Daehangminkuk

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Me encontraba frente al televisor en mi casa viendo detenidamente varios vídeos y presentaciones de Super Junior; lo que había visto el día de ayer me dejó muy impactado, no podía creer que a Ryeowook le interesara Kyuhyun.

Era el día de mi descanso, así que no había problema con quedarme en casa indagando un poco el KyuWook... O algo así supongo.

Durante el tiempo que estuve con ellos no advertí ningún signo de que esto pudiera ocurrir en un futuro, con alguno de los miembros; nos tratábamos como hermanos porque eso era lo que íbamos a ser, sin embargo, me gustaría saber cómo empezaron los sentimientos de Ryeowook. Kyuhyun es alto y bien parecido, es normal que algunas mujeres babeen por él, ¿Pero un hombre?... Se me hace extrañamente interesante.

-Jo~ng... Abre la puerta Jongwoon.

Varios golpes en mi puerta me distrajeron de mi diligente investigación. Escuchaba los quejidos irónicos que Chaejin decía del otro lado de la puerta.

-Jongwoon, tengo frío... Y hay un oso aquí afuera... ¡Oh no!, ¡Un tigre también!.

Rápidamente me levanté y fui a abrirle; él me saludo alegremente, luego entró tan familiar; caminó hasta mi habitación y frunció el seño en cuanto vio la tele encendida.

-Tengo que hablar contigo seriamente.

Me miró de manera imperial desapareciendo con ello toda la inmadurez que traía cuando tocaba mi puerta.

Le pregunté que de qué me tenía que hablar, ya que su repentina seriedad me desconcertaba; me acerqué a Chaejin y me sentándome en mi cama e invitándolo, con palmadas sobre el colchón, a que igual se sentara; sin embargo no lo hizo.

-Jongwoon, no me agrada lo que haces, esa obsesión tuya por Super Junior me preocupa al grado de no poder dormir. Sé que te sientes triste por no haber formado parte de esa banda, pero, el que te preocupes más por un álbum que por ti me disgusta en lo absoluto.

Reflexioné un poco sus palabras. Si me siento triste y si les tomo mucha importancia, sin embargo no es una obsesión ni tampoco me preocupo más por ellos que por mí; simplemente me gusta mucho y les doy mi apoyo como un fan.

Repliqué que no era una obsesión, aclarando sus suposiciones, o por lo menos intentando. También me levanté ya que me sentía como un niño siendo regañado al mirarlo desde abajo.

-Claro que lo es, todo el tiempo te la pasas rodeado de ellos, no escuchas otro tipo de música, no te diviertes de otra manera, trabajas en lo que sea sólo para comprar cualquier cosa de ellos y no eres feliz por tu propia cuenta. Te aferraste tanto a ellos que se te olvidó encontrar tu felicidad.

No sabía cómo responderle; algo dentro de mí decía que sus palabras eran veraces.

Yo amo a Super Junior porque son buenos, soy su fan y como cualquier fan compro sus cosas y espero sus álbumes, ¿Qué hay de malo con eso?, no es nada más que admiración y gusto.

Me quedé quieto, deliberando. Si sólo soy un fan, ¿Por qué sus palabras se introducen en mi ser acusándome algo parecido al remordimiento?, ¿Por qué me afectaba tanto?, ¡¿Por qué?!.

-Jongwoon, olvídate de Yesung y consigue un nuevo sueño.

-Kim Jong Woon, abra la puerta, el plazo para pagar lo que debe ha expirado, denos el dinero o lo demandaremos por incumplimiento.

Chaejin y yo dirigimos nuestra atención a la gruesa voz que aparentemente venían de la entrada de mi apartamento.

-¿Pediste dinero prestado?.

Negué con la cabeza al cuestionamiento de Chaejin sin quitar los ojos del sitio donde llamaba esa voz.

Mi amigo salió de mi habitación, y se acercó a la puerta para averiguar quién tocaba mientras yo lo veía asomándome desde el cuarto.

Quiero Decirte [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora