Capitulo 54:
- ¿Terminaste? –Le pregunto, mientras veía como ella se sobaba la panza.
- Si, creo que.. cocinas spagüetti mejor que mi madre –Le dijo y el rió.
- Oh, gracias. Eso es un alago.. –Le dijo burlón.
- Oye, es enserio –Le dijo.
- Te creo –La miro y le tomo la mano- Necesito decirte algo.. –Le murmuro.
- ¿Así? –El asintió con la cabeza- Okey, dilo.
- Okey, ven –La jalo hasta quedar en la orilla del balcón.
Los dos se recargaron en los barrotes de madera ella con los codos en el barrote, y el atrás de ella abrazándola. Respirando en su cuello, mientras ella se sonrojaba y veía las estrellas.
- Te amo –Le beso la mejilla.
- Yo también Justin –Le dijo ella.
- No sabia si regalarte un oso grandote con globos –Le dijo y ella rió- Oh un ramo de rosas.. oh una cena.
Ella sonrió, Justin se había puesto a pensar, que regalarle, a pesar que ella estos días estuviera molesta con el.
- Y escogiste la cena.. –Le dijo ella.
- Mmm, no –Ella frunció el ceño.
- ¿A no? ¿Y esto que fue?
- Solo la cena.
- Sigo sin entender..
- Ven –El le tomo la mano y la jalo de nuevo hasta el cuarto de la cabaña.
Justin encendió la luz. Y en el cuarto, en un rincón, estaba un oso. Gigante. Con muchos globos abarrados en sus manos, ella sonrió y se acerco a el, y se sintió diminuta, el oso era más grande que ella. Después Justin le apareció por atrás, mientras ella leía lo que decían los globos que estaban en el oso.
‘Te amo’.
‘Gracias por estar conmigo’.
‘Eres lo mejor que me ha pasado’.
- _____.. –Murmuro Justin, y ella se volteo a verlo, tenia un ramo de rosas en sus manos.
- Oh, Justin.. –Le dijo ella y sonrió, El le entrego las rosas y ella lo abrazo- Te amo, te amo, te amooooooooo.
El la pego aun más a el, y la beso. Como el sabia hacerlo, de esa manera tan pasional, pero a la vez romántica y tierna. Le quito las rosas de las manos y la acerco a la pared y la beso de nuevo, sus brazos se enredaron en su cuello y el lo abrazo aún más. Justin lentamente se separo de ella y le acaricio la cara, apreciando cada una de las facciones de su chica. Solo suya. Justin camino hacia una pequeña mesita que había y saco una cajita, se la puso a ella en las manos.
- Ábrela, es para ti –Ella tomo la cajita.
Le quito el pequeño moñito que enredaba la cajita y la abrió, era un collar. La cadena del collar era de plata, y tenia un corazón, que estaba rodeado por más plata, solo para sostenerlo al collar. Era azul, era una piedra preciosa, era de cristal. Hermosa, ella miro a Justin que le sonreí tristemente, ella suspiro se hizo el cabello a un lado, le dio a Justin el collar le dio la espalda, dándole a entender que le pusiera el collar.
- Listo –Le dijo el y la volteo a ver.
- Justin, esto es.. es.. –Ella suspiro- Perfecto, gracias.
- Te mereces eso y más –Le dijo el y le tomo la cara con las manos.
- Eres perfecto –Rió- Creo que ya lo dije muchas veces hoy.
- Si, de hecho –El suspiro y de nuevo los dos caminaron al balcón y se posicionaron como lo hacían hace unos momentos- _____..
- Dime –Le contesto ella mientras veía el cielo.
- Ese collar era de mi madre –Le conto el y ella se callo y se volteo a el.
- ¿Y porque me haz dado algo así? No me molesta.. pero seguro es importante, ¿Por qué a mi? –Le pregunto.
- Porque, tu eres importante para mi –Ella sonrió- Y quiero que lo tengas.
- Esta bien –Ella sollozo y el le levanto la cara.
- ¿Qué pasa? –Le pregunto confuso. Ella tomo la piedra en forma de corazón del collar y la miro y después lo miro a el.
- Es que.. tu me haz regalado muchas cosas y yo ni siquiera te di algo.. –Le dijo algo triste, Justin sonrió.
- Tu presencia es el mejore regalo que puedo tener –Ella suspiro y lo abrazo, después busco sus labios y lo beso.
