.
-R-Ren.

Después de tres años lo vuelvo a ver.

A decir verdad.

Él es un Alfa, al cual yo sentí interés hace mucho.

Me gusto por su forma de ser.

Pero ahora solo tengo interés en Nowaki

¿Eh?

Yo...

No sé qué pensar.

-Hace mucho que no te veo. –sonrió.
-Sí, varios años. –sonreí.
-Te vez lindo. –acaricio mi mejilla.

Su tacto es cálido pero... no es como antes.

-Lamento haberme ido sin despedirme, pero fue algo improvisado.
-No importa.
-Pero ahora, -sonrió- quiero conquistarte, mi Omega destinado.

---Keichi---

Después de unos cuantos besos caminamos hacía el hospital.

Solo espero que Ishi no tenga nada malo.

Me muero si le pasa algo malo.

Es lo que más amo.

Es el Omega ideal.

Realmente.

Es perfecto.

Y aunque suene cruel...

Me alegro que su expareja lo haya lastimado.

Ya que pude conocerlo.

Y pude enamorarlo.

Estoy a su lado.

Y somos felices.

Es lo único que importa.

Debo de hacerlo feliz.

Llegamos al hospital y le hicieron varios analices.

En estos momentos estamos esperando los resultados.

No dejo de acariciar su mano.

Él se ve tranquilo.

Tan tierno.

Pero sé que también está preocupado por dentro.

Él está recargando su cabeza en mi hombro.

El doctor entro después de unos minutos.

-Joven Shizuku.
-¿Sí?
-Después de varias pruebas realizadas no hay duda alguna.
-¿Qué pasa doctor? –pregunte desesperado.
-No hay nada de qué preocuparse, a menos...
-¿A menos? –pregunto mi amado.
-De qué no le gusten los niños.
-¿Eh? –murmure.
-Shizuku presenta un embarazo de mes y medio de gestación.

Siento como mi corazón se acelera y miro a mi amado.

Un bebé.

Mi amado va...

-Y por los análisis realizados, tiene bastante probabilidad de ser un Alfa.
-Mi amor, -sonreí- gracias.
-K-Keichi, -sollozo- un b-bebé.
-Sí mi amor.

Abrazo su vientre mientras yo limpiaba sus lágrimas.

-Gracias, Keichi, me haces tan felices.
-No más que a mí. –junte nuestras frentes y lo besé.

Su sonrisa me cautiva.

Coloque mi mano en su vientre y sentí su calor.

Oh Dios, por favor... dame más vida.

Déjame proteger a mi familia, tan siquiera hasta que mis tesoros puedan sobrellevarlo.

---Shinobu---

Realmente odio el clima.

Hace mucho calor.

Tanto...

Que tuve que dormir en short y con una camisa ligera.

Extraño tanto a Miyagi.

Pero su rechazo...

Sé que fue mi culpa por descuidado.

En verdad lo siento

Pero me dio tanto dolor que no quisiera acercarse a mí.

Soy su omega.

Solo suyo.

Jamás podría ver a otros.

Solo a él.


Escuche el ruido del timbre y con pereza me levante de la cama.

Vi a mi amigo abrir la puerta y me acerque un poco más.

-¿Quién es Kent? –pregunte.

Él se dio media vuelta y vi a Miyagi con un semblante de odio.

-M-Miyagi.
-Apenas discutimos y...¿METISTE A OTRO ALFA A TU CASA?
-N-No es lo que parece.
-Sí, claro, eso dicen todos.
-Miyagi no...
-Eres como los otros Omegas.
-M-Miyagi...
-ESTÁS MALINTERPRETANDO TODO IDIOTA. –gruño Kent.
-Tú no te metas.
-ME METO PORQUE SHINOBU ES MI AMIGO.
-"Amigos" claro.

Kent tomo a Miyagi de la camisa y lo estampo en la pared.

-SHINOBU SOLO ME DIO HOSPEDAJE, SOLO ESO, NO PUEDO CREER, HUELE IMBECIL.

Miyagi se soltó y solloce.

-Esta casa solo huele a ustedes, -Miyagi me fulminó con la mirada- y pensar que eras diferente.

Se alejó y corrí hasta su lado alcanzándolo.

-Miyagi esto no...
-Suéltame.
-Nunca te he engañado y jamás lo haría, te amo.
-¿Se lo dices a todos?

No pude más y le di una bofetada.

-Ve guardando tus cosas, te irás a vivir conmigo.
-N-No.
-No te estoy preguntando.
-N-No me puedes obligar.
-Ve por tus cosas.
-Miyagi.
-HAZLO AHORA SHINOBU, ERES MI OMEGA Y NO DEJARÉ QUE VUELVAS A ESTAR CON OTROS ALFAS.

Me siento vulnerable.

Él está usando su "voz"

-S-Sí Miyagi.
-Y ponte ropa decente, así pareces una ramera.

Apreté fuertemente mis puños y mordí mi labio.

-Lo siento, haré lo que me pides. –solloce.




---Yukina---

Después de hablar con ese profesor.

Me propuse que ayudaría a mi hermano.


Quiero que siga adelante.

Que se supere.

Que estudie lo que más quiera.

Deseo que siga adelante.

Lo apoyaré.

Cuando fui a depositar el dinero de su inscripción pasé al bar.

Para mi fortuna...

Kisa estaba tomando un poco de agua.

Charlando con sus compañeros.

Respire profundamente y me acerque.

-Te hablan Shouta-kun.

Él volteo lentamente y se sorprendió.

-Y-Yukina...
-Hola Kisa-san.

Caminamos hasta un de las mesas.

-¿Cómo has estado? –pregunte.
-B-Bien, ¿y tú?
-Bien.

No me miraba.

Simplemente evitaba hacerlo.

Quería platicar con él y solo me ignoraba o sus respuestas eras vagas.


Soy yo o...

¿Está molesto conmigo?