8. El hilo rojo.

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.-¡¡Así se hace Miranda!!-. Me dice Emily. verán, les conté sobre lo que sucedió el día de ayer para mirar como reaccionaban.

.-Quien diría que nuestro profesor de literatura serviría de algo. Tal vez fue cosa del destino, leí una leyenda que dice que todas las personas tenemos un hilo rojo. La persona que esta destinada a ser nuestra alma gemela tiene el nuestro, no importa la distancia, esa persona lo tiene. Y están destinados a encontrarse-. Dice Selene contándonos esa leyenda.

.-Wow, no sabia que tu Selene leías-.Dice Emily riendo.

.-¿Por quién me tomas? Puede que no sea la alumna ejemplar pero paso mi tiempo libre leyendo cosas interesantes.

Me quedo pensando en Selene y su leyenda del hilo rojo ¿Podria ser que ese chico que me encantaba demasiado tuviera mi hilo rojo?
Mientras me dedicaba a fantasear siento que alguien me llama.

.-Señorita ¿puede contestarme lo que acabo de preguntarle?-.

.-¿Qué cosa señor?-. Pregunto nerviosa.

.-¿En qué mundo vive señorita Williams?-. Escucho como la clase estalla en carcajadas que hacen enrojecer mis mejillas.

.-Vaya con la supervisora, últimamente esta muy distraída-. Me dice muy molesto el profesor.

Con la vergüenza sobre mi me dirijo hacia la oficina de la supervisora. Nunca pude aprenderme su nombre.

.-Buenos días Miranda, pasa-. Me dice ella con una seriedad que me hace ponerme aun mas nerviosa de lo que ya estaba.

.-Tu tutor dice que ultimanente estas muy distraída en tus clases. ¿Puedo saber por qué?-.No pensaba responderle, pelinegro era mi secreto, bueno no tanto ya que Emily y Selene lo sabían. Pero ella no tenia porque saberlo.

.- Tengo problemas en casa-.Le respondo.

.-Ya veo... Ya sabes que cuando necesites a alguien con quien hablar aquí estaré yo. Oh también puedes acudir con tu tu tutor.- Me dice con una sonrisa demasiado forzada.

.-Lo pensare, gracias-. Trato de devolverle la sonrisa pero creo que me sale una mueca.

.-Puedes irte a tu aula-. Salgo de ahí y me dirijo a la banquita donde solemos almorzar mis amigas y yo. Pienso durante unos diez minutos sobre lo sucedido y no sé que me pasa... Dicen que el amor vuelve tontas a las personas. ¿Pero yo de verdad me sentía asi?

.-Hola Miranda-. Me dice Jill, tenía mucho tiempo que no hablaba con ella.

.-Hola Jill-. Le respondo con una pequeña sonrisa. A pesar de todo lo que había sucedido y que me había ignorado durante meses una parte de mi la consideraba todavía mi amiga.

.-Escuche que el profesor de Literatura te echó de su clase-. dice ella curiosa.

.-Así es, creo que exageró. Solo por estar un poco distraída-.Respondo.

.-Creo que nuestra niña buena del salón ya no estan buena, ¿cierto? Por cierto ¿Dónde esta Emily? Pensé que estaría contigo ya que ella ahora es tu mejor amiga.

.-Tuvo que ir con su novio-.Le respondo. No sé que quiere conseguir Jill con esta conversación, pero siento que todo lo que dice lo menciona con malas intenciones, ¿Sera mi imaginación?.

.-Emily suele dejar de lado a las personas. No te preocupes, deberías de tener una amiga que te apoye de verdad Miri-.no me había llamado Miri en mucho tiempo, siento un poco de nostalgia.

.-Si bueno... Es mejor que vuelva al aula, la siguiente clase esta por empezar. Es mejor que vuelva-. Le respondo, me siento un poco incomoda con esta conversación, mas aun ya que no se que responderle.

Mientras camino siento la mirada de Jill sobre mi espalda. Decido voltear hacia atrás y no me equivocaba ella seguía mirándome. Esto asusta un poco. Lo que más me preguntaba a mi misma era ¿de verdad Emily era una buena amiga? ¿Jill tenia razón en lo que decía?. No lo sabía.

Ojos Esmeralda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora