Ok, esto había pasado. Les conté a las locas que tengo por amigas sobre pelinegro, que no sé si hice bien en contarles. Por cierto hace días fue mi cumpleaños, catorce años. No sé si sentirme vieja. Pero supongo que es normal sentirse así.
Recorro los pasillos de la escuela buscando a la profesora de historia para entregarle mi justificante pero es imposible, en mi búsqueda tropiezo con alguien. Oh no... toda mi adolescencia había esperado para decirle alguna grosería a alguien que me fastidiara la existencia, creo que era el momento indicado..-Fíjate por donde caminas, imbécil-.Rapidamente me arrepiento de mis palabras. Siento mi cara enrojecer a niveles extremos. Esto no puede estar pasando, no no y mil veces no.
.-Wow... Ehmm... disculpa no fue mi intención-. Dice el chico por el cual babeo desde hace aproximadamente cuatro meses y no me había animado a hablarle. Mi primer encuentro con mi futuro esposo y esto me ocurre. Deberían darme el premio Oscar a la chica más estúpida del año.
Salgo corriendo como puedo sin saber a donde voy. Quiero que la tierra me trague viva, que los aliens me lleven con ellos. Oh tener el poder de rebobinar como yo quiera. Sin embargo nada de las situaciones anteriores sucede..-¿En serio eso sucedió?-.Suelta una sonora carcajada Selene.
.-Ya basta Selene no es para nada gracioso- Dice Emily sobandome la Espalda mientras intenta consolarme.
.-Siempre echo todo a perder...-.
.-Miranda ya deja de decir eso, tu no sabias que era él-.
.-Lo sé, si no nunca hubiera dicho tal cosa. Ahora pensara que soy una persona horrible-. Me siento avergonzada. Esto no debería estar pasando.
.-¿Por qué solo no intentas disculparte? Miralo de esta forma, ahora tendrás una excusa para hablarle.-Dice Selene.
.-No podría mirarlo a la cara-. Le respondo.
.-No nos dejas ayudarte Miri...-.Dice Emily.
.-Solo dejenlo Así, esperare a que esto pase. De todas formas nunca me hubiera animado a hablarle. Soy muy insegura de mi misma y siempre estropeo todo.
Ellas solo se miran entre ellas y se encojen de hombros.
Un mes había pasado desde aquella vez en que morí consumida por la vergüenza. Ahora estaba mejor, solo que no podía mirar ni de reojo a pelinegro porque sabia que él me miraba.
La profesora de Inglés me pidió que le llevará al maestro de literatura, que por cierto les había mencionado era gay unas cuantas revistas de moda, suena ridículo y gracioso a la vez. Me dirigía al aula en el edificio de al lado, iba sumergida en mis pensamientos cuando por fin llegué, Entregué las revistas y salí de ahí mientras caminaba por el pasillo.Mi mirada se Cruzó con una color esmeralda y no supe que hacer.
.-Hola... No vas a insultarme, ¿cierto?-. Me dijo él, su Voz, Dios. Era hermosa. La vez pasada cuando lo insulte no tuve tiempo de apreciarla, pero esta vez sí y era maravillosa.
.-Eh... ¡¡Claro que no!!-.me apresuro a responder. Noto que mi voz sale con un poco de nerviosismo, espero que no lo haya notado.
.-¿Vienes de mi aula?
.-Si, tuve que entregarle unas revistas al profesor de literatura-.
.-Ya veo, él a mi me enseña la misma clase-.-Por cierto, me gustan tus ojos, creo que ya te había visto antes.
Siento mis mejillas enrojecer y me empiezo a poner nerviosa.
.-Bueno, tengo que entrar a clase. Nos vemos-. Se despide.
Y yo me quedo ahí parada sin saber que hacer.
Termino de leer mi libro y me meto entre mis cobijas. Me quedo pensando en el día de hoy y en pelinegro. Hoy a sido un buen día. Con esos pensamientos en mi cabeza finalmente quedo dormida.
ESTÁS LEYENDO
Ojos Esmeralda.
Teen FictionCuando Miranda entró a la secundaria no esperaba tantos cambios, el crecer y el descubrimiento de nuevas emociones como el amor no era algo que estaba en sus planes. "Era octubre del año 2015 y entonces te miré, tus ojos color verde como dos esm...