Capitulo 56

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56.

- ¿Estas más molesta que aquella vez que me quede dormido en tu presentación de física?
- No -añado de inmediato al recodar aquel día- esa cosa jamás la voy a olvidar, esa molestia será la molestia de la vida.
- Oh por Dios (tu nombre) estaba muy cansado y ese tema prácticamente yo te lo di para que lo expusieras.
- Me estas queriendo decir que soy una no apta para entender temas y después pedir ayuda para así poder exponerlos y salvar la materia del recursamiento.

Daniel me sonríe y detiene su paso.

- ¿Qué? No me mires así Andrade.
- Era más fácil decir que eras una tonta.

Ok, mis niveles de dramática se alteran y no me importa hacer una escena en plena calle infestada de gente. Alzo la voz lista para empezar a gritar sin embargo los dedos de Daniel jalan mi playera, segundos después me tiene abrazada.

- Eres mi tonta, nunca lo olvides, te quiero mucho -dice en mi oreja y por alguna extraña razón mi piel de eriza- si tu estas bien yo lo estoy.
- Alto ahí loco -digo separándome y riendo- qué no es más fácil decir que quieres pasar conmigo a ver a mi padre, a decir todo ese drama melancólico.
- No era drama era la verdad.
- Tu quieres también ver a mi papa, lo quieres ver -repito.
- ¿Qué? -dice Daniel soltando una risa dramática y limpiando una lágrima imaginaria- claro que no, eso es mentira.
-Entrecierro los ojos y sonrió divertida- ¿Daniel?

Y pasa, el berrinchudo de Daniel aparece.

- Te juro portarme bien, no le diré las cosas que hacíamos, es más me quedare callado, no notarás mi presencia -toma mis hombros y me gira- por favor (tu nombre) sólo unas miraditas por lo que más quieras...
- Daniel basta -digo parándome en seco.
- ¿Si?
- Esta bien -añado riendo- tu muy bien sabes que...
- (Tu nombre) -dice alguien detrás de mi.

Giro rápido, quiero evitar el drama de quien me habla.

- Hola Sebas -añado sonriendo un poco- Hola Shan.
- Hola chicos -saluda Daniel acomodandose a mi lado.
- Pensé que regresarías.
- Pensaste mal.
- Alex esta mal.
- Lo lamento mucho Shan, las paracetamol son buenas para aliviar casi todo.
- En verdad esta mal.
- Y yo también lo estoy -digo un poco alterada- me mintió.
- Nos mintió -añade Daniel- que sujeto tan sucio.
- Callate tu -añade Shan.
- ¿Por qué? Porqué digo la verdad.
- Asi no se soluciona nada -habla Sebas- es mejor que...
- ¿Qué vamos a solucionar? -pregunta Daniel- esto no es de solucionar, esto ya no tiene solución, al menos para nosotros no.
- Deja de hablar por (tu nombre) Daniel- responde Shan.
- Y tu deja de hablar por tu hermano.

Golpe bajo.

- Solo queremos saber con quien te quedas (tu nombre) -añade Sebas.
- Con mi mama -suelto- estoy bien, no se preocupen, en unos días regreso a mi casa.
- ¿Tu mama esta aquí? -pregunta Shan.
- Siempre ha estado cerca de mi, yo la evitaba, recuerda -suspiro, se que Shan no tiene la culpa de nada pero estar cerca de ella me hace recordar- tenemos que irnos, tenemos planes...
- Esta bien -suelta Shan- avísame cuando te vayas a ir para despedirme.
- Claro, hasta luego.

Me giro y comienzo a caminar junto con Daniel.

*

-Pensé que si teníamos planes. -suelta Daniel mientras juega con sus dedos en la pared del elevador.
- ¿Y con que dinero?
- Con el mío. -suelta orgulloso.
- ¿Tienes? -pregunto esperanzada.
- No -suelta riendo- a verdad te engañe...

Las puertas del elevador se abren y corro detrás de el... Lo quiero golpear, lo voy a golpear... Por su parte él corre muy rápido hacia la puerta de el departamento veo que la abre y me lanzo sobre su espalda... Cae de cara y yo sobre el...

- Oh por Dios -escucho la voz de mi madre.
- Estoy bien -suelta Daniel.
- Yo también estoy bien mama -añado quitando el cabello de mi cara- Daniel es bueno para...

Mi corazón de acelera al ver al tipo al que le tiré el café en la empresa de Alex, ya debería de llamarlo Geoffrey, el punto es que este señor me mira incrédulamente, ambos estamos sorprendidos.

Me levantó de inmediato y acomodo de nuevo mi cabello dejando un mechón tras mi oreja, Daniel se levanta, se pone a mi lado y su vista y la mía se clavan.

- Este -toso, no se por que tengo nervios- ¿Dónde esta Isaac?
- Aquí -añade desde la puerta de la cocina, esta cruzado de brazos, conclusión esta molesto.
- Cariño... -añade mi madre.
- Te juro que no quise tirarle el café encima a este señor...
- ¿Ya se conocen? -añade mi madre sorprendida.
-Tuve un pequeñísimo incidente con él, te juro que no fue intencional.
- (tu nombre) no miente señora -añade Daniel.
- El no estuvo ahí -habla por primera vez el hombre de traje.
- Pero mi insisto de amigos no miente y se que dice la verdad.

Miro a mi madre.

- Cariño tenemos que hablar.
- Lo estamos haciendo, aparte me dijiste que hoy iba a conocer a mi padre, no hay tiempo, tengo que ver al viejo que no se hizo responsable.
- Al señor idiota -añade Daniel- y yo también quiero conocer al inepto ese.

Isaac suelta una risa, y yo no entiendo nada.

- Creo que el inepto se adelantó -suelta Leonel- yo soy tu papá.

Mi corazón se acelera, esto no puede estar pasando... No él...

- Esto se escucho muy de Star Wars- dice Daniel con voz temblorosa.
- Tenemos que hablar cariño -sultán mi madre, y esas palabras son suficiente para saber que lo que dijo Leonel es verdad, oh por Dios, mi padre es el mismo tipo que le quiere quitar la empresa a Geoffrey.

Identidad FalsaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora