All I Ask [2] || Dakota Johnson & Jamie Dornan

XVIII

Jamie

Sí, sí. Sé que todos han de pensar que después de la entrevista que dimos Dakota y yo se desató un caos en las redes sociales y para ser franco, sí eso fue exactamente lo que pasó.

Dakota y yo desatamos una guerra intensa en Twitter, Instagram y todos los portales manejados por fans y periodistas, algunos con fundamentos, otros sin estos pero al final terminaba siendo más de lo mismo. La prensa amarillista que vende del escándalo. Después de todo este desastre, Dakota y yo decidimos encerrarnos (no tan literal) en su casa de Aspen. A veces viajábamos a Londres, a veces yo viajaba a Londres y regresaba con mis pequeñas pero siempre tenía que regresarlas.

Dulcie está más que feliz de saber que va a tener un hermanito, Amy todavía no entienden bien pero por lo menos está intentando balbucear y de hecho adora a Dakota que es lo más importante. Amelia entendió que lo mejor para todos es que llevemos la fiesta en paz así que también está colaborando, poco a poco hemos logrado salir de este desastre y por suerte, ya estamos a 3 de Febrero y empezaremos a salir por fin de Darker.

—Amor. –beso su mejilla y se remueve en el lugar haciendo un sonido con su garganta quejándose. —Tenemos que levantarnos.

—Cinco minutos. –Replica muy despacio mientras frunce el ceño sin abrir los ojos.

—Nos están esperando. –Insisto.

Dakota empieza a patear la sabana con mucha fuerza moviéndose hacia mi hasta que estamos descubiertos.

—¡Te odio! –Me dice mirándome intentando ocultar su sonrisa y su diversión.

—Es malo mentir. –Le digo besando su frente.

—Buenos días. –Sonríe tímidamente y se acomoda en mi brazos.

—Buenos días. –Acaricio los seis meses de embarazos notorios de mi mujer y la beso rápidamente.

Desde que regresé a las redes sociales me siento más cercano a la gente que quiero, no solo a mis amigos sino también a los fans que para bien o para mal están ahí apoyando cada segundo.

—¿Puedo tomarnos una foto? –Pregunto y Dakota me mira confundida.

—¿Por que la pregunta?

—porque quiero subirla a Instagram.

Dakota se carcajea y asiente lentamente. —Quien diría que terminaría siendo adicto a Instagram.

—No te burles. –Le digo tomando mi celular.

—¡Jamás! -me sonríe y se acomoda para nuestra foto.

—¡Ay! –Se queja Dakota.

—¿Que pasa?

—Se está moviendo. –Su mirada se llena de luz, de felicidad y pongo mi mano en la suya para sentirla, sentir a mi hijo, sentirlos.