All I Ask [2] || Dakota Johnson & Jamie Dornan

VII

Dakota

—¡Por los novios!

Todos levantan sus copas mientras Jamie presiona mi mano con fuerza, sudada y fría temblorosa. Es lindo verlo así, mi familia lo aprueba y creo que no hay nada que yo pueda hacer al respecto.

—Salud. –Me susurra en el oido– Futura señora Dornan.

—Salud. –chocó las copas– mi idiota.

Le sonrió y le doy un beso en los labios sintiendo esa sensación tan gratificante que no recordaba hace mucho.

Mis amigos comienzan acercarse rápidamente a felicitarnos, entre ellos Emily, Chase, Blake que me mira todo el tiempo como si tuviese algo en la cara. Les sonrió y los abrazo y pasan a Jamie quien se ve radiante.

En todo lo que he vivido, jamás pensé que Jamie se atreviera hacer algo así, en el fondo siempre creí que después de todo lucharía en vano porque sé que él no era capaz de algo así, supongo que lo subestime.

—Jamie, Jamie, Jamie. –Dice mi papá acercándose a pasos largos con una seriedad escalofriante.—Sigo pensando que nadie merece a mi chiquita ¿sabes? –me abraza fuertemente mientras lo mira–Pero solo me basta como ver cómo la miras para saber que algún día decides dejarla ir, ella volara pero no porque no esté enamorada sino porque es fuerte y sé que saldrá adelante. Pero tú, no vas a ser más que un hombre desdichado por haber dejado ir al amor de su vida.

Jamie se conmueve con las palabras de mi papá y asiente despacio sin dejar de verme.

—Si la dejo ir algún día, Sr Johnson... seguramente estaría loco. –dice– Yo no puedo manejar la idea de no despertar cada mañana junto a ella, de ver su sonrisa, de ver cómo se arruga su nariz en el momento que se enoja, como se sonroja cuando algo le da vergüenza o como llora cuando se ríe. Yo solo no puedo vivir sin ella.

Siento que el aire me falta cuando termina de hablar y además noto que todo el salón está mirándolo.

—Bienvenido a la familia Jamie. –Le dice Don estirando su mano hacia él soltándome a mí.

Jamie me sostiene de la mano mientras el resto de las personas se acercan a saludarnos, todos menos Jesse. Quien nos mira con recelo desde el otro lado de la sala con la copa de champán en la mano. Mi mamá abraza a Jamie como si se tratase realmente de un pariente cercano.

Esto es lo más cerca que he estado de la perfección.

Todos se dispersan hasta el jardín. No puedo evitar mirarlo, en definitiva quiero vivir toda mi vida con él. Sonrió y él besa mi frente. Estamos por salir de la casa siguiendo a todos hasta el jardín pero Jesse llama a Jamie con una voz muy baja. Me tenso al ver que se acerca así que me aferro del antebrazo de mi futuro esposo negándome apartarme.

—Jamie. -repite- No pretendo disculparme por haberte golpeado hace unos días. –Asegura con soberbia.

—Jess. –Digo intentando que no siga.

—No, shh. –me lanza una de esas miradas amenazadoras de él que me deja estática– Esto es entre cuñados.

No puedo evitar soltar una risita tonta. Veo que Jamie está evitando reírse a pesar de la seriedad de mi hermano. Jesse siempre ha sido el más protector conmigo, creo que es porque sabe que no me ha ido exactamente bien en el amor y que es además, con quien tengo más confianza.