La mañana había sido simplemente espectacular a pesar de que en ese tiempo que estuve junto a él no me atreví a decir una sola palabra por el temor que tenía, el que mi voz se fuera, de cometer un ridículo o peor aún, que Kristen comenzara una escena de celos desenfrenados causados por el hecho de que ella se sintiera amenazada por no tener el control de algo tan innecesario como lo era una sesión de fotos que, al fin de cuenta se trataba de fotos para el anuario escolar, pero esa necesidad tan... compulsiva que ella tiene por tomar el control causaría un gran problema.
El inicio de semana ya estaba, pero había algo que aún me tenía... ¿nervioso? ¿Ansioso? no sabía cuál era la palabra exacta de lo que estaba sintiendo en ese momento, lo único que podía hacer era mirara mi teléfono cada cinco minutos o menos en espera de un mensaje de Mónica.
Mónica es una chica de una cabellera rubia, podría decir que ella era mi mejor amiga o algo por el estilo, es la persona más tierna, comprensiva y generosa que conozco en este mundo. Sus padres y los míos trabajan en la misma empresa, son la mano derecha de los míos y mis padrinos por igual, así que podría decir que más que mi amiga es más como mi hermana, aunque, realmente solo nos vemos una vez a la semana y es muy poco lo que la veo.
Ella es quien me presento por primera vez a Kristen. El recuerdo de como lo había hecho llego a mi rápidamente al igual que por qué comencé a estar con ella aunque no sintiera nada por ella más que un simple aprecio, algo tan mínimo;
-Jack- Grito ella sacándome de mi pequeño grupo de amigos cuando cursaba primer año de preparatoria, con esa sonrisa tan radiante que podía lograr que el peor día de cualquier persona se volviera el más alegre de todos y esa mirada tan radiante - Ella es mi amiga, se llama Kristen ¿podrías creer que ella piensa que eres atractivo? yo opino que necesita lentes con mucho, mucho aumento.
Tras ella, de una manera tímida, de mejillas sonrojadas y una sonrisa nerviosa estaba Kristen, es ese momento creí que ella era así, tan tierna e indefensa causándome una cierta ternura, pero... todo cambio con el pasar de los días, días que se transformaban en semanas y así en meses, dejando de ser la chica tierna e indefensa para convertirse así en la chica más segura, y ambiciosa de todas, de aquellas que a pesar de seguir siendo linda en algunos sentidos era... posesiva, y creía que todo lo bueno que le pasaba en su vida podría seguir así con el simple hecho de mostrar una sonrisa y dejar ver lo bella que era.
-Jack- Dijo en una ocasión Mónica saboreando su paleta de hielo, aquel día era soleado y solo se escuchaba el silbato del profesor de educación física al entrenar a el equipo de americano, su traje de porrista deslumbraba al igual que su cabello, pero en su mirar podría detectar la preocupación que la invadía, siempre había sido muy mala para ocultar sus emociones, era como un libro abierto, uno para niños en manos de un mayor - Una chica... del equipo... ella es lesbiana, temo por ella, sus padres son muy estrictos y ven muy mal eso ¿Crees que sea bueno que salga con un chico solo para ocultar las apariencias?
Esa pregunta me había abierto la mente, yo no quería que mis padres se enteraran de mi sexualidad ¿y si hacia eso? ¿Pero quién sería mi novia? Quería decir algo, quería decirle que no lo hiciera, que mejor hablara con sus padres, peros sería tonto e ilógico viniendo de mí, así que me limite a solo mirarla.
A los dos días le pedí a Kristen ser mi novia, aunque estar con ella no me convencía mucho, y mi nana después de una larga charla termino por aceptar mi decisión siempre y cuando aceptara las consecuencias de mis aptos.
Es quien se encarga de comprar las mini historietas que Laura; la amiga de Ariel, realizaba cada semana, y la que compraba las fotografías para mí. Era raro saber que las horas pasaban y el medio día estaba cerca y no había una llamada, no había ni un mensaje, ni mucho menos los gritos de Laura diciendo que su fanática número uno había llegado para comprar una ¿Habría pasado algo? ¿Laura no sacaría esta semana un nuevo volumen? eran tantas preguntas que me invadían...
-Jack-. Se escuchó la vos del profesor William despegándome de mis pensamientos -¿Tienes la respuesta?
Mi mente se quedó en blanco por un momento, no tenía ni idea de lo que estaba pasando ¿cuándo había comenzado la clase? todas las miradas se posaron sobre mí, incluso la de Ariel quien parecía susurrarme algo pero no entendía muy bien, sabía que tenía que decir algo en ingles pero no sabía exactamente bien, hasta que le comprendí, todos tenían sus libros fuera y lo único que pude hacer era mirar el libro de Kristen fingiendo que sabía que era lo que me preguntaba para contestar.
- B, Does/Go
El maestro me miro con desconfianza, esta vez había logrado lo impredecible, que era engañar a el maestro, o eso creí hasta el momento de salir, la manera tan seria en que me detuvo me hizo ver que había algo mal
La lluvia comenzó a caer, tan rápidamente, tan fría, los nervios comenzaron a invadirme nuevamente, pero... esta ocasión no era por el hecho de que Mónica aún no se presentaba o no me mandaba mensaje, sino porque me sentía vigilado, intente ignorarlo y pensar en lo que me había dicho el profesor, necesitaba un tutor para su materia, y el que me vieran con cualquier persona del plantel no era algo que yo quisiera, pero... al decirme que aquella persona seria Ariel simplemente el tiempo se detuvo y la emoción recorrió cada parte de mi ser.
La sensación de ser vigilado se volvía cada vez más fuerte, comenzaba a sentirme incomodo e inseguro, me detuve a la mitad del camino, tenía que regresar adentro y olvidarme de ir a el auto, hasta que lo vi tras aquel árbol cerca de las canchas con la cámara fotográfica que siempre tenía consigo, él me estaba mirando, mis latidos se aceleraban cuando descubrí que el chico que me gustaba me miraba a escondidas, sentí mis mejillas arder y la respiración se me iba.
Y de pronto...
-¡Jack!-. Gritaba ella energética mientras su cabello dorado se movía de un lado a otro con un ejemplar de aquella historieta que la chica rara de mi salón vendía ¿Que hacia ella con eso? ahora mis latidos aumentaba pero no por el hecho de que Ariel estuviera detrás de Kristen mojado mirándome con confusión, sino por la mirada de ella -¡¿HAS VISTO LO QUE LA RARA DIBUJO!? LE DIRÉ A LA DIRECTORA
Tenía que impedirlo, tenía que hacerlo a cualquier costo, y como si mi cerebro no razonara bien, la tome de la muñeca arrebatándole la historieta para ocultarla en mi mochila y besarla, mirar a Ariel fue una tortura, el solo nos miraba a la par que Laura le susurraba algo y lo alejaba de allí ¿Porque me sentía tan molesto conmigo? ¿Era por la impotencia de saber que no podía hacer nada más?
(...)
Al regresar a casa y contarle a Nana todo lo que había pasado ella converso conmigo y me ayudo a saber qué hacer, el fin de semana que comenzaba mi tutoría con él tenía que actuar, tenía que descubrir si el sentía lo mismo por mí y si era así, comenzar a planear algo para estar a su lado y decirles a mis padres.
-Apestoso- Hablo Lizzy, la pequeña y hermosa Lizzy, mi hermana menor, tan bella y radiante con su vestido de princesa y su tiara que siempre la acompañaba en los juegos de té - Es hora del maquillaje.
Maquillaje...
No pude hacer nada al respecto más que evitar las fotos de mi nana después de que ella me terminara de maquillar, con aquella ropa estrafalaria mientras tomaba te imaginario, mañana seria otro día, solo espero sea aún mejor que hoy.
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Los chicos no se enamoran #dampremios2020
Teen FictionUna novela narrada en dos voces. La primera; Ariel es un joven callado apodado "El fotógrafo" por todo el alumnado de su colegió, el solo cuenta con su mejor amiga Laura quien tiene una manera de sacar dinero muy particular. Jack es el r...